La importante crisis financiera que sacude a la administración del intendente de Berisso, el radical Jorge Nedela, obligó a tomar medidas tendientes a reducir los gastos. A los achiques en la planta política y en horas extras, le sumó la aplicación de una reducción de sueldos a los funcionarios y la obligación de que cada uno cumpla con el pago de su línea de celular.
A tono con el pedido de achique de gastos, reclamado por la gobernación que conduce María Eugenia Vidal, el intendente de Berisso había avanzado con una serie de medidas para atender la grave crisis financiera que sufre la comuna, como la eliminación de una decena de cargos políticos y el recorte de horas extras para ahorrar el 50% de los casi 4 millones que se pagan mensualmente. Para demostrar el acompañamiento a las políticas de la administración provincial y la prolijidad de buen alumno, también adhirió días atrás a la Ley de Régimen de Declaraciones Juradas de los funcionarios.
En esa línea, en las últimas horas, anunció que reducirá en un 10% el sueldo de los funcionarios del municipio y que dará de baja toda la flota de teléfonos celulares oficiales, por lo que cada uno deberá afrontar sus propios gastos de comunicaciones.
En enero pasado, tras sortear una fuerte polémica con la oposición, Nedela logró que el Concejo Deliberante aprobara la adhesión al Régimen de Responsabilidad Fiscal Municipal, una herramienta clave que le permitirá al municipio – hoy en estado de emergencia económica- recibir fondos de la provincia.