Axel Kicillof tiene la aspiración de no hacer cambios en su gabinete. Eso incluye los movimientos por las candidaturas. Los motivos: está conforme con su desempeño y no abundan los reemplazos. Sin embrago, hay funcionarios y funcionarias de su equipo que asoman tanto para el Congreso como para la Legislatura bonaerense. En el microclima de la política provincial, suenan los nombres de Sergio Berni (ministro de Seguridad), Carlos Bianco (jefe de Gabinete), Federico Thea (secretario general), Teresa García (ministra de Gobierno), Julio Alak (Justicia) y Agustín Simone (Infraestructura y Servicios Públicos).
“Nuestra idea primordial es no desarmar el equipo de gobierno, que no se vaya nadie más, y eso va también para las candidaturas”, afirma un funcionario provincial a Letra P. La postura de Kicillof quedó expuesta claramente con el escándalo por el vacunatorio VIP, que eyectó del gabinete nacional al entonces ministro de Salud, Ginés González García. El presidente Alberto Fernández planteó la posibilidad de que el ministro bonaerense, Daniel Gollán, pasara a la órbita nacional. En La Plata se lo negaron. Ya habían cedido a la ministra de Desarrollo de la Comunidad, Fernanda Raverta, para que presidiera la ANSES. Desde el comienzo de su gestión, ese fue el único cambio en el gabinete del gobernador.
El segundo motivo por el que Kicillof no quiere cambios es la falta de figuras de reemplazo. Al inicio de su gestión, el ministro de Economía de CFK decidió no abrir su gabinete más de lo necesario. Hubo lugares para algunas figuras vinculadas a la vicepresidenta, como Berni, Alak y García; y otro puñado para La Cámpora, con Raverta primero y con el actual ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, tras la salida de la marplatense. En las primeras filas del gabinete no hay lugar para los intendentes ni para el massismo.
Sin embargo, en medio de las especulaciones de propios y ajenos por las candidaturas, los nombres suenan. “Dicen que no y después, en la última semana antes del cierre, van a querer meter gente por todos lados”, advierte un conocedor de la rosca bonaerense. Es una incógnita para el peronismo de la provincia cuánto peso querrá tener el gobernador en la confección de las listas, ya que el Frente de Todos deberá mantener un complejo equilibrio entre los intereses de La Cámpora, el Frente Renovador, los intendentes y, en menor medida, gremios y movimientos sociales.
El de Berni es un nombre que siempre está en danza. Sea por las intenciones personales del ministro de Seguridad o por su protagonismo nacional, aparece en cada sondeo de opinión como posible candidato a diputado nacional. “Sergio puede ser candidato sólo si se lo pide Cristina (Kirchner)”, afirma un hombre de su entorno y agrega: “Si acepta, va a pedir algún legislador provincial”. No obstante, la mala relación con Alberto Fernández es un obstáculo para una posible candidatura.
Bianco también suena para el Congreso. El funcionario tomó protagonismo en el último tiempo, principalmente a través de la comunicación del manejo de la pandemia, pero Kicillof habría sido taxativo ante una recomendación de llevarlo en la boleta nacional. “No tengo quién lo reemplace”, habría dicho.
El del secretario general de la gobernación, como ha señalado Letra P, fue uno de los primeros nombres que se mencionaron para representar a Kicillof en la Legislatura. Esa especulación no se apagó del todo. En el Frente de Todos miran con atención los movimientos del funcionario. Oriundo de José C. Paz, Thea camina la Primera sección electoral en modo campaña. En las últimas semanas, se reunió y realizó una recorrida en Navarro con el intendente, Facundo Diz; similar actividad tuvo junto al jefe comunal de Pilar, Federico Achaval; con el de Merlo, Gustavo Menéndez, visitó obras y estuvo en dos ocasiones acompañando operativos de compactación de autos, una en Mercedes, junto al intendente Juan Ustarroz, y otra en Malvinas Argentinas, con Leonardo Nardini.
Teresa García es una de las pocas funcionarias de perfil político del gobierno provincial. “Siempre es un número puesto para ser candidata”, destaca uno de sus colaboradores más cercanos, que no descarta su postulación. Es cierto. oriunda de San Isidro, la ministra de Gobierno fue diputada nacional entre 2005 y 2017 y senadora provincial de 2017 a 2019, cuando asumió su cargo actual. Además, es una de las personas de confianza de la vicepresidenta.
Pese al perfil bajo que mantiene, al platense Alak hay quienes lo anotan en la carrera por su experiencia y su trayectoria territorial en la capital bonaerense. También sonó con alguna fuerza el nombre de Simone. Sin embargo, el funcionario le aseguró a Letra P que, si en sus manos estuviera la decisión, ´preferiría mantener su cargo en el Ejecutivo, aunque aclaró: “Voy a estar donde Axel me necesite”.
En todos los casos, se trata de colaboradores que el gobernador considera fundamentales para la gestión del gobierno y en La Plata no convence la idea de candidatos que no asuman el cargo para que el podrían ser electos. Ante este escenario, no se descarta que busque en las segundas o terceras líneas de su gabinete como último recurso para no abrir el cofre que mantiene bajo siete llaves.