A 49 días de dejar la Casa Rosada, el expresidente Mauricio Macri vuelve al primer amor: asumirá como presidente de la Fundación FIFA, el brazo social de la Federación Internacional de Fútbol Asociado que trabaja en áreas como la educación y la reconstrucción de infraestructuras deportivas dañadas o destruidas alrededor del mundo.
Con el desembarco en el organismo internacional, Macri elige pasar a segundo plano en el reagrupamiento de Juntos por el Cambio luego de la derrota electoral frente al peronismo. Es una decisión que viene macerando hace meses y que toma forma con esta flamante designación internacional. El primer capítulo fue delegar la conducción del PRO y evitar meterse en las negociaciones opositoras por el paquete de emergencia que envió Alberto Fernández al Congreso. De todas formas, según pudo saber Letra P, seguirá viviendo en la Argentina y estará vinculado a la oposición, aunque en un rol más simbólico, como una especie de cónsul honorario del armado que encabezarán otros referentes del PRO, la Unión Cívica Radical (UCR) y la Coalición Cívica. Como reveló el periodista Pablo de León en Clarín, el expresidente recibió el voto positivo del directorio de la FIFA.
Horas después, el propio expresidente comunicó la noticia y dejó un mensaje para la interna de Juntos por el Cambio: informó que asumirá el cargo en FIFA pero ejecutará su nueva función "sin descuidar el compromiso que asumí con los argentinos que nos eligieron de seguir representándolos".
"Mauricio tiene el perfil ideal para liderar este proyecto, que quiere poner el fútbol al servicio de la sociedad. A través de su experiencia como líder de una gran nación conoce el rol central que tiene la educación para el futuro de nuestras sociedades y, como dirigente de uno de los clubes de fútbol de mayor éxito, sabe la fuerza y la pasión únicas que genera nuestro deporte. Su experiencia y visión de futuro permitirán, sin duda, que nuestra fundación intensifique su labor y amplíe su ámbito de acción para contribuir a mejoras sociales en todo el mundo", lo presentó Infantino mediante un comunicado oficial de la FIFA.
En
diálogo con Letra P, el consultor
Jaime Durán Barba adelantó que Macri no tenía intenciones de pelear nuevamente por la presidencia de la Nación. Durante una entrevista con el periodista
Diego Genoud, el gurú estrella del PRO resaltó: "Creo que él no va a irse de la política, pero no estoy seguro de que intente ser presidente otra vez. Ya fue. Hizo lo que pudo".
Actualmente, el lugar que ocupará Macri lo tiene el italo-suizo Gianni Infantino, clave para su llegada al máxima autoridad del fútbol profesional. Macri y el presidente de la FIFA tienen una relación de años, alimentada durante el tiempo del argentino en Balcarce 50. Para el desarrollo de esa relación contribuyó el expresidente de Boca y amigo de Macri Daniel "El Tano" Angelici, que conoció a Infantino por su cargo en la Conmebol.
La agenda de andanzas entre Macri e Infantino tiene dos capítulos recientes. En 2018, la máxima autoridad del fútbol sorprendió a jefes y jefas de Estado con su presencia en Buenos Aires en ocasión de la realización del G20. Estuvo en la Cumbre de Líderes como "invitado especial" del anfitrión.
Un año después, Macri viajó a Zurich (Suiza) para recibir el premio Living Football Award. Fue la primera edición de un reconocimiento que la FIFA entrega a las personalidades destacadas del mundo por las acciones que han liderado para el desarrollo del fútbol y el sostenimiento de los valores del deporte como vehículo para el crecimiento de las sociedades.
La Fundación FIFA tiene como director general es el exfutbolista campeón del mundo Youri Djorkaeff y su enfoque prioritario es la educación a través del programa Football for Schools, que se lanzó en 2019 y al que la FIFA ya ha asignado un presupuesto de 100 millones de USD.
El cargo que asume es ad honorem, pero le insumirá horas de viaje y estadías en el exterior. Macri compartirá la conducción de la fundación con Sonia Fulford y Lydia Nsekera, integrantes del Consejo de la FIFA y vocales de la Junta de la fundación.
La novedad del futuro de Macri llega en un momento clave de la nueva oposición: los popes del PRO hacen apuestas para saber a quién se refería cuando dijo que sus exfuncionarios subestimaron el poder de daño de la deuda argentina y, al mismo tiempo, Juntos por el Cambio pasará una nueva prueba en el Congreso para ver la consonancia entre legisladores y gobernadores por el proyecto para reestructurar la deuda que envió el Gobierno.