Dos discusiones de alto calibre con los gremios docente tensan el vínculo con la Casa Gris comandada por Maximiliano Pullaro y conforman el conflicto inmediato más duro para la gestión. La discusión paritaria y la reforma previsional en marcha pusieron a SADOP y Amsafe en pie de guerra.
Con una oposición que aún no termina de rearmarse, la mayoría parlamentaria que ostenta Unidos, y el liderazgo de la coalición oficialista asegurada, son escasas las voces opositoras al gobierno del radical. La sintonía fina en lo partidario y en lo legislativo, encontró un quiebre, sin embargo, con el posicionamiento de los sindicatos que representan a docentes de escuelas de gestión pública y privada.
Amsafé y SADOP mantienen desde el verano una relación tensa con el gobierno que ahora, con la reforma previsional marchando en sexta a fondo le suma un capitulo que promete ser espeso y que se agrega a los roces que arrastran desde enero pasado.
Las posiciones de ambos sindicatos contrastan con la de los que representan a los trabajadores de la administración central, como ATE y UPCN, que muestran posturas más cautelosas sobre los cambios que se cocinan para la Caja de Jubilaciones de la provincia.
Esta semana, la convocatoria oficial para discutir la política salarial terminó sin un ofrecimiento concreto y se resolvió pasar a cuarto intermedio. En la previa, SADOP Rosario dijo que la pérdida del poder adquisitivo de los docentes ameritaba un aumento no menor al 20 por ciento. Y Amsafe iba fue a la reunión paritaria con la expectativa de llevarse un ofrecimiento para no dilatar el cobro del aumento. Ninguna de esas variables sucedió.
Los reclamos a Maximiliano Pullaro
“Hemos planteado también la exigencia de que se devuelva el día descontado de paro (del 8 de julio). Es un día que está muy mal descontado, no se puede descontar un día de paro y menos cuando hay un incumplimiento de la patronal. La patronal tenía la obligación de respetar el acta paritaria 2023, todavía no lo hizo, por eso llevamos adelante una medida de fuerza y estamos exigiendo la devolución de ese día”, sostuvo Rodrigo Alonso, secretario general de Amsafé, cuando terminó la reunión.
En el mismo tono de queja se refirió al Premio por la Asistencia Perfecta, una medida que aplicó el gobierno provincial bajar el ausentismo en las escuelas y recortar el pago de reemplazos. Para los sindicatos se trata de un presentismo encubierto.
La postura del Gobierno de Santa Fe
Del otro lado, el ministro de Educación José Goity retrucó. Dijo que la recomposición salarial de los trabajadores del sector llegó al 82 por ciento cuando la inflación del mismo período fue del 79 por ciento. Y disparó: “Los gremios hacen un planteo respecto de la paritaria firmada con el Gobierno anterior, que no la pagó y tampoco dejó esos fondos para hacerlo, y que además era de imposible cumplimiento, y todos lo sabían”.
La confrontación por la Caja de Jubilaciones también es parte de la conflictiva relación gremios-gobierno. La comisión intersectorial encargada de elaborar un informe sobre la sostenibilidad del sistema previsional y recomendar reformas volvió a reunirse esta semana, con un invitado de relieve para los planes que teje el Gobierno: el cordobés Osvaldo Giordano, histórico exministro de Economía de Juan Schiaretti que tuvo un fugaz paso por la gestión de Javier Milei al frente de la ANSES.
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Gremios con letra propia
José Testoni, dirigente docente y secretario general de la CTA de la provincia, salió de la comisión con los tapones de punta. Calificó la mirada reformista como “ajustadora” y “estrictamente en línea con los planteos del gobierno nacional”.
Sostuvo que sostener la Caja al Estado le representa el 2% por ciento del presupuesto: “Están agrandando un problema que no es tan grande”, cuestionó. Además, adelanto que Amsafe presentará su propio informe, paralelo a lo que resuelva la comisión, y que exigirán representación sindical en la conducción del organismo.
“No podemos permitir que se toque el régimen especial de los docentes, ni aceptar que haya maestros de 65 o 68 años frente al aula. Es cuestión de repensar cómo se gestiona la Caja, podrían empezar por la evasión, hay sectores que durante años tienen a muchísimos trabajadores en negro, y que pasan a planta en los últimos años de la carrera y son trabajadores que no aportaron”.
- ¿Hay punto de acuerdo posible?, consultó Letra P.
-El punto de acuerdo para nosotros es que dejen todo como está.