Las figuras más representativas de Juntos por el Cambio siguen de rondas virtuales fuera de Buenos Aires y siguen, también, marcando sus diferencias internas. A la oposición responsable que propuso María Eugenia Vidal se le distanció Patricia Bullrich, cultora central del ala dura macrista, quien a través de una videoconferencia por Zoom y ante unas 900 personas llamó a construir una “fuerza social y política” que enfrente al peronismo.
El diputado nacional santafesino y vicepresidente nacional del PRO, Federico Angelini, fue el maestro de ceremonias del evento virtual que lideró la ex ministra de Seguridad este domingo por la tarde. La jefa de hierro de los amarillos no cuidó sus formas ni procuró ser diplomática como la exgobernadora bonaerense. Todo lo contrario.
Bullrich, según lo que reconstruyó Letra P a través de cuatro asistentes, se dedicó a pegarle parejo al “kirchnerperonismo”, como denominó a la coalición de gobierno. Destacó que el oficialísimo quiere poner a Juntos por el Cambio “del lado del enemigo del pueblo” y que la mirada “malvinera”, el intento por romper la grieta y contener a un amplio abanico por el camino del centro, “le duró poco”. En esa línea, la presidenta del PRO repasó las polémicas de sobreprecios y liberación de presos que, a su entender, generaron una “rebelión muy fuerte” en el no peronismo.
“Hacer política no está mal”, exhortó la ex ministra, quien se animó a la autocrítica y confió que la gestión que lideró Mauricio Macri cometió “muchísimos errores no forzados” y otros provocados por el propio peronismo, que “no dejaba avanzar” al anterior gobierno. En el medio, admitió que el radicalismo debería haber tenido mayor lugar en la Casa Rosada. “Para la próxima nos tenemos que preparar bien”, contagió.
Angelini, el mismo que cobijó la semana pasada el Zoom con Vidal, le puso a Bullrich una alfombra de dirigentes de diversos sectores de la provincia. La ex ministra de la Alianza llamó a los PRO a afiliar masivamente y “trabajar con todo”.
Al igual que el evento que tuvo a Vidal como protagonista, la masa indagó una y otra vez sobre quién es la referencia máxima del espacio. La ausencia de Macri en la escena pública inquieta a los macristas, que requieren un liderazgo claro y con peso específico. “Mauricio no aparece en escena para evitar el punching ball”, aclaró.
Bullrich también tuvo tiempo para responder las consultas sobre el pago chico. En su época de ministra trabajó en sintonía con el gobierno socialista, especialmente con el ministro Maximiliano Pullaro, en el desbarate de bandas narcocriminales. Dijo que el gobernador Omar Perotti era “más razonable” y le pegó parejo al ministro de Seguridad actual, Marcelo Sain, por “extremo”, “decir barbaridades” y “no tener un plan”.
Angelini aportó, en el medio del encuentro, con una mini encuesta para los presentes. Preguntas como: “¿Cuáles son los valores que Juntos por el Cambio tiene que representar?”, “¿Qué imagen tenías de Juntos por el Cambio?” y “¿Habría que acompañar nuevas fuerzas para ganarle al kirchnerismo?”. La última tuvo una abrumadora mayoría positiva del 83%.
