El polémico presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Mauricio Claver-Carone, protagonizó un vuelco en su relación con la Argentina luego de negarle a la Casa Rosada la entrega de un nuevo préstamo internacional. Este viernes, celebró la llegada de Sergio Massa al gabinete que conduce el presidente Alberto Fernández, acaso producto de las relaciones que ha cultivado históriamente el designado superministro en Estados Unidos.
“Recibimos gratamente la oportunidad de trabajar con el Ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, y espero colaborar estrechamente con él en su función”, le aseguró a Infobae el hombre que fue designado por el expresidente Donald Trump luego de romper la tradición diplomática que indica que la presidencia del BID recae en manos latinoamericanas.
Esta semana, mientras la ahora exministra de Economía Silvina Batakis lideraba su primera y única gira internacional por los Estados Unidos, Claver-Carone publicó un artículo en el diario The Wall Street Journal, donde adelantó que su gestión no girará los fondos de 500 millones de dólares que son parte de un préstamo bilateral ya acordado para mejorar la infraestructura sanitaria de la Argentina y acelerar su transición energética.
“Corresponde a las instituciones multilaterales adoptar los más altos estándares de integridad financiera y transparencia y ayudar a sus miembros a hacerlo también”, escribió en las páginas de uno de los medios más leídos por la élite financiera internacional, donde también exigió que Buenos Aires cumpla las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) ante lo que describió como el “tumultuoso historial financiero” del país.
Como relató Letra P, sus dichos provocaron malestar en la administración del Frente de Todos (FdT) y generaron un nuevo capítulo de tensiones en un vínculo ya de por sí conflictivo. En Balcarce 50 perdura el enojo por su nombramiento al frente del BID, un puesto para el cual Alberto Fernández propuso al ahora exsecretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, quien trabajó varios años en ese organismo y quien no reunió la cantidad de votos suficientes ante la campaña de presión que lideró Washington para colocar a un halcón opositor a los gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Además, fue el propio Claver-Carone quien reconoció públicamente que la administración republicana de Trump le entregó el préstamo de 44.500 millones al expresidente Mauricio Macri para fortalecer su gestión y evitar la victoria del peronismo en las elecciones de 2019, algo que, de todas maneras, no pudo lograr.
“El BID está comprometido a promover el desarrollo socioeconómico de largo plazo. Nuestra cercana colaboración mejorará la vidas de los argentinos y ayudará a abordar los desafíos macroeconómicos más apremiantes de Argentina”, agregó el funcionario, que nació en Miami en el riñón de una familia de origen cubano con una importante impronta anticastrista.
Su cambio de postura, en menos de una semana, pone en evidencia también los lazos del flamante superministro con EE.UU. El hincha de Tigre tiene línea directa con algunos despachos ubicados en Washington y es uno de los interlocutores válidos del Gobierno con el país del Norte. A raíz de esto, por ejemplo, este jueves, en el marco de las salidas y entradas que registró el gabinete nacional, presentó su renuncia Béliz, quien centralizaba hasta entonces las negociaciones con los organismos de crédito, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y el propio BID en una tarea que, a partir de ahora, estará en manos de Massa.
En junio del año pasado, Massa viajó a los Estados Unidos, donde se reunió con distintos sectores del mundo privado y empresarial y el director de Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad, Juan González, a quien, meses después, agasajó con un asado en Tigre cuando el hombre clave de Joe Biden para América Latina visitó la Argentina. De todas maneras, el plato fuerte de aquel viaje fue la cena que compartió con el expresidente demócrata Bill Clinton y su esposa y excandidata a presidenta, Hillary Clinton.