En su camino por construir una alternativa a Cambiemos y el kirchnerismo, el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, procuró contener y reforzar el arco propio. Recibió en Rosario a la ex diputada nacional Margarita Stolbizer y a referentes políticos de Libres del Sur. Acompañaron dos pesos pesados del socialismo: la intendenta Mónica Fein y el candidato a gobernador Antonio Bonfatti.
El día después al acto del PJ Federal en Mar del Plata, el mandatario socialista les pidió “generosidad” a los dirigentes políticos: “No podemos ser todos presidente”. Y en ese tren, es sabido que eligió al economista Roberto Lavagna como el conductor, como el mejor candidato de un espacio que rompa la polarización.
Sin embargo, Lifschitz dijo que no cree que Lavagna “sea la única alternativa”, lo identificó sí como uno de los nombres “para pensar en un acuerdo que sume a dirigentes de distintos partidos políticos”. Stolbizer, por su parte, no fue tan efusiva con respecto al sucesor de Jorge Remes Lenicov. Le pidió que “defina” como para arrancar. “No me parece que vaya a ser el pobre hombre, el tironeo de cada brazo, de uno u otro lugar. Al contrario, tal vez pueda ser una prenda de unidad, no descartamos esto. Pero no hay que poner las personas por delante del proyecto”, dijo la ex legisladora.
Margarita admitió que mantiene diálogo “permanente” con Sergio Massa, con quien construyó una alianza en los últimos años. Pero se distanció del armado de los federales porque “están armando un espacio con clara identidad peronista”. En ese sentido, sentenció: “El massismo no existe como tal”.
“Nosotros estamos trabajando en una alternativa con clara identidad progresista, mantenemos diálogo con ellos como lo hacemos con otros dirigentes, pero por el momento somos dos proyectos con identidades distintas”, remarcó Stolbizer.
Tras el encuentro que mantuvieron en Cariló, Lavagna y Lifschitz volvieron a verse las caras a solas la semana pasada en Buenos Aires. Roberto le pide a Miguel que incorpore más dirigentes radicales y peronistas al incipiente armado. Luego del encuentro de hoy, el socialista viajó a Buenos Aires para encontrarse con empresarios y dirigentes y seguir masticando así su tan ansiada tercera vía.
“Ha llegado la hora a la Argentina del encuentro y la construcción colectiva entre quienes compartimos la agenda progresista y popular, planificando el trabajo en común, abriendo el diálogo tanto a partidos políticos afines como a quienes llevan adelante esta agenda desde distintas esferas de nuestra sociedad”, detalló Lifschitz.
Por último, el gobernador afirmó que “la sociedad no puede resistir una desilusión más” y sostuvo que “el nuevo espacio necesita ofrecer a cada argentina y argentino una opción superadora del pasado y del presente, que se nutra de la historia de cada aporte a la construcción de una mayoría federal y de unidad nacional, para construir un proyecto de país que devuelva la esperanza”.