El Gobierno quedaría obligado a rendir cuentas sobre el cierre de la agencia de noticias Télam si crece la presión en el Congreso, donde ya presentaron sus repudios los bloques de Unión por la Patria, el socialismo, la izquierda, Margarita Stolbizer y la senadora Mónica Silva, de Juntos Somos Río Negro, el frente del gobernador Alberto Weretilneck.
En Diputados, hay proyectos de resolución que piden la continuidad de Télam presentados por Eduardo Valdés y Pablo Carro, de UP, con firmas de una treintena de sus pares.
En el Senado, la sorpresa fue Pablo Blanco, de la UCR, quien se apartó de la indiferencia de su partido: a través de un tuit, cuestionó al Gobierno por cerrar Télam y se solidarizó con el corresponsal de su provincia, Tierra del Fuego. “Es muy cruel el modo con que el Poder Ejecutivo Nacional está actuando con los trabajadores de la agencia”, se lamentó
No fue la única crítica no peronista en la Cámara alta: a través de un posteo en sus redes, la rionegrina Silva rechazó el cierre de la empresa, respaldó a los 760 agentes y acusó de cínico al vocero Manuel Adorni.
¿Cómo cerraron Télam?
El posteo de Silva es un llamado de atención para la Rosada: forma parte de un lote de partidos provinciales del Senado que, junto a Blanco, pidieron a la vicepresidenta convocar a sesión para rechazar el DNU 70/30, conocido como decretazo, la herramienta del Gobierno para cerrar Télam. Forman un mayoría para rechazarlo.
Si bien sólo circularon proyectos de resolución, puertas adentro del Congreso comenzó un debate sobre la legalidad de la decisión.
La discusión la inició el constitucionalista Andrés Gil Domínguez. Sin una medida administrativa que se haya tomado para bloquear la agencia, el jurista recordó que el artículo 48 del decretazo sólo habilita a privatizar empresas públicas. “Lo que hace el gobierno, es violar el DNU”, sostuvo en su cuenta X. Télam, como sociedad del Estado, se rige por la ley 20.705, que en su artículo 5 señala que puede liquidarse sólo si hay autorización del Congreso. En Gobierno aducen que esa norma fue derogada por el mismo decretazo, pero para la oposición es insuficiente.
“No se pueden eliminar por decreto organismos creados por Ley. Se debe controlar y garantizar buen funcionamiento”, sostuvo Stolbizer, que integra el bloque HCF. La senadora Juliana Di Tullio, de UP, coincidió: “Es ilegal el cierre porque arrasa con libertad de expresión y esa decisión depende del Congreso. Nos presentaremos ante la justicia”, anticipó.
Emergencias
El otro atajo que, especulan en el Congreso, podría citar el Gobierno para eludir el trámite parlamentario es la declaración de emergencias que dispone el decretazo.
En el bloque UP del Senado consideraron que el cierre de Télam confirma que el DNU es inconstitucional porque busca omitir la competencia del Congreso.
El debate sobre el alcance de esta medida continuará el próximo jueves en la bicameral de trámite legislativo. Mientras tanto, la oposición presiona en el Senado para tratar el decretazo en el recinto, tal como permite la ley 26.122 si después de diez días hábiles no fue dictaminado.
La misma norma establece que si un DNU es derogado (se requiere el voto de las dos Cámaras del Congreso) se sostienen los derechos adquiridos mientras estuvo en vigencia.
Por lo tanto, tal como plantea Gil Domínguez, la discusión clave será determinar si el 70/23 le dio armas al Gobierno para cerrar Télam, porque de lo contrario la medida podría ser volteada en Tribunales.
La diputada Carolina Gaillard, de UP, pedirá que constitucionalistas asistan a la bicameral a explicar el alcance del decretazo. Busca respaldo de la oposición dialoguista. Será una oportunidad para hablar de Télam.
¿Están los números?
De habilitarse iniciativas parlamentarias sobre Télam, en el Congreso empezará un poroteo y tal vez, para evitarlo, el Gobierno no se animó a firmar un decreto y enviarlo a comisión.
En el Senado, la suma de UP, Silva y Blanco acumulan 35 votos, a sólo dos del cuórum. Para abrir el recinto, alcanzaría con sumar a la dupla de Misiones o la de Santa Cruz, referenciadas en los gobiernos locales.
En Diputados UP y la izquierda acumulan 104 votos. También se suman los dos del socialismo (Esteban Paulón y Mónica Fein) y Stolbizer. Los 129 votos del cuórum están lejos, pero una avalancha de partidos provinciales podría acercarlos. Hay nueve entre los representantes de las provincias de Salta, Misiones, Río Negro, Neuquén, que forman parte del bloque Innovación Federal. Santa Cruz tiene otros dos.
Durante el tratamiento de la ley ómnibus, estos bloques no estaban convencidos de aprobar la privatización de medios públicos, que no se llegó a votar. La llave para una mayoría es la UCR, con 34 miembros y tres líneas internas: los dialoguistas (referenciados en gobernadores), Evolución (de Martín Lousteau) y una línea crítica con figuras como Julio Cobos y Mario Barletta. Por ahora, ninguno defendió Télam.