Juan Schiaretti, referente de la oposición en Diputados para diciembre.
El triunfo de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires fue celebrado por casi todas las tribus de la oposición en el Congreso. La primera reacción en Unión por la Patria (UP) y en Provincias Unidas (PU) fue retomar diálogos para controlar la agenda, con la mira puesta en el recambio de autoridades de ambas cámaras.
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El blanco principal está puesto en Martín Menem, el presidente de la Cámara de Diputados, un cargo que debe revalidar en la primera semana de diciembre. Pero la oposición también tiene expectativas en definir quién continúa en la presidencia provisional del Senado, el tercer lugar en línea sucesoria, que ocupa Bartolomé Abdala. Karina Milei quiere reemplazar al pantano por alguien de su confianza, como Patricia Bullrich, pero no está claro si tendrá los votos.
Este domingo, los gobernadores y dirigentes que integran PU, cuyo único denominador común es no estar alineados al kirchnerismo, usaron el triunfo de Kicillof para pegarle al Gobierno, una forma de ponerse del lado del mandatario bonaerense.
En esa línea fueron las publicaciones en Twitter de los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Ignacio Torres (Chubut); y los radicales Gustavo Valdés (Corrientes) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe). También el cordobés Juan Schiaretti, quien competirá contra La Libertad Avanza (LLA) en octubre para ser diputado. Por UP, se expresaron outsiders que siempre respaldaron la cruzada de Kicillof contra La Cámpora, como Eugenia Alianiello, Pablo Yedlin y Victoria Tolosa Paz, presente en el palco de La Plata.
El radicalismo en Diputados dejó su marca con un tuit alusivo a la derrota del Gobierno publicado por Natalia Sarapura, jujeña y exladera de Gerardo Morales. Mientras que Julio Cobos le pidió a Milei que deje de vetar leyes.
PU se constituirá como un bloque autónomo en ambas cámaras desde diciembre, cuando será árbitro de las votaciones, porque tanto UP como LLA necesitarán el apoyo de esta fuerza para intentar abrir los recintos.
La presión de la oposición
Schiaretti fue uno de los primeros dirigentes de PU en celebrar, indirectamente, la victoria de Kicillof, quien devolvió el gesto: durante los festejos llamó a la militancia a sumar referentes de otras fuerzas para enfrentar a Javier Milei en 2027. “Ningún gobierno puede ser exitoso si las familias no llegan a fin de mes", escribió el exgobernador y firmó como Provincias Unidas.
El futuro diputado busca protagonismo en diciembre, cuando arribe a la cámara baja. Su plan, cuentan en su entorno, es no repetir el error de la tercera vía, sino mostrar a PU como una oposición sólida con chances de reemplazar al Presidente en 2027. El dilema, claro está, es si en ese camino dejan fuera a Kicillof y al kirchnerismo, o si lo suman al frente. En el primer caso, destacan, una alternativa es acordar recién ante un eventual ballotage.
Por lo pronto, en Diputados hay conversaciones para que Milei sienta el rigor en diciembre con un cambio en las autoridades de la Cámara. Algunas fuentes aseguran que hubo una reunión la semana pasada entre jefes de bancada para imponer un sustituto de Menem a la brevedad. A más tardar, en diciembre, con la mitad del recinto nuevo, el riojano debe buscar aliados para renovar las credenciales.
Siempre está listo para ocupar la presidencia de la cámara baja Cristian Ritondo, jefe del PRO, aunque su escollo es que UP no quiere votarlo. En 2023, la línea de Cristina Fernández de Kirchner fue que la presidencia de la cámara baja y la provisional del Senado sean del oficialismo, una tradición que sólo se rompió en 2001 y anticipó la llegada de Fernando De la Rúa.
¿Sigue la tradición?
Con CFK detenida, referentes de UP no se imaginan que se preocupe por mantener costumbres institucionales. De hecho, en diciembre el bloque conducido por Germán Martínez se abstuvo, una forma de permitir la reelección de Menem sin votarlo.
En Encuentro Federal (EF) -que en diciembre se fundirá en PU- no hay intenciones de sostener a Menem, con quien tienen desencuentros permanentes. El año pasado hubo un sondeo para que el jefe de esta bancada, Miguel Pichetto, sea presidente de la cámara baja.
No prosperó y la idea volvió estos días. Schiaretti es el beneficiado de un recambio en el sillón principal de Diputados, porque de esta manera podría despejarse el camino para relevar a Pichetto como jefe de bloque. Las autoridades de la cámara baja deben elegirse por mayoría simple por lo que LLA mira la película desde afuera: en el mejor de los casos, aspira a tener un interbloque de 92 miembros en diciembre, lejos de los 129 del cuórum. Resta saber si retiene votos de radicales aliados en algunas provincias, que tal vez pasada la elección prefieren ir a PU.
Algunos miembros de EF y del radicalismo opositor -vinculado a Facundo Manes y Martín Lousteau- evalúan presionar a Milei para que sea el mismo el que releve a Menem, como se especuló este lunes después de la derrota bonaerense, que Santiago Caputo le adjudica a Karina y sus asesores riojanos.
De tomar ese camino, con que no se trate de una figura hostil, la oposición podría acompañar y tomar el recambio como una victoria. Difícilmente Karina les regale esa foto tan fácil.
El Senado, última parada
La elección de autoridades del Senado será otro tema complejo para Milei, sobre todo si las elecciones de octubre no le permiten festejar triunfos en provincias grandes. La presidencia provisional, el cargo más alto entre los electos de la cámara alta, se vota a fines de febrero.
Karina quiere reemplazar a Abdala, por su cercanía a Victoria Villarruel. Su principal candidata es Bullrich, aunque en UP hicieron saber que no estarían dispuestos a darle ese lugar a la Ministra de Seguridad. En Provincias Unidas, que tiene como referente a Alejandra Vigo (esposa de Schiaretti), no ocultan intenciones de disputar todos los cargos en juego.
Libertad Avanza búnker La Plata 27 (1)
El eje de las negociaciones del Senado pasa por José Maynas, jefe de UP, histórico hombre de la casa y quizá la figura que más habla con CFK, a quien visita tres veces por semana en el departamento del barrio Constitución, donde ejerce la prisión domiciliaria. Un tema de conversación recurrente son los proyectos de unidad nacional posibles para el postmileismo.
El Senado tiene otra vacante: desde mayo está vacía la silla de la secretaría administrativa, tras la renuncia de Emilio Viramonte Olmos, por diferencias con Villarruel, quien había peleado un semestre para juntar los votos que se necesitaban para nombrarlo.
Sus funciones las cumple Villarruel, con la asistencia de Lucas Clark, prosecretario administrativo, respaldado por la UCR. En UP y en PU quieren regularizar la situación y, en ningún caso, están dispuestos a que Karina controle la administración del Senado. Tienen los votos para evitarlo.