Río Cuarto: Nazario y Parodi apuntan los cañones contra Llamosas, pero no se meten con Llaryora
La peronista díscola cuida puentes con el Panal. El radical especula con el Partido Cordobés. Ser opositor, la clave electoral para analistas. Más encuestas.
Los principales aspirantes a la intendencia de Río Cuarto no cuestionan la centralidad de Martín Llaryora
El gobernador Martín Llaryora, junto a su gabinete, en el acto por el 25 de Mayo en Río Cuarto.
A un mes de las elecciones para renovación de autoridades en Río Cuarto, no hay quien se plante ante la obligada centralidad que ocupa el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora. Aún con diferentes estrategias, los siete candidatos y las tres candidatas a la intendencia parecen evitar vías confrontativas con el gobernador.
Registrate para continuar leyendo y disfrutando de más contenidos de LETRA P.
Aunque no ha tenido aún la proclama oficial del gobernador, siempre atento a todas las cartas de la baraja, el exsecretario de Gobierno (renunció este domingo al cargo para concentrarse en la campaña) sabe que el traje de la escudería oficial le permite contar con más recursos que sus adversarios. Orgánico, ni se le cruza por la cabeza desviarse del camino señalado por la cartelería de “Martín”.
En cada estrategia lógicas políticas coinciden con las institucionales. El mandatario, que lleva sólo seis meses en el poder, tiene el manejo de recursos económicos en épocas de una escasez que impacta también en la capital alterna. Con una proyección de convivencia de tres años y medio, a nadie conviene granjearse una temprana enemistad. Mucho menos cuando éste mantiene altos niveles de aceptación.
Los postulantes peronistas afrontan también un intríngulis constitutivo. Llaryora ejerce un indisputado liderazgo puertas adentro del PJ, siempre verticalista. Aunque las alianzas que dieron sustento al cordobesismo hayan diluido la esencia peronista, al punto de evitar liturgias en los actos, nadie puede prescindir de la identidad peronista, especialmente en zonas populosas como el barrio Alberdi.
Durante los últimos años potenciamos la participación ciudadana, realizamos obras muy necesarias y mantuvimos las cuentas en orden.
— Guillermo De Rivas (@guillederivas) June 2, 2024
En simultáneo, la tropa peronista riocuartense también atraviesan ambigüedades a la hora de sopesar un decidido apoyo del mandatario. Orgullosa, en el autopercibido imperio suele rechazar intervenciones apodícticas de la capital provincial. Cita, como repetido ejemplo, las elecciones de 2012, cuando una formal interpelación del exgobernador José Manuel de la Sota pareció restar chances al médico Miguel Minardi, quien lideraba encuestas previas.
Aún atento a los réditos que pueda brindarle la interna peronista, Parodi tampoco ubica en coordenadas de ataque al Panal. Por el contrario, escudriña en el horizonte los beneficios de una coexistencia más que armoniosa.
Por lo bajo, desde su equipo miran los potenciales beneficios de sumarse al Partido Cordobés que le ha servido de espejo. “A Llaryora le conviene que gane Parodi y después buscar al radical que gobierne la segunda ciudad de la provincia. Así dejaría de comprar dirigentes desconocidos, sin votos y que no garantizan siquiera una elección. De hecho, hoy tiene que salvar muchas macanas que se manda el gobierno municipal”, espolean.
“Lo peor que le puede pasar es que gane Nazario y se ponga a armar otra vertiente peronista desde el sur. Con nosotros podría llevarse muy bien, gestionando verdaderamente con amplitud”, rematan.
Gonzalo Parodi y Gabriel Abrile
Gonzalo Parodi y Gabriel Abrile, los referentes del armado "anticasta" de la UCR en Río Cuarto.
Desde el entorno de la “Gringa” confirman su condición de opositores a Llamosas, pero matizan su rivalidad con el excompañero de banca en Diputados, a quien responsabilizan por avalar las decisiones del primero. “Él se inclinó por otra opción”, señalan.
No obstante, conceden que, en caso de llegar a la intendencia, se concentrarán en la consolidación de un espacio propio, también amplio, sin obligación de retribuciones al gobernador.
Analistas consultados por Letra P coinciden en que, sin Llaryora en el ring, para los nueve candidatos desafiantes, especialmente los ya mencionados, será clave ser reconocidos como la “auténtica” opción al gobierno de Llamosas, desgastado tras ocho años de gestión.
Sobre encuestas que marcan un predominio de las tendencias al cambio, prevén que, en un escenario de tercios, con construcciones movedizas, el techo estará cerca del 30% de los votos.
Adriana Nazario
Adriana Nazario encabeza una de las dos listas del peronismo, que irá dividido a las elecciones de Río Cuarto.
“Tendrá muchas chances quien sea percibido por la ciudadanía como mejor agente de cambio. El peronismo oficialista se equivoca al tomar como referencia otras elecciones donde el uso del aparato resultó decisivo. Hoy, la continuidad de gestión puede ser un peso”, remarca un reconocido consultor.