El aumento de presupuesto exclusivo para la Universidad de Buenos Aires (UBA) generó bronca en las autoridades del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y desató el reclamo contra el Gobierno. La reacción, sumada a la sesión propiciada por la UCR en la Cámara de Diputados para tratar el proyecto de financiamiento de las universidades, propició una instancia de diálogo que por ahora se tradujo en la promesa del Ejecutivo de asignar el mismo incremento para todas las casas de estudio. Sin embargo, la reunión paritaria del sector fracasó y los gremios ratificaron el paro de este jueves. Así, pusieron entre paréntesis la posibilidad de una solución a la cuestión de los fondos, ya que la masa salarial compromete el 90% de los ingresos de las instituciones.
Tras la asignación de recursos por $60 mil millones a la entidad bicentenaria, luego del pacto tejido entre el vicerrector de la UBA, Emiliano Yacobitti, y el asesor libertario Santiago Caputo, el Ejecutivo convocó a las autoridades del CIN y la promesa fue equiparar el mismo aumento del 270% en gastos de funcionamiento para todas las instituciones.
Una promesa a las universidades
El diálogo fue informal y, según pudo reconstruir Letra P, no tuvo al secretario de Educación, Carlos Torrendell, como interlocutor, sino al renacido subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, a quien el Gobierno sumió en el bajo perfil luego de la masiva marcha por la educación pública del 23 de abril. Desde la última semana parece haber vuelto a ganar un rol protagónico. Las autoridades buscaron preservar la reunión en un estricto hermetismo. El pedido de las universidades fue que la oferta tenga un correlato formal y quede plasmado en resoluciones.
Hasta el momento, la promesa fue que el envío de las partidas se concretaría el lunes próximo e implicaría un aumento del 270% para los gastos de funcionamiento de las universidades. Esta propuesta deja afuera el pago de salarios, ítem decisivo en el presupuesto de cada institución.
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Integrantes del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).
Ese porcentaje de aumento fue ratificado por el vocero presidencial Manuel Adorni, quien este martes sostuvo que “de no mediar complicación, se formalizará a partir del próximo lunes”. En el CIN consideran a esas declaraciones como un paso informal y siguen a la espera de hechos concretos.
Entre las autoridades universitarias prima la desconfianza y la incertidumbre. Enfatizan que “estaría faltando el instrumento que garantice la oferta”. Además, otro de los puntos de la promesa fue el compromiso de armar equipos de trabajo para el presupuesto 2025 que en Diputados se discute a través de la ley de financiamiento universitario.
Gremios, al paro nacional
Los avances que parece registrar la negociación con las universidades sigue arrastrando el conflicto por los salarios. La última reunión paritaria de este lunes acumuló otro fracaso.
Los gremios fueron a la secretaría de Trabajo con el objetivo de buscar una forma de recomponer el 60% que, consideran, perdieron en estos cinco meses de 2024. Incluso pidieron equiparar sus haberes con los aumentos a estatales: como no recibieron una actualización en enero, ya arrancan 12 puntos abajo. Sin embargo, no hubo lugar para esa negociación en el encuentro en el que se encontraron con Álvarez y el secretario de Trabajo, Julio Cordero, representantes de los siete sindicatos que integran el Frente Sindical de Universidades Nacionales: Conadu, la Federación de Docentes de las Universidades (FEDUN), CTERA, Conadu Histórica, la Asociación Gremial de Docentes de la Universidad Tecnológica Nacional (Fagdut), la Unión de Docentes Argentinos (UDA) y la Federación Argentina del Trabajador de las Universidades Nacionales (FATUN).
El ofrecimiento oficial de un 9% de aumento para mayo fue rechazado de manera unánime por los gremios. El Gobierno propuso un cuarto intermedio hasta el martes 28, tras el paro nacional docente y 24 horas después de que se debería formalizar el envío de las partidas presupuestarias para gastos de funcionamiento.
Todos los sindicatos que representan a docentes y no docentes de educación superior vienen denunciando la licuación de sus salarios y reclamando la restitución del Fondo de Incentivo Docente (FONID) que afecta a quienes ejercen en colegios preuniversitarios. Tras el nuevo fracaso de este lunes, quienes trabajan en las universidades públicas realizarán actividades de visualización del conflicto este miércoles y pararán el jueves en el marco de una jornada nacional de protesta de sindicatos docentes de la CTA y la CGT.
Con el 90% del presupuesto universitario en juego, los avances tímidos de estos días puede derivar en un punto muerto.