El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, decidió avanzar sobre el Ente Portuario Puerto Reconquista (EAPRe), donde la empresa Vicentin SAIC tiene la concesión a través de una sociedad anónima de una de las terminales: dictó la intervención de dicha entidad por 180 días. Entre los fundamentos, además de detectar irregularidades administrativas y de control, básicamente se denuncia que es un puerto sin actividad desde hace 16 años y que se utiliza sólo como estacionamiento y guardería naútica. Ponen la lupa sobre un embarque no registrado y la actividad ilegal.
Un informe de febrero de este año por parte del ahora designado interventor, el abogado Martín Deltin, denuncia que la “Terminal A”, un espacio operativo de cargas y almacenamiento de granos y aceites, bajo la concesión de Río del Norte S.A., de las firmas Vicentin SAIC y Buyatti SAICA, desde 1999, cuando se privatizó el puerto, está inactiva y sin operaciones desde al año 2004. La propia Vicentin, en el acta de intervención labrada el 11/06/20 tras el decreto del presidente Alberto Fernández, dejó constancia que administra dicha concesionaria.
La inactividad “no solo representa un claro incumplimiento concesionaria de la citada terminal de no garantizar una carga mínima de la principal obligación contractual, sino que además conlleva responsabilidades de las autoridades del EAPRe en la explotación del puerto comercial como tal, y concurre, cuanto menos en negligencia o abandono de sus funciones de contralor”, sostiene el decreto N° 574 del 29 de junio firmado por el gobernador Omar Perotti y la ministra de Infraestructura, Silvina Frana, al que accedió este medio.
El decreto explica que “claramente ha cesado y abandonado su destino comercial”, y el único propósito es el uso privado de guarderías y actividad privada recreativa, y como playa de automóviles. Pero en uno de los puntos se explica que el ahora interventor, y por entonces designado presidente del Ente, denunció ante Prefectura el 26 de mayo de este año “el acopio y embarque no registrado ni autorizado del Buque Trasbordador ‘Cynthia’ matrícula 01478”. Esto, de alguna manera, arroja suspicacias acerca de si la denunciada comercialización por afuera de los registros era una actividad corriente.
Por último, para fundamentar la intervención y la auditoría de la Sindicatura General de la Provincia, denuncia un “evidente incumplimiento de la fiscalización y control que implica una auditoría externa, una incompatibilidad ética y confusión de roles”, faltante de balances, que deriva en un que sea “cuestionable” el ente.
