A la espera del pico máximo de contagio del COVID-19 en el conurbano, el gobernador Axel Kicillof movió la gestión hacia la conformación y adecuado funcionamiento de comités de emergencia municipales. Son mesas de trabajo que cada distrito puso en marcha para atender y articular con la provincia las medidas para enfrentar la pandemia en medio del aislamiento obligatorio.
El conurbano, donde se encuentra la mayor densidad poblacional, desvela al mandatario. Al cierre de esta nota (viernes 3) y desde el día 1, la Provincia registraba 316 casos confirmados de coronavirus, 13 fallecidos, 37 altas médicas y 1152 en estudio según el parte epidemiológico del Ministerio de Salud bonaerense.
Desde hace semanas, el Ejecutivo bonaerense instó a los municipios a conformar el Comité de Emergencia (COE) para amainar el impacto del aislamiento obligatorio y tener información y control sobre la cuestión sanitaria. Los comités de emergencias están constituidos en tres líneas de acción: salud, seguridad y desarrollo.
Fuentes del gobierno consultadas por Letra P explicaron que los comités están funcionando bien. Sin embargo, hay municipios donde no están trabajando al ritmo deseado. Un caso es José C. Paz, en la Primera sección electoral. Kicillof no les pierde el pulso. Tampoco el ministro de Seguridad, Sergio Berni, que está encima de los distintos COE.
Durante la semana, el gobernador recorrió los comités de Lomas de Zamora, Esteban Echevarría, Almirante Brown, Hurlingham, Morón, Ituzaingó y 3 de Febrero. A las reuniones con intendentes de esas localidades también se acercaron jefes comunales de distritos vecinos como sucedió con Jaime Méndez (San Miguel) o Fernando Moreira (San Martín). Esta seamana, el gobernador recorrerá los COE de la zona norte del conurbano.
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Los COE que los municipios conformaron funcionan generalmente en los propios centros de monitoreo de cada localidad. Allí tienen acceso directo a las cámaras de seguridad que les permite, por ejemplo, ver dónde no se cumple con el aislamiento obligatorio. Además, se coordina que haya fuerzas federales, provinciales y las fuerzas locales, y cómo se manejan el tema de las reservas de los efectivos para que no estén todos juntos. Por caso, con el desborde de adultos mayores y beneficiarios de asignaciones sociales en los bancos que hubo este viernes, Berni “sacó a la calle” cerca de 7 mil efectivos, en más de 2.700 puntos de extracción de dinero del conurbano.
La responsabilidad de los intendentes también pasa por darles proximidad a la línea de trabajo que baja la Nación y la Provincia. Por ejemplo, son los municipios quienes tienen que garantizar la disponibilidad de lugares para ubicar camas de aislamiento para casos de COVID-19 que no requieran internación. Son los intendentes (o los municipios), quienes aportan lugares como clubes o lugares acondicionados que permitirán el alojamiento de contagiados leves cuando la curva de contagio llegue a su pico. Este viernes desde Morón, Kicillof dijo: “No conocemos con certeza cuál va a ser el momento y la tasa a la que se va a expandir el virus. Estamos preparándonos, hemos ampliado muchísimo, sobre todo en una situación de mucho abandono del sistema sanitario, hoy no es solo recuperar lo perdido sino ampliarlo”.
Los intendentes también articulan con instituciones de salud privada y trasladan información y necesidades sobre los centros de salud local. “No hay más sistema de salud público y privado. Ahora empieza generarse una única estructuración”, dijo la vicegobernadora Verónica Magario a Letra P. Fuentes de gobierno confirmaron a este medio que la semana pasada se inició el reparto de insumos hospitalarios a centros de salud local.
Además de salud y seguridad, en los COE también se trabaja sobre el área de desarrollo social y educación. Los municipios deben dotar de información a la Provincia para aplicar la logística más eficiente de manera tal que, por ejemplo, los bolsones de comida que se entregan en los comedores escolares a través del Sistema Alimentario Escolar (SAE) se haga en tiempo y forma. También se trabaja en la articulación con las fuerzas federales como el Ejército que en algunos puntos del conurbano, como en La Matanza, ya se encargó de la entrega de comida. En general, son los intendentes quienes acuerdan en base a lo que resuelve cada COE, dónde anclar un punto de entrega.