El Presidente celebró el veto de Trump a su socia en la grieta con la muletilla que acuñó CFK. Cruce de alta gama en la Argentina de cachivaches y soretes.
Cristina Fernández de Kirchner y Javier Milei, en el Congreso.
Javier Milei celebró la sanción que Estados Unidos le impuso a Cristina Fernández de Kirchner por "participación en corrupción significativa" y le dedicó un "Che Cristina" a su antecesora. La chicana apela a la muletilla que incorporó la expresidenta para referirse al mandatario desde que decidió bajar al barro de la pelea digital con un estilo más llano y vulgar.
"Che Cristina... Fin", escribió el jefe de Estado -no aclaró si en su condición de ciudadano o de presidente- en un posteo en el que, además de administrarle a su antecesora una dosis de su propia medicina tuitera, cerró con la marca de su vocero, Manuel Adorni. Todo muy elevado.
Además, Milei replicó los tuits del secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, en los que anunció que prohibió la entrada a Estados Unidos, por "participación en corriupción significativa", de CFK y del exministro de Planificación Federal, Julio De Vido.
Según el comunicado firmado por Rubio, el halcón republicano de ascendencia cubana que designó Trump al frente de la diplomacia estadounidense, Cristina y De Vido "abusaron de sus cargos al orquestar y beneficiarse económicamente de múltiples esquemas de soborno relacionados con contratos de obras públicas, lo que resultó en el robo de millones de dólares del gobierno argentino".
La expresidenta no se iba a perder este ofertón. Cincuenta y cinco minutos después de la publicación del "Che Cristina", le decidó primero varios párrafos envenenados a Trump, pero cerró con una posdata dirigida a "Che", que es Milei, a quien volvió a tratar de vos, como viene haciendo.
"P/D: Che… “Economista experto en crecimiento con o sin dinero”… y en cripto estafas… ¡Como te duele lo que te digo, eh! No pudiste contenerte y saliste a postear enseguida dejando todos los dedos marcados que fue un pedido tuyo. A vos solito no te da la nafta… ni en la economía, ni en la política. Por eso salís a pedir ayuda al Fondo Monetario y a Trump… SE NOTA MUCHO, MILEI!", escribió la presidenta del PJ.
Al cierre de esta nota, la pelea continuaba. CFK bloqueó a Milei en Twitter y el Presidente le dedicó un ¿último por este viernes? mensaje bien de cancha, como corresponde a un jefe de Estado: "Che Cristina...!!! CORRISTE...".
La expresión "Che Cristina" que usó Milei para chincanear a la expresidenta es la devolución de gentilezas del jefe de Estado a los tuits en los que CFK lo invoca de esa manera para destratarlo a la misma altura, despojada de las normas de la diplomacia que solían revestir el diálogo entre personas que desempeñan o desempeñaron la primera magistratura.
En una decisión estratégica destinada, como ha explicado Letra P, a allanar la comunicación para ganar espacio en el lodo resbaladizo de las redes sociales, la expresidenta ha llamado "chachivache" al Presidente y ha opinado sobre su aspecto, lejos de las normas progresistas de evitar hablar de los cuerpos y las apariencias de las personas.
También ha insultado a una ministra, a quien llamó "burra", como le dijo "burro" a otro alto funcionario del gobierno libertario.
Claro: al lado de los insultos de gruesísimo calibre que suele descargar Milei sobre toda forma de disidencia (ensobrados, corruptos, soretes, siniestros, delincuentes, sindigarcas, parásitos, degenerados, econochantas, hijos de puta, zurdos de mierda...), la expresidenta es Eugenia de Chikoff.