El predio que la Sociedad Rural tiene en Palermo, territorio amable para el macrismo, será cancha de la feroz guerra interna que estremece al PRO. Los trapitos sucios se lavan en casa y, a falta de una propia, buena es la de un amigo. Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich pasarán este miércoles por esa meca de la aristocracia nacional, aunque no se verán las caras.
Cuarenta y ocho horas después de que el jefe de Gobierno porteño soltara la bomba de las elecciones porteñas "concurrentes", que hizo escalar la tensión interna en el partido amarillo hasta niveles inimaginables para una fuerza que tiene el camino bastante allanado para volver al poder, el alcalde y la exministra de Seguridad, su principal adversario en la pelea por la candidatura presidencial, participarán de una jornada organizada por la SRA para escuchar qué tienen para ofrecerle al campo las figuras políticas con aspiraciones de llegar a la Casa Rosada.
Como informó Letra P este fin de semana, el objetivo del encuentro es conocer qué harán, de sentarse en Balcarce 50, con las retenciones, el tipo de cambio y las exportaciones, entre otras políticas.
Aunque la entidad cursó invitaciones a todo el mundo, solo habrá representantes de fuerzas de la oposición. Estarán presentes, además de Larreta y Bullrich, Javier Milei(La Libertad Avanza), Gerardo Morales (Unión Cívica Radical - Juntos por el Cambio), Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Republicano Federal - Juntos Por el Cambio) y el peronista no frentetodista Juan Schiaretti.
Antes, pisará el predio de Palermo el expresidente Macri, que llegará "profundamente desilusionado" con Larreta a un almuerzo organizado por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp), un lobby que reúne a la crema del Círculo Rojo.
La secuencia de apariciones está regida por la lógica de las tres horas. Macri está convocado para las 12.30, Bullrich tiene turno para dar examen ante el campo a las 16.05 y Larreta se presentará a las 18.57 (la precisión agraria, una jactancia casi nórdica). Con todo, las tres personalidades centrales de la agenda política de esta semana estarán unidas por el hilo rojo de la ardiente interna amarilla.