Con el recambio de gobierno y la derrota en Boca, Daniel Angelici reorientó su GPS: profundizó su presencia en la Unión Cívica Radical (UCR) y sacó del PRO a su estructura para competir en las internas por la conducción del radicalismo porteño. Esas elecciones quedaron congeladas por la pandemia por coronavirus y la rosca radical quedó en cuarentena, como también le pasó al binguero y operador judicial del macrismo, que extremó su bajo perfil. Esta semana, rompió el mutismo para aceitar su alianza con Horacio Rodríguez Larreta: mandó a su tropa a participar del plan DetectAr y participó de una videoconferencia con el ministro de Salud, Fernán Quirós.
Angelici lidera la agrupación Radicales por Argentina (RA) y movió a los militantes de ese armado para que colaboren con el programa de testeos que realiza el Ejecutivo porteño con el aporte del gobierno de Alberto Fernández. En ese marco, se realizó la videoconferencia de la que participó Angelici junto a su tropa. Entre otros, estuvieron los legisladores porteños Martín Ocampo, Ariel Álvarez Palma, Diego Weck y la auditora porteña Raquel Herrero. Hablaron Quirós y el ministro de Desarrollo Económico y Productivo, José Luis Giusti, radical y prenda de unión entre Angelici y el diputado y referente de la UCR porteña Emiliano Yacobitti con Rodríguez Larreta, como contó Letra P.
Los dos ministros brindaron un informe sobre el estado de la pandemia en la Ciudad desde la óptica sanitaria y económica. Concretamente, el grupo de radicales angelicistas cubre el territorio porteño con los rastrillajes puerta a puerta en el marco del plan DetectAr, que implica una búsqueda activa de personas con síntomas y seguimiento a contactos estrechos de los casos positivos para coronavirus.
El vínculo de Angelici y Rodríguez Larreta es cordial. Convivieron durante la era Macri y el jefe de Gobierno siempre respetó su presencia activa en la Ciudad, específicamente en el ámbito judicial. El empresario del juego mantiene una relación de amistad con el expresidente, mientras que a Larreta lo une una sociedad estrictamente política. Con la salida de Cambiemos de la Casa Rosada, Angelici se alejó del PRO y volvió a la UCR para disputar con Enrique Nosiglia, otrora aliado y flamante contricante, a raíz de su separación en la política de Boca.
El expresidente de Boca tiene delegados en el organigrama de la Jefatura de Gobierno, los organismos autónomos porteños y en la Legislatura porteña, donde forjó una alianza con Martín Lousteau y Yacobitti. Fruto de ese acuerdo nació la bancada UCR-Evolución, que está dentro del esquema oficialista porteño pero suele marcar sus disidencias.
La disputa Angelici-Nosiglia, acrecentada tras la derrota en Boca, se restringe únicamente a la UCR porteña y su renovación de autoridades. Detrás de las tensiones, hay un proyecto común de Angelici y Nosiglia: gobernar la Ciudad e incidir, desde la UCR, en la selección de candidatos de la nueva oposición para 2021 y 2023. En ese esquema, el senador Lousteau asoma como punto de unión y ariete de ambos para disputarle poder interno al PRO de Rodríguez Larreta.
