El jefe de Gabinete viajó a Santa Fe. Puso la cara para los cachetazos, pero no habló. Retenciones, INTA e importación de maquinaria usada, entre los reclamos.
Maximiliano Pullaro y Guillermo Francos.
El corte de cintas formal de la edición 2025 de Agroactiva estuvo cargado de tensión. La visita, confirmada a último momento, de Guillermo Francos le otorgó a Maximiliano Pullaro y Myrian Prunotto la posibilidad de renovar los reclamos al gobierno de Javier Milei, que sintonizan con la realidad del campo y la industria de la pampa húmeda.
Casi un centenar de autoridades pusieron a prueba la resistencia del escenario principal de Agroactiva, en la entrada al predio. El acto de apertura hilvanó la bendición de los curas de Armstrong y de Las Parejas con los discursos del Sergio Iraeta, secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, que dijo que “con disciplina fiscal le vamos a sacar la manía al campo”; Guillermo Luzzi, intendente local; y Rosana Nardi, la cara principal de la familia fundadora y dueña de la muestra. Atento a todo, en primera fila, escuchaba el jefe de Gabinete.
Aunque Pullaro acaparó el protagonismo, se esperaban las presencias de sus pares de Córdoba, Martín Llaryora; y de Entre Ríos, Rogelio Frigerio. El entorno del entrerriano contó que tuvo que suspender su visita a último momento por “motivos logísticos” y el cordobés envió a su vicegobernadora. Así, no pudieron o no quisieron cruzarse con Francos, que hizo base en el stand del Banco Nación, donde atendió a algunos medios.
Un detalle: la única empresa que visitó el jefe de Gabinete fue la fábrica de maquinaria agrícola Apache. Allí se encontró con su dueño, Carlos “Indio” Castellani. Castellani es, además, presidente de la Fundación Pensar de Santa Fe y una figura gravitante del PRO. Su sobrina, Fernanda, es diputada provincial. ¿Se habló del pacto del macrismo con LLA? No lo confirmaron en el entorno de Francos, aunque sí reconocieron que consideran que el acuerdo es un hecho.
A pesar de las ausencias, alcanzó con el paso por el micrófono de Prunotto para espesar el ambiente. “Quiero aprovechar que nos acompaña el Gobierno para pedir por la quita de retenciones”, bramó la vicegobernadora mediterránea. “Si nos sacan las retenciones por dos años, en cinco duplicamos la producción. Los dólares no están en el colchón, están invertidos en el país por los chacareros”, sumó, combativa. Cuando terminó su discurso fue saludada por toda la primera fila… menos por Francos.
Lo de Prunotto sirvió de introducción para la ristra de exigencias que Pullaro plasmó cuando la sucedió en el escenario -al que increíblemente se seguía subiendo gente-. El gobernador marcó el territorio desde el principio cuando le dio la bienvenida al “querido” Francos “a la provincia más productiva y la muestra más grande de Latinoamérica”. El santafesino no perdió el tiempo y retomó rápido lo que había dicho Prunotto: “Nuestros chacareros no son personas que lo que ganan lo llevan a paraísos fiscales”, defendió.
Fue el pie que necesitó Pullaro para sus reclamos. Comenzó con el pedido de quitar “las malditas retenciones” para que “cada peso que genere el campo quede en el campo”. Le sumó la solicitud de “rever la autorización para importar maquinaria usada” y así “proteger la industria”. “Argentina no va a salir adelante con el capital financiero, sino con estos gringos que están dispuestos a poner el pecho”, clamó el santafesino.
No fue lo único. El gobernador santafesino también rescató que es el campo el que “más invierte en ciencia y tecnología”, porque “lo que más disfruta el gringo es producir más”. “Ahí están las universidades y el INTA, que pedimos que se cuide, porque es federalismo”, comentó Pullaro. No es casual: este miércoles se conoció la intención de la Casa Rosada de que Milei firme un decreto reestructurando el organismo. Es un tema caro a los sentimientos chacareros: fue el pasaje del discurso que despertó más aplausos.
Estoico, Francos escuchó atentamente cada discurso. El auditorio esperaba que el cierre estuviera a su cargo, pero la locutora -la misma que anima cada acto del gobierno de Santa Fe- dio por terminado el evento sin que el jefe de Gabinete tomara la palabra. “No quiso hablar, solo podía hacerlo una persona del Gobierno y le cedió el turno a Iraeta”, contaron a su lado. Sonó extraño: el representante de la Casa Rosada puso la cara para recibir otra vez los cachetazos de las provincias y ni siquiera se molestó en responder o dar explicaciones.
Lógicamente, los medios abordaron al jefe de gabinete al terminar el acto. En esa improvisada conferencia de prensa, reconoció que la idea no es que las retenciones se mantengan para siempre, pero el Gobierno las mantiene en pos del equilibrio fiscal. También defendió el veto a la ley que aprobó Diputados para aumentar las jubilaciones: “No se puede pagar, es una situación que el Gobierno heredó y ahora pretenden que nosotros hagamos magia para pagar más”, se quejó.
Por último, Francos respondió a dos reclamos de Pullaro. Primero, dijo que “el Gobierno no está en contra de la industria” al impulsar la importación de maquinaria usada y que solo está buscando “que bajen los precios”. Por otro lado, aclaró que la desregulación del INTA “no implica que vaya a desaparecer”, sino que “se está tratando de unificar las administraciones para bajar gastos y que se puedan dedicar esos recursos a mayor investigación”. “No se va a manejar de la misma manera que se está manejando ahora”, cerró.