Victoria Villarruel lideró este miércoles un reconocimiento a excombatientes en la guerra de Malvinas y acusó sin distinciones a los gobiernos anteriores de haberlos ignorado. “Han sido 42 años durísimos, de desmalvinización, de olvido, de indiferencia, en los cuales estos hombres no recibieron el abrazo de la sociedad que tanto merecían y se habían ganado”, señaló la vicepresidenta.
En el salón azul del Congreso, dónde condecoró a excombatientes con vida y a otros fallecidos, Villarruel prometió que siempre serán recordados como héroes.
“La causa de Malvinas fue utilizada para intereses políticos. Aquí, en el Senado, queremos comenzar una nueva etapa, en la cual se le agradece a los héroes de la Nación; vivos y muertos. Y distinguirlos como se merecieron desde 1982 hasta el presente”, garantizó.
La escucharon desde la primera fila miembros del bloque radical del Senado, como el jefe de la bancada Eduardo Vishi, Victor Zímermman, Pablo Blanco y Daniel Kronegerger. También estaba Ezequiel Atauche, jefe de LLA. No hubo presencia del PRO ni de Unión por la Patria.
Nueva etapa de Victoria Villarruel
El evento de este miércoles fue uno de los tantos que habrá esta semana en el Senado por el aniversario de la guerra, organizados por el director de Gesta de Malvinas, Nicolás Kasanzew, el experiodista de la televisión pública que cubrió el conflicto en las Islas.
Su nombramiento fue resistido por Unión por la Patria. Kasanzew abrió el evento y acusó al “marxismo cultural dominante en las últimas décadas” de tenerle “tirria" a “los héroes de Malvinas. Los aborrece”. Lo fundamentó en que el himno de la Internacional Socialista dice “ni dios, ni héroes, porque los héroes elevan la vara y así el pueblo es más difícil de llevar de las narices”.
Esa fue la línea discursiva del acto, tanto durante la condecoración a excombatientes, como en el discurso de Villarruel: la reivindicación al fallido intento de las fuerzas armadas por recuperar las Islas Malvinas.
“El 2 de abril -fecha del desembarco en las Islas- Argentina hizo lo justo: defender su tierra. Es el momento de recuperar el respeto a nuestras fuerzas armadas y el que el pueblo le debe a los héroes de Malvinas”, sostuvo la vicepresidenta, que es hija de un veterano de la guerra.
Los reconocimientos
La condecoración se inició con una invocación religiosa de Vicente Martínez Torrens, último capellán de la guerra. Los primeros reconocidos fueron Owen Guillermo Crippa, teniente de navío, quien relató cómo en Santa Fe los excombatientes trataron de ayudarse después de la guerra. Le siguió Rubén Gustavo Zini, brigadier mayor; y Dalal Abd, madre de un caído en la guerra.
También fueron condecorados Ricardo Akins, suboficial mayor, recientemente asesinado; el soldado conscripto Juan Domingo Horisberger (también fallecido), el brigadier mayor Rubén Gustavo Zini.
Recibieron sus menciones el comodoro Carlos Martínez, el coronel Raúl Castañeda, el teniente de corbeta Alejandro Koch, el suboficial mayor Martín San Miguel, el coronel Marcelo Anadón.
Otros reconocimientos fueron para los soldados conscriptos Jorge Ledesma y Vicente José Bruno, el comodoro Roberto Federico Mela y el sargento Ángel Andrés Huenchul. "Estos 649 hombres que dieron la vida por la Patria deben estar presente en nuestros esfuerzos por poner a la Argentina de pie", destacó Villarruel.
“Cada uno de nosotros nació en este país para ser único. No para sentir vergüenza por lo que piensa o por haber defendido al país”, reclamó la vicepresidenta. Los excombatientes se retiraron por la puerta principal del Congreso, que sólo se abre en la inauguración de sesiones ordinarias o en las asunciones de los binomios presidenciales.