"Este jueves se cumplen 50 años del regreso de Perón a la Argentina luego de 17 años de exilio. Nos vemos en La Plata. #LaFuerzaDeLaEsperanza". Con ese mensaje, acompañado de un afiche, Cristina Fernández de Kirchner agitó la convocatoria a su segunda reaparición en menos de un mes, en el estadio Diego Armando Maradona. Con un megaoperativo de seguridad para una actividad masiva a niveles de campaña electoral que se producirá después del intento de magnicidio del 1 de septiembre, la vicepresidenta convocó con un eslogan albertista. No por Alberto Fernández, enemigo declarado de los ismos, sino por el puntano Alberto Rodríguez Saá, que lo usó en su campaña para las legislativas de 2021.
Después de comunicarse, justamente, con el Presidente a raíz de la descompensación que sufrió el mandatario en la Cumbre de Líderes del G20 que se desarrolla en Indonesia, Cristina Kirchner subió la temperatura de la previa del Día de la Militancia que, después de la sensación de lanzamiento que dejó en el plenario de la UOM, promete sumar pistas para el clamor 2023 que alimenta el cristinismo silvestre desde que retomó la centralidad política. El operativo abrió la puerta para que la dirigencia K se plegara al beduino en el desierto que supo ser Carlos Blanco, cuando, en el lejano abril, le dijo a Letra P: "Mi candidata es Cristina".
En plena interna del exbinomio electoral, no fue a propósito la ironía de que la convocatoria haya tomado prestada la bandera de un Alberto. No es por la garantía de éxito: por menos de 1.500 votos, en las generales de 2021, el opositor Claudio Poggi se impuso al frente oficialista Fuerza San Luis, que llevaba a la actual diputada María Zanglá como cabeza de lista. Más allá de la performance, lo relevante es haber tomado prestado un eslogan para un evento pautado fuera del calendario electoral.
Es una construcción discursiva de campaña que tampoco fue inventada en San Luis. "Somos la fuerza de la esperanza" fue un lema usado por PPT (Patria Para Todos, no el programa de Jorge Lanata), un partido que supo integrar el Gran Polo Patriótico en Venezuela, al apoyar primero a Hugo Chávez y, después, a Nicolás Maduro. No fue, tampoco, sugerido por un actual visitante frecuente del Instituto Patria, Alfredo Serrano Mancilla, director del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) y asesor político que trabajó en distintos países, incluyendo al régimen bolivariano, al cual cautivó con su libro El pensamiento económico de Hugo Chávez. "Trae números", describen su rol cerca de la vicepresidenta.
En 2011, para su reelección, Cristina Kirchner también usó "La fuerza" como eje para su campaña. El mensaje positivo en la vice ya fue desplegado en Pilar, cuando lanzó la frase que sigue resonando por sus connotaciones hacia 2023. "Voy a hacer lo que tenga que hacer para lograr que nuestro pueblo pueda organizarse en un proyecto de país que recupere la ilusión, la fuerza y la alegría de nuestra gente". Un experto en campañas del PJ, ante este medio, analizó que, con sus críticas a la Justicia y a la Casa Rosada, la intensión de instalar la palabra "esperanza" sea contraponer la agenda discursiva de tono negativo de la expresidenta.
Con la logística de la movilización a cargo de los intendentes del peronismo bonaerense, la organización del megaevento comenzó a dejar trascender detalles para preparar a la militancia ante una jornada que promete ser larga. En primer lugar, cerca de CFK piden que la gente concurra con tiempo para garantizar un ingreso ágil. Habrá un operativo similar al de cualquier recital de concurrencia masiva, lo que implica que se montarán dos anillos de seguridad con postas de control con detectores de metales.
A diferencia de la dirigencia invitada o la prensa acreditada, el público general no necesitará pulsera. "La entrada es libre como cuando se concurre a un acto a una plaza", prometen en la organización. “La seguridad es primordial para cuidar a Cristina”, completaron. Afuera habrá una "alfombra roja" para que las figuras del Frente de Todos que asisten sean entrevistadas. Dentro del estadio, a falta de la palabra "corralito" que no gusta, se dispondrá un mangrullo para que ocupe la prensa. No se permitirá el ingreso de cámaras de televisión.
En el ideario frentetodista el 17 de noviembre es ya una fecha marcada a fuego. No tanto por Perón: este jueves es el primer aniversario de lo que el cristinismo masculla aún como el desafío de Fernández que terminó de romper lo poco de la relación que quedaba. "Mi mayor aspiración es que en 2023 desde el último concejal hasta el Presidente de la República lo elijan primero los compañeros del Frente de Todos", lanzó el mandatario en Plaza de Mayo, al evento que Máximo Kirchner, con la columna de La Cámpora, llegó con el discurso empezado. La defensa de las PASO versus la lapicera de la vice fue la primer señal de la interna a cielo abierto que se vendría.
Como ya contó Letra P, a la sensación de la UOM se suma el aroma de lanzamiento en el prólogo de la misa platense. La iconografía usada para convocar apeló a una foto de la presentación de Unidad Ciudadana en la cancha de Arsenal en 2017, días antes de que la expresidenta blanqueara que sería candidata a senadora.