ELECCIONES 2023

Córdoba: JxC y el cordobesismo se disputan Laboulaye con candidatos "plan B"

En la ciudad cabecera del departamento Sáenz Peña, las principales fuerzas compiten con referentes por descarte. La UCR intentará mantener el poder. Llaryora prometió ayuda "a dos manos". Se vota el 1 de octubre.

En plena pampa gringa, Laboulaye forma parte del superdomingo cordobés del 1 de octubre. Ese día, a la sombra de Villa María y Bell Ville, la ciudad ubicada en el extremo suroeste provincial concurrirá a las urnas para completar el mapeo político de cara al menos agitado año 2024. Al igual que en Las Varillas, el simbolismo electoral de esta localidad para los planes de Martín Llaryora es fuerte por varias cuestiones.

Por un lado, se trata del radio de acción de Julián Lópezy Sergio Busso, dos ministros con peso propio en el gabinete que se viene. Por el otro, el departamento Roque Sáenz Peña fue la aldea gala llayorista, ya que fue el único distrito del sur donde Hacemos Unidos por Córdoba se alzó con la victoria en el 23 de junio. Ambos escuderos, oriundos de las localidades de Melo y Serrano, ubicadas a menos de 30 kilómetros, fueron clave a la hora de mover la estructura y asegurar el triunfo.

A diferencia de lo sucedido en la ciudad del departamento San Justo, la campaña para el 1 de octubre mostró un involucramiento total de Hacemos Unidos por Córdoba. La premisa es que Laboulaye vuelva a manos del PJ tras dos periodos bajo la administración de César Abdala (Juntos por el Cambio), quien a su vez había cortado con 12 años de Julio Nápoli en el poder.

En total, hay 18.860 personas en condiciones de votar para la intendencia, ocho concejalías y tres integrantes del tribunal de cuentas. Habrá siete listas en competencia.

Río revuelto

De manera paradójica, el cuarteto de candidatos del cordobesismo asoma como el principal escollo para que el peronismo vuelva al poder. Tras varias deliberaciones internas, no exentas de acaloradas discusiones y pases de factura, Walter Acotto fue ungido como candidato. El director del Hospital Regional Ramón J. Cárcano no fue la primera opción.

En los cafés del tradicional bar El Cívico cuentan que el rol de Busso fue clave para elevar la figura de Acotto por sobre otros postulantes que ya habían empezado a jugar. “Los peronistas somos muchos. Hay muchos que quedaron afuera, pero tenemos que trabajar todos juntos”, sostuvo el aspirante mientras trataba de llevar calma en el río revuelto.

Según pudo averiguar Letra P, los sondeos daban a Victoria Busso como la dirigente con mejor imagen. Sin embargo, la joven legisladora seguirá en la Unicameral, donde tiene el puesto asegurado hasta 2027 tras ganarle la elección departamental a Abdala hace unos meses. “Es una apuesta a futuro”, señalan.

https://publish.twitter.com/oembed?url=https%3A%2F%2Ftwitter.com%2FJSchiaretti%2Fstatus%2F1658557155409121285&partner=&hide_thread=false

El panel de “heridos” lo completan el concejal Lucas Panelo (Estamos Haciendo Laboulaye) y el excandidato en 2019, Claudio Quaglia, quien se distanció de Busso para armar su propio espacio.

Las manos y los fierros

Zona de campos y de autos, el apoyo a Acotto no se limitó al video donde Llaryora promete, casi en plan pastoral, darle “las dos manos” al candidato. “Ha sido uno de los mejores directores de hospitales del interior de la Argentina. Enfrentó la pandemia y es un médico solidario. Como gobernador electo me comprometo a poner no una sino las dos manos para ayudar a Walter”, lanzó el dos veces intendente que será por primera vez gobernador.

Con mucha más potencia, el propio Busso comandó, la semana pasada, el desembarco de la división panzer schiarettista. La excusa fue perfecta: la presentación del Chevrolet con el que Ricardo “Caito” Risatti compitió en San Luis por el Turismo Carretera.

Apellido de estirpe fierrera, el museo Rincón Risatti mostró al diputado ultraschiarettista Carlos Gutiérrez, al presidente de la agencia Córdoba Deportes y candidato a diputado, Héctor Pichi Campana, brindando el apoyo al piloto. Los Busso, Victoria y Sergio, más Acotto, también.

Busso Caito.jpg

Tradición y apellido

No tan ajenos al berenjenal opositor, Juntos por el Cambio apostó a lo seguro para continuar al frente de la Municipalidad. El elegido es Gino Chiapello. El secretario de Finanzas municipal tiene sangre azul radical: su bisabuelo fue Juan A. Más, intendente entre 1925 y 1930.

Con perfil técnico, Chiapello es reconocido por haber eficientizado la caja de la Municipalidad. Este activo es, a la vez, un pasivo oculto. Sucede que el novel candidato mantenía un perfil bajo. De todas maneras, el orden en las cuentas lo puso en el camino de la sucesión de Abdala.

Al igual que Acotto, no fue la primera opción. El candidato que querían todos era Dino Garimanno. Con probada estirpe radical, ya que su padre Néstor (o Minino) fue intendente tres veces entre 1991 y 2003, el organizador de la Expo Laboulaye, contaba con todos los requisitos para suceder a Abdala. Sin embargo, el también presidente de la influyente Sociedad Rural local declinó rápidamente el convite.

Al cierre de este texto, no se descartaba ni confirmaba la presencia de un renovado Luis Juez en la campaña. Más allá de su peso como dirigente, para el expostulante juntista, la cuestión de Laboulaye tiene ribetes personales: una de sus hermanas, Marta, reside desde hace años en la ciudad.

La pata libertaria la encarna Maximiliano Camusso. Con el sello del Partido Demócrata, el empresario y dueño de dos centros educativos busca capitalizar la buena elección de Javier Milei, quien cosechó la mayor cantidad de votos en las PASO. Con nexos empresariales en Paraguay, Camusso obtuvo un 10% de votos en la elección para legislador departamental. Intentará aprovechar el viento de cola del León a nivel nacional.

alta gracia: torres arraso y aseguro su influencia en el partido cordobes de llaryora
Un pragmático Daniele fue reelecto en tierra de Llaryora y Calvo.

También te puede interesar