El intendente de la capital más poblada de la Patagonia exige 48 mil millones de pesos de contratos vigentes. Los detalles por cada envío que cortó la Nación.
El intendente de Neuquén capital, Mariano Gaido.
El intendente de Neuquén, Mariano Gaido, se subió a la ola de reclamos por los recursos coparticipables que iniciaron los gobernadores al exigir más de 48 mil millones de pesos en diversos fondos de transferencia y contratos vinculados a la obra pública en la ciudad más importante de la Patagonia.
La deuda reclamada está discriminada según el destino de los fondos direccionados a urbanización de barrios vulnerables, paseos sobre las costas de los ríos que bordean el casco urbano o sobre los montos que se acumulan por el cobro del Impuesto a los Combustibles, que debería financiar el arreglo de rutas nacionales.
"Los fondos que reclamamos van a ser utilizados para las obras que necesita una ciudad, la de Neuquén, que está permanentemente en transformación", advirtió Gaido, apenas trascendió el reclamo.
La manifestación del socio de Rolando Figueroa en el frente La Neuquinidad cobra mayor importancia por el contexto electoral y la catarata de intimaciones que salieron desde las capitales de las 23 provincias, con gobernadores e intendentes pidiendo por coparticipación.
En el sur del país, la batalla principalmente se da por las rutas. Figueroa y el rionegrino Alberto Weretilneck unificaron criterios luego del encuentro que se dio hace unos días en el centro de convenciones Domuyo, el nuevo espacio para reunir a la dirigencia patagónica.
Con ese espíritu, Gaido pidió por fondos comprometidos durante la administración de Alberto Fernández para realizar una serie de obras de gran valor en la gestión que llegó al poder a través del Movimiento Popular Neuquino (MPN) y que hoy se sostiene en un frente local denominado Primero Neuquén.
“El nuestro es un reclamo en términos políticos, queremos pedir una audiencia al ministro del Interior”, aseguró a Letra P el secretario Hacienda de la ciudad capital, Fernando Schpoliansky. “Neuquén tiene una administración ordenada, superávit corriente que vuelca a obra pública e infraestructura”, recordó el funcionario.
Schpoliansky citó una erogación de fondos propios ante el corte de los giros nacionales, anteriormente comprometidos por el kirchnerismo. “Pedimos esos fondos con el único objetivo de volcarlo a obras”, sumó uno de los funcionarios más importantes del gabinete, que suena en la sucesión de 2027.
Según el cuadro que maneja el municipio neuquino, en relación al cobro del impuesto que pagan los usuarios cada vez que llenan el tanque, la Casa Rosada adeuda $12,918,400,000.00. Esta cifra, impacta de lleno en el transporte público, que es manejado por la comuna. El servicio COLE, desde esta semana tiene un valor mínimo de $1.140.
Sobre el resto de los ítems discriminados según obra y fondo, a los que tuvo acceso Letra P, los montos varían sensiblemente. En cuanto a obras específicamente, el monto sin cancelar a junio de este año alcanza los $8,483,202,150.67.
En plano de urbanización de loteos, que implica mejora o acceso a servicios básicos de barrios populares, la cifra también es considerable: $26,704,319,448.38.
La movida de Gaido se pliega a la de otros intendentes del sur. Neuquén tomó similar postura a lo que sucedió en Viedma, donde el intendente Marcos Castro (Juntos Somos Río Negro) estampó su firma en el documento emitido desde el Consejo Federal de Intendentes.
En ese texto, los jefes y jefas municipales coincidieron con el planteo de mantener un equilibrio fiscal, pero no a “a costa del abandono de las obligaciones nacionales para con provincias y municipios”.
Caso similar se dio en La Pampa, cuando la representación distrital que tiene el radicalismo y el PRO se plegó a los pedidos.