Luego de una extensa jornada en ambas cámaras, la Legislatura bonaerense sancionó en la madrugada de este miércoles el Presupuesto y la Ley Impositiva 2022. Fue con el respaldo de la oposición, después de que el oficialismo concediera una serie de modificaciones al proyecto original como la incorporación del Fondo de Infraestructura Municipal (FIM) por 18 mil millones de pesos, la inclusión de otros siete mil millones para un Fondo de Seguridad y la creación de un Fondo Compensador para los distritos del interior desfavorecidos en el reparto de plata producto del Coeficiente Único de Distribución (CUD) durante la pandemia.
La denominada ley de leyes prevé para el próximo año gastos por 3,1 billones de pesos; aumentos de impuestos de 35% promedio, en sintonía con la estimación inflacionaria que había presentado a nivel nacional el ministro de Economía Martín Guzmán, pese a la fallida aprobación del proyecto de Presupuesto en el Congreso; y una toma de deuda que ronda los 94 mil millones de pesos. Todo ello, según explicó hace unos días el titular de la cartera de Hacienda y Finanzas bonaerenses, Pablo López, será para sostener seis ejes principales de gestión: aumento en la inversión en infraestructura; reactivación productiva y económica, inversión en salud pública y seguridad y reducción de la brecha de género.
“Este acto de consenso y responsabilidad institucional le permite a la provincia trazar un rumbo y dar previsibilidad a iniciativas y obras fundamentales para las y los bonaerenses”, destacó el gobernador Axel Kicillof minutos después de la sanción definitiva. El texto, que publicó en sus redes sociales, también es un mensaje a la oposición que acompañó con su voto los múltiples proyectos del Ejecutivo, sobre todo después de la incorporación de modificaciones que gira de manera directa varias partidas presupuestarias para los municipios gobernados por el PRO y la UCR.
Otra de las ediciones al proyecto fue la condonación de deudas tomadas por los intendentes durante la emergencia sanitaria, un reclamo al que se prendían tanto oficialistas como opositores. En este sentido, el vicepresidente del bloque de Juntos en el Senado, Agustín Máspoli, remarcó: “Estamos viviendo un momento económico complicado con inflación y medidas equivocadas y desde lo político venimos de un erróneo rechazo en el Congreso. En la provincia estamos permitiendo que el gobernador, intendentes y bonaerenses tengan presupuesto”.
Aun así, hubo voces disidentes en la oposición, sobre todo en la Cámara baja, en la que el diputado Santiago Passaglia apuntó contra un “reparto discrecional” que excluye a algunos distritos de Juntos. “San Nicolás es el tercer distrito más grande del interior y el año que viene para obra pública nos van a destinar cero pesos; con eso están hipotecando el desarrollo de millones de vecinos que son tan bonaerenses como los que viven en La Matanza o en Lomas de Zamora”, apuntó el legislador que junto a su familia gestiona esta comuna de la Segunda sección electoral.
Uno de los encargados de defender la iniciativa del gobernador fue el diputado Juan Pablo de Jesús, que preside la Comisión de Presupuesto. “Las políticas de nuestro gobernador llegan a todos los municipios, por eso se incluye un Fondo de Seguridad para que todos puedan adquirir patrulleros y cámaras”, remarcó el exintendente de La Costa y destacó también “la inversión récord” para el 2022 en la provincia de Buenos Aires.
Además de las 41 voluntades de Juntos que comanda el radical Maximiliano Abad, el oficialismo contó con el respaldo del diputado Fabio Britos, que conduce el monobloque 17 de Noviembre, y de Walter Carusso y Martín Domínguez Yelpo, quienes integran Cambio Federal. En tanto que se opusieron los dos diputados y la diputada del bloque Avanza Libertad que preside Guillermo Castello; y las bancadas individuales del Frente de Izquierda que integran Guillermo Kane y Graciela Calderón.
Tal como dio cuenta Letra P, uno de los actores principales del Frente de Todos en estas negociaciones fue el jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, principal nexo con los intendentes de otros partidos políticos.
Por otra parte, en la misma jornada se sancionó la Ley de Ministerios que crea las carteras de Ambiente, que quedará para la diputada nacional de La Cámpora Daniela Vilar; de Transporte, a cargo del dirigente del Frente Renovador Jorge D’Onofrio; de Vivienda y Hábitat, que será conducido por el exministro de Infraestructura bonaerense Agustín Simone; y el Instituto Cultural, que quedará a cargo de la exlegisladora Florencia Saintout. También se aprobó el pliego en el Senado por el que se designa a Alberto Sileoni director general de Cultura y Educación, quien reemplazará a Agustina Vila. Además, el justicialismo volvió a quedarse con la Defensoría del Pueblo bonaerense al ratificar en su cargo al exlegislador Guido Lorenzino por un nuevo periodo.
Si bien las modificaciones al Presupuesto y la Ley Impositiva demoraron buena parte de la sesión, el punto crítico giró en torno al proyecto que buscó cambios en la ley que limita las reelecciones en cargos ejecutivos y legislativos. Si bien era un proyecto del senador del PRO Juan Pablo Allan que contaba con el respaldo de la cúpula de los principales dirigentes del espacio como los intendentes Jorge Macri (Vicente López), Néstor Grindetti (Lanús) y Julio Garro (La Plata), hubo serias diferencias al interior de la alianza opositora. Es que, los diputados y diputadas que responden a Vidal, el massismo y una porción de los libertarios y el trotkismo intentaron frenar sin éxitos la iniciativa. Finalmente, se alcanzaron los dos tercios de los votos necesarios para su tratamiento gracias a los legisladores y legisladoras del PRO, el PJ, los libertarios Nahuel Sotelo y Constanza Moragues Santos, quienes luego, de todos modos, se opusieron al proyecto, y Daniel Lipovetzky, que decidió abstenerse de votar la modificación que le otorgó la posibilidad de competir por otro mandato a los jefes comunales.
“Mi posición sobre las reelecciones indefinidas es de público conocimiento, estoy totalmente en contra. Es por eso que me abstuve de votar el proyecto de ley. En el recinto acompañé el pedido de la gran mayoría del bloque de JxC para que el proyecto se discutiera”, argumentó Lipovetzky.