"La estrategia de Macri es de Macri", conceden y callan opiniones personales en Juntos por el Cambio, mientras la coalición opositora emitía un comunicado de apoyo al expresidente, que no se presentó a declarar en el juzgado de Dolores en la causa por supuesto espionaje a familiares de la tragedia del ARA San Juan. El texto de respaldo fue enviado (sin previo aviso) desde la oficina de Patricia Bullrich a dos presidentes de los partidos aliados, Alfredo Cornejo (UCR) y Maximiliano Ferraro (CC). Ni el radical ni el lilito opinaron más allá de los dos párrafos que firmaron y que llevan un título fuerte: "La conducta del juez Bava es abuso de poder en plena campaña electoral". También puso su rúbrica y trabajó con la jefa del PRO el excandidato a vicepresidente Miguel Pichetto, que por la mañana había visitado a Macri en su casa, en el mismo horario en que debería haber estado frente al juez. Los cuatro quedaron en línea y su postura decanta sobre el resto de la alianza.
"Desde Juntos por el Cambio manifestamos nuestra máxima preocupación frente a la conducta del Sr. Juez Federal subrogante de Dolores, Dr. Martin Bava, contra el ex Presidente Mauricio Macri en plena campaña electoral. Ante semejante desvío y abuso de poder, acompañamos el planteo de recusación de Mauricio Macri como herramienta legal para garantizar su derecho a ser escuchado por un juez imparcial", indica el texto.
El segundo y último párrafo contiene una advertencia al fuego amigo, quizás la principal razón del operativo armado por el dúo Bullrich-Pichetto: "Creemos que cuestionar esos atropellos de un juez parcial y manifiestamente incompetente es también ejemplaridad republicana. En este sentido, nos solidarizamos con el ex Presidente Mauricio Macri y exhortamos a que la situación se resuelva de forma tal que consolide el mejor funcionamiento de la Justicia". La clave es el sustantivo "ejemplaridad", el mismo que eligió el candidato a diputado nacional Facundo Manes para tomar distancia. El neurocientífico radical había dicho que, más allá del cuestionamiento al magistrado, quien es convocado a declarar debe presentarse, justamente, porque debe "ejemplaridad" frente a la sociedad.
En apariencia nadie agitará ese fuego. Los cuatro titulares partidarios que firmaron del comunicado guardan silencio y dejan en manos de influencers o figuras como Fernando Iglesias la batalla en el barro de las redes. En otros casos, evitan cualquier contacto con la cuestión y en esa lista pueden ponerse a varias de las máximas figuras nacionales de Juntos por el Cambio.
"Jones Huala, libre. Macri, preso. Los sueños húmedos de los que ahora dicen querer diálogo, consenso, acuerdos y sarasafirulete", escribió el diputado Iglesias que va por su reelección en Capital después de que la querella pidiera la detención del expresidente. Por el oficialismo opinó nada menos que el ministro de Justicia, Martín Soria: "Macri no cree en la República. Cree en las Mesas Judiciales y en el espionaje ilegal". Soria recordó además que "padecimos jueces que se reunían a escondidas con Macri en Olivos y en la Casa Rosada que te citaban a ocho indagatorias en un día". La grieta más grieta que nunca: la referencia del ministro incluye una defensa a Cristina Fernández, quien declaró varias veces en Comodoro Py y que fue convocada por el fallecido juez Claudio Bonadio para ocho causas distintas en la misma jornada.
De todos modos, en JXC hay disciplina mediática, especialmente por dos razones: no quieren agrandar el tema ni tapar el debate que en televisión mantendrán este miércoles las cabezas de lista bonaerenses. Solo responden quienes no tienen más remedio. María Eugenia Vidal es parte de ese equipo expuesto en campaña. En la última entrevista que concedió, respaldó a Macri. No tiene margen para decir nada en contrario, se oye desde su comité electoral, allí donde toman máximas precauciones para no cometer ningún error hasta el 14 de noviembre. A un mes de las elecciones "no hay margen para decir nada distinto a lo que ha dicho Macri", responden sobre su hilo de Twitter y sobre los argumentos de su abogado Pablo Lanusse. Amortigua cualquier cuestionamiento la decisión de regresar del exterior en la víspera de la segunda citación judicial. Además, toda la dirigencia coincide sin grietas en calificar a Bava como un juez "tendencioso", entre otros calificativos negativos con los que lo describen. No falta, sin embargo, quien diga que podría haber recusado al juez y al mismo tiempo presentarse en Dolores, lo que no ocurrió.
"Lo único que le juega a favor es que haya regresado", se le escapa a un importante dirigente sobre la estrategia judicial del exmandatario. La misma persona no se atreve a cuestionar a Manes. "Se tiene que diferenciar, sobre todo siendo un recién llegado", evalúan quienes consideran la posición del médico como un posicionamiento. Manes es algo así como "el permitido" que incluso puede acercar volumen entre quienes piensan distinto, sobre todo cuando las encuestas que reciben señalan que figuras como Javier Milei"se desinflan bastante". En otros casos, en cambio, lo miran de reojo y hasta con enojo: "un tribunero", le achacan al candidato de Salto, mientras esperaban con ansias (y cierta inquietud) la participación de Elisa Carrió en un programa de televisión el mismo día en que Macri faltó a la citación. Carrió no dijo ni una palabra. Tampoco le preguntaron.
Desde Dolores, por la tarde, movió una nueva pieza el juez Bava: rechazó in limine la recusación y volvió a citar a Macri para el próximo 28 de octubre. Su abogado dejó trascender que esta vez se presentará aunque cuestionó "el apuro" por responder y volver a convocarlo.