Cuando faltan menos de 20 días para las elecciones legislativas en las que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner se medirá en las urnas contra Cambiemos, con un pronóstico a priori negativo, tres intendentes que acompañarán a la ex presidenta con la boleta de Unidad Ciudadana dieron la sorpresa y se reunieron en el Senado con el presidente del bloque del PJ-Frente para la Victoria (FpV), Miguel Ángel Pichetto, armador del sector del peronismo que quiere dejar atrás al kirchnerismo.
La noticia la dio el propio intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, quien subió a su cuenta de Twitter una foto junto a sus colegas Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) y Santiago Maggiotti (Navarro), en la oficina de Pichetto en el Senado. “Imaginando la Argentina que viene”, escribió Menéndez.
Lo curioso es que, para ese futuro, Pichetto imagina, junto a la liga de gobernadores, un peronismo sin el liderazgo de Cristina. Más aún, el presidente del bloque del PJ en el Senado ya dejó trascender que tampoco quiere a la ex presidenta en la bancada que él conduce. El kirchnerismo, sin embargo, se entusiasma con la idea de que Cristina desembarque en la Cámara alta para pelearle el liderazgo.
Mientras mira encuestas que dan a Esteban Bullrich como ganador de la elección del 22 de octubre, el resto del peronismo empieza a analizar cómo se reacomodará el peronismo para 2019. Con Cristina perdedora, varios dirigentes apuestan a dar por terminado su liderazgo para dar vuelta la página y encolumnarse detrás de nuevas figuras.
El gesto de Nardini, Menéndez y Maggiotti, de reunirse con Pichetto, va en línea con esa lectura. Sin embargo, en el entorno de la ex presidenta minimizaron la reunión y dijeron que la relación con los intendentes “está muy bien” y que Cristina compartirá con ellos actividades el fin de semana en Malvinas Argentinas y Merlo.
Son varios, o casi todos, los sondeos que auguran que Cristina no podrá sostener en octubre el triunfo ajustado que obtuvo en agosto y que pronostican la victoria de Cambiemos. Esas encuestas están dando, por estas horas, una diferencia de entre 3 y 4 puntos en favor de Bullrich.
Nardini ya había generado río revuelto cuando aún no se habían resuelto las candidaturas y el futuro político y electoral de Cristina estaba bajo un manto de incertidumbre. A fines de mayo pasado visitó al candidato de Cumplir y ex ministro, Florencio Randazzo, en su bunker del Palacio Raggio. ¿Por qué esta reunión hizo tanto ruido? Porque lo hizo en el mismo instante en que un grupo nutrido de intendentes bonaerenses escuchaban a la ex presidenta en el Instituto Patria.
