El surgimiento del bloque Provincias Unidas en el Senado evidenció diferencias entre los gobernadores de la Patagonia, que discuten la distancia con Javier Milei y la capacidad de presión hacia el Gobierno. Alberto Weretilneck no habilitó a Mónica Silva a plegarse al espacio que con el impulso de Ignacio Torres sumó referentes de Córdoba, Entre Ríos, Corrientes, Salta y Neuquén.
El nuevo espacio en la cámara alta se presentó como un bloque aliado a La Libertad Avanza, que buscará posiciones homogéneas para defender su "agenda federal" con acento puntual en el reclamo de los gobiernos locales. Con ese perfil, la multicolor bancada Provincias Unidas está ligada netamente a la negociación.
En ese preciso punto, el mandatario rionegrino expone sus diferencias. “Es para mantener independencia”, resumió Weretilneck sus argumentos para mantenerse fuera del nuevo bloque ante la consulta de Letra P, mientras llevaba adelante una gira extensa por el Alto Valle. De fondo, la conveniencia se explica en la estrategia de hacer valer el voto de la senadora Silva, exministra de Educación rionegrina.
El unibloque Juntos Somos Río Negro, que Weretilneck defendió hasta diciembre de 2023, cuando asumió su tercer período en la gobernación de Río Negro, fue clave en votaciones calientes en el Senado. Silva, diferenciándose de Unión por la Patria, habilitó con su voto los desempates de la vicepresidenta Victoria Villarruel cuando se debatió la ley Bases.
Los argumentos de Alberto Weretilneck
El rionegrino justificó la jugada como parte de la estrategia histórica entre el oficialismo y la oposición. Por fuera de las declaraciones oficiales, el análisis de Weretilneck es claro: la banca de Silva vale más que un bloque, sobre todo por los antecedentes inmediatos de la cámara alta. En Río Negro creen que deben escindirse de la jugada chubutense de brindarle respaldo explícito al Gobierno, con el que Weretilneck tiene ahora un diálogo fluido luego de iniciar su mandato como rival declarado.
Un dato se recorta nítido en el repaso de los acontecimientos. La petrolera Petronas puso en duda su participación en la planta de GNL por la que Weretilneck pujó a cielo abierto contra Axel Kicillof para lograr su instalación en Río Negro. La indecisión de la empresa malasia se conoció justo horas antes de la presentación en sociedad de Provincias Unidas. El ceo de YPF, Horacio Marín, transmitió tranquilidad sobre la continuidad del megaproyecto en Sierra Grande, pero el miedo no es zonzo.
En paralelo, Weretilneck viene manteniendo una pulseada sostenida a través de sus representantes en el Congreso por un detalle que considera trascendente en el debate por la implementación de la Boleta Única: el botón para votar la lista completa, que los provincialismos evalúan como una amenaza.
“Como representante de un partido provincial, voy a consolidar la defensa de los intereses rionegrinos antes de animarme al compromiso con diferentes jurisdicciones”, sintetizó Silva a este medio.
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Mónica Silva seguirá siendo la espada de Alberto Weretilneck en el Senado.
Como ya contó Letra P, el nuevo interbloque está presidido por Carlos Camau Espínola y sumará cuatro fuerzas: Unidad Federal, que integran el correntino, el entrerriano Edgardo Kueider y la cordobesa Alejandra Vigo; Cambia Federal, de Juan Carlos Romero; Despierta Chubut, con la radical Elizabeth Terenzi (socia de Torres) y el Movimiento Neuquino, el monobloque de Lucila Crexell.
Con Río Negro afuera del esquema, la idea de engordar el espacio que impulsa Torres se mantiene latente, principalmente apuntando a otros dos gobernadores que eligieron mantenerse afuera de este primer movimiento: Claudio Vidal( Santa Cruz) y Hugo Passalacqua (Misiones).
El rol de Ignacio Torres
Desde el comienzo de su gestión, el gobernador de Chubut viene trabajando en los armados transversales que fortalezcan los reclamos de las provincias ante el Gobierno. Su figura adquirió relieve nacional cuando encabezó una de las primeras cruzadas federales contra la Casa Rosada y amenazó con atrincherarse junto con los barriles de petróleo en su su provincia.
Fue uno de los más entusiastas impulsores del armado sureño que unió los reclamos de los seis mandatarios patagónicos y, después de cruzar conversaciones que lanzaron líneas en distintas direcciones, terminó concretando el armado federal que encontró en el Senado el escenario propicio para escenificarse.
La jugada no representa que Torres se aleje de su partido originario, el PRO, sino que abre el camino para la estrategia que sumará fuerza a la interlocución con el Gobierno, que hoy tiene características fluidas. Principalmente por el buen diálogo con el jefe de gabinete, Guillermo Francos, y en lo que refiere específicamente con el interbloque, con Villarruel.
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De militancia radical, Terenzi es parte del armado provincial de Torres y, en ese sentido, comparte la estrategia del interbloque. Andrea Cristina, la senadora chubutense que reemplazó al gobernador en la banca que ocupaba desde 2021 y que abandonó para hacerse cargo del poder provincial, decidió irse al bloque PRO que conduce Luis Juez. Torres, cuya relación con Mauricio Macri pasa por un buen momento, no se opuso a esa decisión.
Un armado estratégico que no piensa en elecciones
La distribución del Presupuesto, los fondos para las cajas de juibilaciones que no fueron transferidas a la Nación y la plata para las obras de infraestructura son algunos de los muchos puntos que, con anclaje en el federalismo, el nuevo bloque buscará congeniar con el oficialismo. Allí está lo importante, señalan en el entorno de Torres, donde descartan cualquier tipo de proyección electoral para ese combo provincialista.
La mitad del interbloque, que no proyecta tener su réplica en la Cámara de Diputados, está integrada por figuras que integran una oposición razonable en sus provincias: el entrerriano Kueider, el salteño Romero y el correntino Camau Espínola.
En ese marco, sosteniendo el eje en la agenda estratégica, no está en la cabeza de Torres poner en riesgo su relación con sus pares, algunos de los cuales forman parte de su propio espacio político, como Rogelio Frigerio o Gustavo Valdés.