En medio de la turbulencia económica y preocupada por señalar que en Argentina no está en riesgo la propiedad privada y se cumplen los fallos judiciales, la Casa Rosada siguió de cerca este jueves el desalojo del predio de Guernica y el conflicto por las tierras de la familia Etchevehere, en Entre Ríos.
En contacto permanente, Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner respaldaron el accionar del gobernador Axel Kicillof, que este viernes recibirá al Presidente en Lomas de Zamora junto al intendente Martín Insaurralde y al ministro de Seguridad, Sergio Berni, ejecutor de la orden judicial de desalojo y de la represión en el predio.
“En Argentina rige el Estado de derecho y se cumplen las mandas judiciales. No podemos hacer otra cosa”, le dijo a Letra P un funcionario de alto rango de la Casa Rosada sobre el desalojo de Guernica y la situación que se vivía en Entre Ríos, luego de que la jueza María Carolina Castagno ordenara la “inmediata restitución” del campo Casa Nueva, en el que permanecían Dolores Etchevehere y militantes liderados por Juan Grabois, al exministro de Agroindustria Luis Miguel Etchevehere.
Al igual que Cristina, el Presidente siguió de cerca el desalojo de Guernica, que se ejecutó esta madrugada. En la previa, Kicillof le había avisado que esta semana llevaría adelante la orden judicial si no lograba que todas las personas que ocupaban el predio llegaran al acuerdo que proponía el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque. “Cada vez que le preguntaron, Axel dijo que la orden se iba a llevar adelante y que no había ninguna posibilidad de que la ocupación en el predio continuara. Exploramos todos los caminos posibles para evitar una situación de violencia, pero desde la semana pasada vimos que no había canal de diálogo”, explicaron en la gobernación bonaerense. Así se lo hizo saber al Presidente, que avaló la decisión.
Aunque no se resolvió de manera absoluta, en la Casa Rosada elogiaron el trabajo en el territorio que hizo el ministro. “El 80% de la toma se resolvió perfectamente gracias a la pericia, la vocación y el trabajo que le puso el Cuervo (por Larroque), que se cargó al hombro todo. Hizo un laburo enorme”, dijo uno de los ministros de mayor confianza del Presidente.
En paralelo, en los últimos días, el Gobierno también tuvo el ojo puesto a lo que sucedía en Entre Ríos y lamentó que la pelea familiar de los hermanos y la hermana Etchevehere hubiera despertado las protestas de un sector del campo que otra vez salió a acusar al Frente de Todos de querer avanzar sobre la propiedad privada, algo más que inconveniente para la Casa Rosada en plena puja con el mercado por el dólar, la búsqueda de inversiones y los intentos de diálogo con el campo.
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, mantuvo contacto permanente con Grabois y le transmitió la postura presidencial. El dirigente social anunció que acatará el fallo judicial, aunque lanzó críticas al Gobierno.
Este viernes, Fernández volverá a verse con Kicillof, en el marco de los anuncios del Plan Integral de Seguridad, el programa que lanzaron juntos en septiembre desde la Quinta de Olivos. El lugar elegido para la entrega de 120 patrulleros y equipamiento policial será Lomas de Zamora, junto al intendente Insaurralde y a Berni. El Presidente y el gobernador también se vieron este miércoles en Luján, donde compartieron el anuncio de inversiones de la Compañía de Cervecerías Unidas.