El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, expresó su apoyo al gobierno bonaerense tras el desalojo en el predio tomado de Guernica que finalmente se concretó este jueves por orden judicial, luego de varias prórrogas y más de un mes de negociación con las familias en los que se lograron acuerdos con casi la totalidad de los ocupantes.
“Estamos poniendo a la provincia en marcha a partir de consensos básicos: el Estado de derecho, la seguridad jurídica y la garantía a la propiedad privada. El Gobierno está ocupándose de brindar oportunidades de desarrollo y resolver el problema habitacional en el marco de la Ley”, indicó el jefe comunal lomense.
Asimismo, resaltó el Plan Bonaerense de Suelo, Vivienda y Hábitat presentado semanas atrás por el gobernador Axel Kicillof, “que promueve la inclusión y el acceso a la vivienda digna”. “La usurpación ilegal es inadmisible”, dijo Insaurralde.
El apoyo de Insaurralde se evidenció más aun en medio del silencio de los jefes territoriales del peronismo que optaron por no opinar cuando la oposición criticó duramente lo sucedido por la mañana, cuando la policía al mando del ministro Sergio Berni ejecutó el desalojo dispuesto por la Justicia y tras lo cual hubo represión policial.
Otros sectores del oficialismo sí salieron a defender el accionar del gobierno, criticaron el fogoneo de Juntos por el Cambio e indicaron que la carencia habitacional en la provincia es un problema estructural agravado en los cuatro años del vidalismo.
La oposición, por su parte, celebró que se haya llevado adelante el desalojo pero indicó que podría haberse evitado la represión si la Provincia actuaba antes. A su entender, los gobiernos (el provincial y el nacional) dieron mensajes confusos, tras lo cual se produjo una dilación que terminó agravando el conflicto.