Sergio Massa afina el discurso que dará el domingo a la noche, una vez que se conozcan los resultados de las elecciones generales. Convencido de que peleará en el ballotage del 19 de noviembre contra Javier Milei, el ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria (UP) se prepara para salir a seducir al electorado de Patricia Bullrich, con especial énfasis en el radicalismo y el ala blanda y menos ideologizada del PRO.
De concretarse el resultado que espera, Massa reforzará el mensaje que el oficialismo empezó a insinuar la noche de las PASO cuando los primeros voceros, Daniel Scioli y Cecilia Moreau, llamaron a “ampliar la mayoría”. Después, el postulante habló de la necesidad de conformar un “gobierno de unidad nacional” al que, prometió, convocaría a las mejores figuras de la UCR, el PRO y la sociedad civil.
El discurso se afianzó con el correr de las semanas y se terminará de consolidar el domingo con el resultado puesto. “Hay que abrir los brazos, ampliar”, apuntan en el equipo de campaña del ministro, donde descuentan que la convocatoria será hacia Juntos por el Cambio (JxC). Creen que Bullrich “está afuera del ballotage” y que en el tercer tramo de la campaña la pelea será contra Milei.
Qué tan lejos puede llegar Massa con su convocatoria ya no es tema de discusión. “No hay problema. Que convoque a todos”, dicen incluso en las filas kirchneristas. Las principales figuras de la Unión Cívica Radical (UCR) deberán estar atentas a sus teléfonos. Serán las primeras en recibir un llamado de Massa, que entiende que el votante radical será el primer espantado ante la figura de Milei, que ya hizo público su desprecio por los expresidentes Raúl Alfonsín e Hipólito Yrigoyen.
Aunque es conocido el diálogo del ministro de Economía con referentes del partido, como Gerardo Morales o Emiliano Yacobitti, todavía no se tradujo en ofrecimientos concretos. “Falta mucho para eso, primero hay que llegar al ballotage y mirar los resultados de cada uno”, dicen en el massimo. El candidato de UP dice que tampoco pretende hacer “un acuerdo de cúpulas”, sino que buscará convocar “a los votantes, no a los dirigentes”.
La gran pregunta es si, en caso de que Massa y Milei llegaran a la segunda vuelta, la UCR hará un llamado público orgánico a votar por el candidato de UP o solo habrá apoyos individuales de la dirigencia. El candidato dijo en los últimos días que buscará armar un gobierno "de unidad, con radicales, socialistas y sectores empresarios y del trabajo".
En una situación diferente está el PRO, donde conviven en tensión diferentes posturas. En UP entienden que el sector más duro del macrismo apoyará sin dudas a Milei si vislumbra la posibilidad de derrotar al peronismo. Esa visión estará comandada por Mauricio Macri, que no oculta su simpatía por el libertario. Massa apuntará a seducir al votante blando, más cercano a Horacio Rodríguez Larreta o a dirigentes del PRO que tienen origen en el peronismo, como Diego Santilli o Emilio Monzó, con quien tiene una relación de amistad que lleva décadas.
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Cuál será la fórmula para polarizar con el libertario también es un tema que está sobre la mesa de discusión. Una primera lectura sugiere trazar el eje de división democracia versus autoritarismo, pero en equipo de campaña de UP hay diferentes miradas sobre el tema. Las encuestas sugieren que esa dicotomía no sería exitosa como propuesta de seducción del votante de Bullrich, que no tiene a la democracia entre sus valores más preciados y, en cambio, le asigna una importancia vital al concepto de orden.
La estrategia de polarización que construyó hasta ahora el massismo con el libertario estuvo más orientada a exponer públicamente el pensamiento o las propuestas de Milei. La acción en redes sociales fue en ese sentido. En el comando de campaña de UP consideran que esa línea exitosa deberá continuar después del 22.
El domingo abrirá también un desafío: cómo hará Massa para compatibilizar su llamado al electorado de JxC con los escenarios que se construyan a partir de los resultados de la provincia y de la Ciudad de Buenos Aires. A priori, se entiende que Leandro Santoro deberá convocar al electorado del libertario Ramiro Marra si quiere reunir fuerza en un eventual ballotage contra Jorge Macri por la jefatura de Gobierno porteña. En tanto, en caso de conseguir la reelección, Axel Kicillof tendrá el desafío de festejar con mesura para evitar que quienes votaron a Néstor Grindetti en la provincia, migren hacia Milei en un ballotage.
