ROSARIO (Corresponsalía Santa Fe) La construcción electoral del libertario Javier Milei en esta provincia es un reflejo de su exposición pública: exacerbada, desordenada y agitada. En plena efervescencia mediática y con un crecimiento repentino en las encuestas, el economista ultraliberal choca con su carencia de armado, mientras que al interior de la bota empieza una disputa entre quienes quieren su bendición y quienes esperan pacientes que el fenómeno los encumbre. En medio del desorden, apareció un designado que, por ahora, aporta señalamientos del resto.
El fenómeno Milei fermentó en los ánimos de la sociedad antes de que el protagonista pudiera lograr una estructura con nombres y candidaturas. Santa Fe es el ejemplo claro de ello. En otras provincias logró sellar algunos acuerdos que le dan cierto esqueleto organizativo, como en La Rioja con los Menem y Tucumán con los Bussi. Lo único claro en la provincia es que apostará a un espacio único liberal sin integrar Juntos por el Cambio o algún frente de frentes donde tiene la puerta cerrada.
Desde fines del año pasado, Milei puso el ojo en Rosario con un par de encuentros y Romina Diez hizo de organizadora. La economista liberal influencer parecía la encargada de reunir voluntades, pero no tiene política encima. Quizás por ello, la semana pasada trascendió que José Bonacci, un mercader de la política electoral, fue designado para empezar a moverle los hilos al economista de cara a 2023.
Bonacci apareció y eclipsó al resto. En primer término. porque puede, efectivamente, aportar lo básico para hacer política: un partido. El ex-Modín alquila su sello Unite desde hace años a candidatos sin estructura o perjudicados por la rosca electoral. Sucedió, entre tantos, con Amalia Granata. Milei no tiene partido por más que se enmarque en el paraguas La Libertad Avanza; de hecho, ya acudió al exintegrante del partido carapintada para hacer pie en las elecciones del año pasado en la Ciudad de Buenos Aires. Ese vínculo parece mantenerse. Igualmente, ese aporte sería sólo un paso para un armado.
El eclipse de Bonacci arrastra problemas con el resto. Hasta hace un mes se dijo que el economista tenía la pretensión de armar Fuerza Libertaria como franquicia santafesina y que Diez figuraba en la primera fila del armado. Sin embargo, parece haberse pinchado justamente al haber entrado en escena Bonacci. El perfil de la economista puede desembocar más bien en una candidatura antes de hacerlo en la rosca política con su inexperiencia.
En tanto, la Unión del Centro Democrático (UceDé) se posicionó como terminal política en territorio santafesino de Milei desde los inicios mediáticos del ahora diputado nacional. En 2020 le armó encuentros a Milei y a José Luis Espert. Sin embargo, según supo Letra P, el ingreso de Bonacci al juego libertario santafesino despertó su rechazo y puso el vínculo en stand by.
Entre ellos hay una dependencia cruzada: un líder sin partido y un partido sin líder. Con todo, no es tan fácil de lograr el acercamiento final. En parte, porque no son los únicos que sobrevuelan al economista para prenderse de una eventual candidatura presidencial, por más que en Santa Fe la boleta única no permita el arrastre de la boleta. El asesor político Álvaro Zicarelli intenta, con más intención que éxito, hacer de nexo en Santa Fe luego de internarse en la política local al trabajar con la diputada provincial Granata, otra dirigente que se arrima al economista ultra. Si hay Bonacci, difícil que haya Zicarelli, reflexionaron a este medio.
Su perfil antiderechos parece sumar adhesiones en Santa Fe. No sólo Granata puede conectar en ese punto. El diputado provincial del bloque Vida y Familia, Nicolás Mayoraz, intenta poner la firma para sustentar la formación del grupo Milei en Santa Fe. Curiosamente, Mayoraz fue acusado de pedirles parte de los sueldos a sus asesores; totalmente lo contrario de lo que profesa el diputado nacional.
Todos lanzan mensajes, pero ninguno obtiene el aval oficial. Por eso, cualquiera que comulgue con La Libertad Avanza, avanza. Así sucede con el intendente de Las Rosas, Javier Meyer, quien salió con los tapones de punta a escupir los conceptos anticasta de Milei en la radio rosarina más escuchada. “Lo único que hemos experimentado es una sucesión de fracasos, de choreo, de mamarrachos, de corruptos, de falopa que nos inunda y nadie hace nada, todo queda en el discurso. El derecho a la oportunidad está habilitando a Milei”, sostuvo para luego tratar de “soretes” a algunos dirigentes locales. Usó el mismo tono, por momentos pasando los límites, que aplica el economista en sus entrevistas. Otro que aportó al río revuelto.
Milei tiene poco involucramiento en el armado. A lo sumo, puede bendecir a alguien o delegar responsabilidades. Su hermana Karina es una de las encargadas de hacer los contactos con el territorio. Justamente, el vínculo que pueda lograr en ese sentido es lo que está carente de orden en este momento.