TODOS CONTRA TODOS

El clamor por Fernández no tiene quién lo escriba en el norte peronista

En el Norte Grande, un tridente de gobernadores juega en el team CFK. En otros, prima la cautela. Libro de pases abiertos para el team Alberto 2023.

TUCUMÁN (Corresponsalía) El presidente Alberto Fernández evitó durante su energizante gira por Europa referirse con destrato a Cristina Fernández de Kirchner, pero eligió a los medios españoles para  chocar de frente con la vicepresidenta y para lanzarse "definitivamente" a la reelección. Este miércoles, el gobernador fueguino, Gustavo Melella, fue la primera autoridad provincial en echar leña al fuego del incipiente operativo clamor por un segundo mandato de Fernández. Sin embargo, en el otro extremo del país, la temperatura política es diferente y no está claro qué gobernador oficialista hará su aporte para atizar esas llamas. En las provincias del Norte Grande, el team Alberto y el team Cristina para el "debate de ideas" promete un fallo, por lo menos, dividido, a juzgar por los antecedentes.

 

Entre los gobernadores peronistas del Norte Grande el chaqueño Jorge Milton Capitanich se destaca por ser el de mayor cercanía con la vice. Si hasta la semana pasada a alguien le cabía alguna duda, estas se despejaron con el acto del viernes 6 en el que la expresidenta recibió el Doctorado Honoris Causa de la Universidad del Chaco Austral. Igual, el exjefe de Gabinete mantiene una prudente distancia para no ser señalado como un miembro de su vocería y arma su propio juego para las presidenciales del año que viene, otro motivo para inhibirse de formar parte del clamor que disparó el mandatario fueguino.

 

Capitanich integra un suerte de tridente de mandatarios del noreste argentino que alinea Chaco, Formosa y Santiago del Estero en las coordenadas que marca CFK. 

 

El 22 marzo de 2016, el expresidente Mauricio Macri visitó Formosa para poner en marcha obras de agua potable. A su lado se encontraba el gobernador, Gildo Insfrán, cuando una bandera argentina se desequilibró y golpeó en la cabeza del ingeniero mientras hablaba. En esta imagen se sintetizó la tensión que marcó la relación entre ambos dirigentes y eso fue anotado por el kirchnerismo más duro como un gesto de resistencia del norteño.

 

Si hasta entonces el impenetrable formoseño tenía vía directa con Cristina, desde entonces ya es considerado de su equipo. El senador José Mayans, presidente del bloque Frente Nacional y Popular, es quien expresa en la Cámara alta esa cercanía.

 

Sin ser peronista, el gobernador santiagueño, Gerardo Zamora, de extracción radical, no debe explicar que el crecimiento económico de su provincia, más allá del sello de su propia gestión, se debió a la estrecha relación que lo unió con el expresidente Néstor Kirchner y luego con la entonces presidenta. Nada interfirió esa relación que creció con los años. Tanto, que su esposa Claudia Ledesma fue electa presidenta provisional del Senado, mano derecha de la vicepresidenta en la Cámara alta. Nadie duda para quién jugaría Zamora en el caso de que las partes en beligerancia de la coalición gobernante no encuentren un punto de acuerdo y sobrevenga la fractura. 

 

Por su parte, los gobernadores de Catamarca y La Rioja, Raúl Jalil y Ricardo Quintela, que juegan en espejo en varios ámbitos, procuran mantener una prudente distancia de los cortocircuitos entre el Presidente y su vice. En las últimas semanas, se abstuvieron de hacer declaraciones que pudieran ser leídas como gestos de apoyo para alguno de ellos. Imitando estos mismos movimientos, el misionero Oscar Herrera Ahuad, del Frente Renovador de la Concordia, que apoyó la fórmula oficialista en 2019 pero juega al provincialismo y culpó al Gobierno por la derrota en las legislativas de 2021, se cuida de dar pasos en falso y se mantiene al margen de la interna. Algo similar puede inferirse del salteño Gustavo Sáenz  que, más allá de alianzas puntuales, no forma parte del oficialismo.

 

Osvaldo Jaldo  es el vicegobernador de Tucumán a cargo de la gobernación por la licencia de Juan Manzur, actual jefe de Gabinete, con quien cada vez más juega en equipo. Ante cada consulta de la prensa sobre la interna del Frente de Todos a nivel nacional, Jaldo hace un llamado a la unidad y pide enfocarse en la gestión. Manzur, fiel a su estilo, habla poco, aunque hace unos días en una entrevista al diario tucumano La Gaceta sostuvo: "Esperemos que las diferencias entre Alberto y Cristina se resuelvan a la brevedad".

 

Ahora, la proclama de Melella en favor de la reelección de Fernández pondrá blanco sobre negro hasta dónde los caciques peronistas del norte argentino se suben al operativo clamor que acelera la rajadura de la coalición gobernante.

 

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