La vicegobernadora Gisela Scaglia y el presidente del PRO de Santa Fe, Cristian Cunha, ambos referentes de los dos espacios que pretenden la conducción partidaria, se reúnen este lunes en busca de algún entendimiento después que la Junta Electoral Nacional anulara el cronograma de votación.
La resolución salió por voto dividido dado que el angelinismo hizo pesar la mayoría que posee en la Junta Electoral distrital. Sergio Chitarroni y Lucas Petrali Lynch, los miembros de la Junta que pusieron los halcones, votaron a favor de apelar la resolución nacional, mientras que Juan Bautista Callegari, cercano a la vicegobernadora, lo hizo en disidencia.
Lo decidido por la Junta Electoral Provincial implica seguir adelante con el cronograma ya conocido e impugnado por los adláteres de la vicegobernadora. Así las cosas, este lunes se resolverán las impugnaciones y reclamos, el martes tendrá lugar el cierre de listas, y las elecciones seguirán fijadas para el martes 11 de junio, por lo menos hasta que la Junta Electoral Nacional resuelva la apelación presentada.
La ilusión de Federico Angelini
En la tropa de halcones estaban exultantes por la decisión de la Junta Electoral Provincial, que ellos controlan. Atribuyen la resolución que anula todo el proceso electoral a “vestigios del larretismo que quedaron en el partido” y confían que verán atendidos sus argumentos cuando la Junta Electoral Nacional resuelva la apelación planteada.
La anulación por parte de la Junta Nacional dio pie a especulaciones en torno a una intervención de parte de Mauricio Macria favor de la posición de la vicegobernadora, lo que pone en duda la fortaleza del vínculo con el ahora funcionario de Patricia Bullrich, quien siempre fue su hombre de confianza en Santa Fe. Esa relación viene siendo víctima de una lluvia ácida desde que el expresidente le reconoció autoridad a Scaglia, en su condición de vicegobernadora, para jugar por la conducción del partido, Cerca de Angelini niegan cualquier tipo de ruidos con el expresidente.
De hecho, los halcones se apuraron en avisar que “Mauricio no estaba ni enterado del tema” y apuntan que ni siquiera asumió aún como titular del PRO. “Lo va a hacer en quince días”, informan. La renovación partidaria que se avecina alcanza a la Junta Electoral Nacional, por lo que los “vestigios de larretismo” a los que atribuyen la resolución tienen fecha de vencimiento. Hombre precavido vale por dos: también cuentan, en estricto off the record, que tuvieron contacto con el actual elenco de jueces partidarios. Se deduce, entonces, que la decisión de apelar no fue un arrebato de furia.
En el ecosistema halcón también dicen tener las de ganar si la discusión se define -como debiera ser- por argumentos técnicos y no -como creen que sucederá- por rosca política. Entienden que el cronograma estuvo bien confeccionado y publicado y que la Junta Electoral Nacional fue notificada del llamado a elecciones internas de manera correcta. Algo de eso se plantea en la resolución firmada por el organismo electoral distrital en la mañana del sábado.
La respuesta de la Junta Electoral del PRO Santa Fe
La mayoría angelinista de la Junta Electoral Provincial aprovechó los fundamentos de la resolución en la que anunciaron su decisión de apelar para responder los argumentos por los cuales fue anulado el proceso electoral. En ese sentido, sostuvieron que “la información sobre el proceso electoral se publicó correctamente y estuvo accesible para todos los afiliados” y que “las intervenciones realizadas a lo largo del proceso permitieron la participación justa y equitativa de todos los afiliados”.
Para el órgano electoral del macrismo santafesino, la Junta Electoral Nacional estuvo notificada en tiempo y forma del llamado a elecciones internas -una de las impugnaciones que se habían hecho- porque simplemente la Carta Orgánica no fija plazos para hacerlo. Incluso, planteó que la comunicación de la resolución de la Junta nacional no fue hecha en debida forma y hasta se animó a criticar su interpretación “excesivamente rígida” de las cláusulas de la Carta Orgánica, entendiendo que permite “cierta flexibilidad en la gestión de procesos electorales”.
En su voto en disidencia, Juan Bautista Callegari -representante del sector de Scaglia- manifestó su opinión de que había que acatar el fallo que anuló las internas porque “nuestra Carta Orgánica no es flexible” y consideró “un desatino” continuar el proceso electoral con el cronograma fijado, porque e¿éste “nunca se publicó” ni “respeta los plazos dispuestos por el reglamento electoral”.
El doble juego de la tropa de Gisela Scaglia
Algo atónitos por la respuesta del angelinismo, desde la tropa de la vicegobernadora se abrieron dos cursos de acción: por un lado, continuarán con el procedimiento de impugnación de las internas que vienen impulsando, decididos a dar batalla en todos los frentes. Incluso, aunque no deseen tener que hacerlo, en el plano judicial.
Por otro lado, activaron todos los preparativos para disputar la interna con las reglas impuestas por el angelinismo, si es que sus planteos no tienen éxito y a pesar de un resquicio para negociar la unidad que se abrió en las últimas horas. Inmersos en una guerra de guerrillas, no quieren que por distraerse en el frente jurídico se les pase algún plazo o requisito que le regale a los halcones la posibilidad de que se caiga la lista que encabezará la propia Scaglia.
Los referidos preparativos son variopintos. Mientras su equipo se enfrasca en la búsqueda de avales, la vicegobernadora se mostró por segunda vez en pocos días con Ricardo “Refu” Leiva, un referente social con base en la zona noroeste de Rosario al que se le atribuye llegada a “alrededor de 400 afiliados del PRO”. Ese vínculo ya había generado ruido puertas adentro de Unidos porque los halcones señalan como nexo a la presidenta del Concejo María Eugenia Schmuck. “Otra vez los radicales metiéndose”, se quejaron. En el Palacio de los Leones pusieron paños fríos y, si bien reconocieron algún roce, dejaron en claro que fue solucionado.
La historia atribuida a “Refu” es atrapante. En el angelinismo sostienen que trabajaba con ellos, pero que luego se hizo cercano al sector radical aliado a Pablo Javkin, con quienes compartieron algunas campañas. Ahora, dicen, es ese sector el que se lo acerca a Scaglia. En el Senado, territorio de la vicegobernadora, comparten otra versión: “Refu es un tipo con peso propio, lo fuimos a buscar, le gustó nuestro proyecto y se sumó”, dicen, aunque reconocen haber tenido un contacto con Schmuck casi de cortesía.