Mientras intenta dejar atrás la crisis interna que generó la traumática salida de Matías Kulfas del Gabinete, el presidente Alberto Fernández parte este martes por la noche hacia Los Ángeles, donde participará de la Cumbre de las Américas, acompañado por funcionarios de su máxima confianza y por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, a quien busca contener tras el nombramiento de Daniel Scioli como ministro de Desarrollo Productivo.
“Vamos a defender los derechos de América Latina”, dijo este martes el Presidente, en el diálogo que mantuvo con acreditados en la Casa Rosada durante el brindis por el Día del Periodista. Fernández se refirió así a su participación en la IX Cumbre de las Américas, a la que no asistirán, entre otros, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, como forma de protesta ante la exclusión de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Fernández, en cambio, participará como titular Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y llevará la voz de protesta de otros países de América Latina. Así lo acordó en conversaciones con presidentes de la región, como el propio López Obrador, el boliviano Luis Arce y el chileno Gabriel Boric.
El Presidente volará a Estados Unidos acompañado por una comitiva integrada por dirigentes de su extrema confianza: el canciller, Santiago Cafiero; la ministra de Salud, Carla Vizzotti; la portavoz Gabriela Cerruti; el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello; el de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz; las secretarias de Legal y Técnica, Vilma Ibarra; y de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación, Cecilia Nicolini; el jefe de asesores, Juan Manuel Olmos; y el diputado Eduardo Valdés. También estarán la primera dama, Fabiola Yáñez, y Massa.
Más allá de la formalidad institucional, la invitación al presidente de la Cámara de Diputados tiene como telón de fondo la situación interna del Frente de Todos. Massa y Fernández se reunieron el sábado en la Quinta de Olivos, apenas después de que el Presidente le pidiera la renuncia a Kulfas, tras el tuit en el que Cristina Fernández de Kirchner lo acusó de haber montado una operación en off the record en su contra.
Ese mediodía, el Presidente le habría ofrecido a Massa que se hiciera cargo del Ministerio de Desarrollo Productivo, que quedaba vacante, pero el titular de la Cámara de Diputados rechazó la oferta y le planteó al Presidente que, en lugar de hablar sobre un cambio de nombres, la Casa Rosada debía plantearse un rediseño del Gobierno. A tono con el pedido de Cristina, Massa le dijo a Fernández que debía repensar el esquema de la toma de decisiones del FdT.
El Presidente decidió avanzar, entonces, con el ofrecimiento a Scioli, hasta entonces embajador en Brasil. “Daniel es un gran amigo. Lo hablé mucho con Sergio Massa, cuya opinión yo pondero particularmente. Estuvimos viendo cómo encarrilar el momento que se estaba dando”, contó este martes Fernández en el brindis ante la prensa, donde volvió a criticar a Kulfas. En el entorno de Fernández afirman que el mandatario invitó a Massa a Los Ángeles para tratar de contener su disconformidad con el nombramiento de Scioli.
En tanto, el titular de la Cámara de Diputados cree que el viaje será una oportunidad propicia para hablar sobre el funcionamiento de la coalición y la interna. Massa también fue invitado por Fernández a sumarse a la comitiva que lo acompañará a la Cumbre del G7, a fin de junio, en Alemania.
Este martes, además, el Presidente se mostró “feliz” por el regreso de Agustín Rossi, a quien calificó como “un baluarte incalculable para el Gabinete”. El exministro Defensa estará a cargo de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). En la misma charla, Fernández se refirió a la relación con la vicepresidenta. “Cada uno piensa lo que piensa. Seguimos cumpliendo los roles que tenemos que cumplir. Los dos tenemos la responsabilidad institucional que debemos tener. Yo en eso nunca tuve ningún temor ni ninguna duda. Mi preocupación en todo caso es ver cómo funciona el Gobierno”, dijo el jefe de Estado, antes de partir rumbo a Los Ángeles.
Como contó Letra P, el viernes el Presidente estaba “contento” en la intimidad por el reencuentro con Cristina, en el marco de la celebración por los cien años de YPF; y se mostró también conforme este lunes por la presencia de enviados de la vicepresidenta a la presentación del proyecto de ley que grava la renta inesperada, que hizo junto al ministro Martin Guzmán, uno de los más apuntados desde el kirchnerismo. Según un dirigente que dialoga con ambos socios del FdT, la vicepresidenta y su entorno recibieron el sábado con mucho entusiasmo la pronta reacción del Presidente frente a la crisis desatada con Kulfas y celebraron la llegada de Scioli.