Dos semanas después, las PASO continúan produciendo coletazos en la política santafesina. La disputa por bancas nacionales impactó de lleno en la Legislatura y los nueve bloques que venían funcionando comienzan a sentir los movimientos subterráneos que provocaron los resultados. Las alianzas armadas para la contienda nacional tienen que sostenerse en las siete semanas que restan hasta las elecciones generales y acoplar a la campaña las discusiones en el parlamento provincial. El equilibrio es quirúrgico para los y las dirigentes que integran sociedades gestadas para las listas nacionales y que no necesariamente coinciden con los armados de la política local. Desde todos los espacios, coinciden en que hay un cambio de escenario y que la manera de evitar cimbronazos será avanzar tema por tema y buscar agendas comunes, sobre todo con discusiones claves que se aproximan como el Presupuesto 2022.
El interbloque mayoritario del Frente Progresista, integrado por el PS, Creo, Partido Gen, el PDP y la UCR, podría empezar a tener una nueva dinámica y desplazamientos en varias direcciones. Es que una parte de la UCR jugó en la elección nacional dentro de Juntos por el Cambio (JxC) y no va a dejar que el triunfo pase desapercibido. Allí la figura es Maximiliano Pullaro, de la UCR Neo, que dejó atrás la tercera vía que buscaban los frentistas y en estas elecciones decidió jugar en la grieta. La movida lo posicionó segundo en la interna de JxC, detrás de Carolina Losada y le permite volver a pensar en conducir una coalición no peronista aún más amplia que la que diseñaron sus socios locales en el Frente Amplio Progresista.
El exministro de Seguridad de la gestión de Miguel Lifschitz ahora tiene un pie en cada bloque también en la Legislatura. Su participación se sostiene en el Frente Progresista, pero consiguió en JxC un monobloque que le tributa directamente. Se trata del diputado del PRO Gabriel Chumpitaz, que quedó tercero en la lista para disputar una banca en la Cámara de Diputados de la Nación, que en el parlamento local armó un bloque unipersonal llamado PRO - Evolución. En estas dos semanas, desde el espacio de Pullaro mantuvieron reuniones por separado tanto con el socialismo y como con las distintas líneas de JxC, sin embargo, aún no hubo reuniones integradas.
Mientras tanto, el Frente Progresista también avanza en el coordinar el trabajo en la cámara con el partido de Igualdad y Participación que lidera Rubén Giustiniani. Socios en las elecciones nacionales con la reedición del FAP, habrá un ejercicio de trabajo conjunto en respaldo de la lista de la diputada provincial, la ganadora Clara García, que podría repercutir en posiciones más cercanas también en el recinto santafesino.
La tropa está en orden
El triunfo por más de 30 puntos de la lista del gobernador Omar Perotti por sobre la del exministro de Defensa Agustín Rossi también acomodó los tantos rápidamente en la Legislatura provincial donde el mandatario provincial no va perder votos. Desde el bloque justicialista aseguran que los seis legisladores y legisladoras que lo integran van a seguir trabajando de manera unificada y suman en esa lógica a Oscar Cachi Martínez (Frente Renovador).
A pesar de la dura interna que atravesaron, tanto Leandro Busatto, Lucila De Ponti, que integraron la lista de Rossi, como Luis Rubeo, que le dio un apoyo explícito a esa nómina, y el presidente del PJ, Ricardo Olivera, que tenía a su nuera en esa lista, van a sostener sus votos acoplados con los de la camporista Paola Bravo y la bielsista Matilde Bruera, quienes apoyaron a Marcelo Lewandoski, la ficha perottista para el Senado. Niegan rupturas, y aseguran votos en sintonía con los proyectos que envíe el Ejecutivo, pero se despegan de lo que pueda pasar cruzando el pasillo: “La Cámara de Senadores, es otro cantar”, advierten.