Días antes del cimbronazo político que generaron las medidas económicas anunciadas por el Municipio de Santa Fe, el intendente Emilio Jatón se reunió y sentó alrededor de la hermética mesa chica del socialismo. Allí estuvieron el exgobernador y actual presidente de la Cámara de Diputados, Miguel Lifschitz; el presidente del Partido Socialista a nivel nacional y exmandatario provincial, Antonio Bonfatti; el actual presidente del PS santafesino y diputado nacional, Enrique Estévez; y el exfuncionario socialista e ideólogo de muchas de las jugadas del partido, Rubén Galassi. Las piezas más importantes del partido y las figuras institucionales se sentaron con Jatón a solas, cuando no lo hicieron con ningún otro intendente de la provincia.
Si bien las decisiones económicas que tomó el intendente estuvieron en la lista de los puntos analizados en la reunión, fuentes del socialismo aseguraron a Letra P que “nunca hubo una bajada de línea sobre lo que Jatón debía hacer en esta cuestión”. Una persona muy cercana al mandatario de la capital provincial reforzó esta idea e indicó que las medidas “no tienen que ver con decisiones superestructurales, sino con decisiones 100 por ciento de Emilio”.
Según confiaron a Letra P, el encuentro fue “una charla de abordaje de la realidad”. Se habló sobre la visita de Alberto Fernández a Rosario, a la que asistió Jatón y durante la cual el Presidente anunció el desembarco del Plan Detectar Federal y el envío de 3.000 millones de pesos para seguridad. La situación por la pandemia y la relación con el gobierno provincial de Omar Perotti también estuvieron en el temario. Mirando a futuro y pensando en el presupuesto 2021, el intendente puso sobre la mesa a modo de consulta la obra del puente Santa Fe-Santo Tomé.
Desde la óptica de Lifschitz y Bonfatti, los líderes del socialismo ven y sienten a Jatón como propio, que se mueve y juega dentro de los lineamientos del Frente Progresista. Lo toman como “alguien de ellos”, ya que el actual intendente inició su carrera política de la mano de los exgobernadores. Jatón tiene su partido distrital y lo recuerda cada vez que puede, pero el PS copó los puestos más trascendentales del gobierno y lo sigue bien de cerca,
Las medidas tomadas por Jatón, varios meses después de comenzada la pandemia, produjeron una especie de movimiento de placas tectónicas en la política de la provincia y la ciudad, no solo al interior del Frente Progresista: la oposición gruñó en un principio aunque terminó avalando y apoyando los proyectos.
En el círculo chico del intendente niegan que se haya buscado marcarle la cancha a alguien, “ni al gobierno provincial, ni a nadie”. Pero en el Palacio Municipal santafesino inflan el pecho por la jugada de Jatón, que lo posicionó en la primera plana política, ya que saben que ninguna otra localidad gobernada por el Frente Progresista tomó decisiones de este tipo. No solo eso, en algunos bastiones del socialismo reconocen que se sorprendieron y no están en condiciones de hacer lo mismo.
Retomando la reunión con los popes del socialismo, allegados al intendente expresaron que “hay buen vínculo, pero no es un esquema de consulta respecto de qué hacer en la gestión”. Las reuniones, virtuales o presenciales, son frecuentes, pero nunca se había producido una todos juntos como ocurrió a principios de octubre.
¿CINTA DE CAPITÁN? En el Palacio Municipal se entusiasman y afirman que el Frente Progresista “está en un proceso de reconfiguración en su esquema de funcionamiento, ahora los gobiernos locales empiezan a tener un rol mucho más protagónico en las estructuras de lo que tenían antes producto de haber perdido la provincia”. Observan al horizonte y apuestan a tomar un rol mucho más protagónico dentro del espacio político.