“Necesitamos ayuda urgente”, sintetizó a Letra P Carlos Festa, concejal de Cambiemos en Berisso, tras frustrarse la aprobación en el Concejo Deliberante la adhesión al Pacto Fiscal, norma que el municipio deberá acompañar para poder continuar recibiendo asistencia del Estado bonaerense y del Gobierno nacional. El intendente Jorge Nedela buscaba que se aprobara este pliego junto a la Declaración de Emergencia Económica para oxigenar la situación financiera que atraviesa el municipio. Si embargo, la sesión se suspendió luego que trabajadores municipales fueran reprimidos por la policía.
La administración municipal que conduce el intendente bonaerense Jorge Nedela desde hace tiempo atraviesa una crisis económica, lo que ha motivado el envió de recursos por parte de las administraciones nacional y provincial. Hace unas semanas atrás, el Ministerio de Economía bonaerense le giró cuatro millones de pesos provenientes de Aportes del Tesoro Nacional (ATN).
En ese marco, y ante el pedido de austeridad y control de los gastos por parte de la gobernadora y del presidente Mauricio Macri, desde hace tiempo Nedela busca optimizar los recursos aplicando medidas que apunta a la reducción del déficit. En esa línea, a principio de esta semana presentó un proyecto en el Concejo Deliberante con la intención de declarar la Emergencia Económica, Social y Administrativa, que se sumaría a la adhesión a la ley de Responsabilidad Fiscal, que establece una serie de obligaciones financieras y laborales que los jefes comunales tendrán que cumplir a cambio de no perder la atención del gobierno de la provincia.
Este pliego y el proyecto de Emergencia Económica – que propone la reducción de un 10% de los salarios de la planta política, un recorte del 50% de las horas extras y el impedimento para incorporar personal al Municipio por al menos 180 días- es resistido por los gremios que representan a los trabajadores municipales y por los concejales de la oposición; quienes el jueves no dieron el quórum ante la imposibilidad de estudiar la norma.
Este viernes por la mañana el oficialismo anunció que contaría con la cantidad de concejales necesarios para comenzar con el debate, lo que originó que un gran número de trabajadores se movilizaran hasta el palacio del Concejo Deliberante en rechazo a su tratamiento. La intención de ingresar al recinto y presenciar la sesión fue impedida por las fuerzas de seguridad que custodiaban el lugar, quienes reprimieron con gases lacrimógenos y gas pimienta a los manifestantes.
“La sesión se suspendió. Si no adherimos al Pacto Fiscal no vamos a recibir el dinero que necesitamos para cumplir con los sueldos”, explicó, enojado, el concejal de Cambiemos Carlos Festa. “La fecha no la pone el gobierno de la provincia, pero necesitamos que se apruebe lo antes posible porque necesitamos ayuda urgente. Necesitamos esas herramienta”, remarcó.
Sobre el rechazo que reciben los pliegos por parte de los trabajadores, indicó que “algunos concejales de la oposición les infunden el terror (a los trabajadores) y es precisamente al revés de lo dicen porque se está buscando una mejora para el sector”.
Consideró que lo que sucedió fuera del Concejo Deliberante “está en sintonía con lo que pasó en el Congreso y en la Legislatura”. “Han puesto en marcha un plan sistemático de desestabilización orquestado por el kirchnerismo y la izquierda”, lanzó y agregó que “se tienen que dar cuenta que perdieron las elecciones y que ahora nos toca gobernar a nosotros”.
El jefe de Gabinete, José Méndez, indicó a este portal que estiman que la aplicación de estas medidas - que incluye recortar contratos temporarios de cooperativas -dejarán un ahorro de 100 millones en 2018 y que el destino de esos recursos serán "no tener déficit".
Desde la oposición, el ex concejal Miguel Nadeff, actual colaborador del bloque de Unidad Ciudadana, señaló que los incidentes comenzaron cuando a los manifestantes se les impidió el ingreso al recinto. “Fue una directiva del intendente, porque quiere la flexibilización laboral y lo hacen a espalda de los trabajadores. La democracia no es así, pero es su forma de gobernar: a los palos”, indicó y recordó la represión a los estudiantes secundarios en mayo pasado cuando se movilizaron hasta la Intendencia en reclamo por la precariedad en la infraestructura de los establecimientos educativos.
“El intendente tiene la potestad de hacer los recortes que ahora quiere pasar por el Concejo, y como no quiere pagar el costo político, quiere que lo hagan los concejales”, evaluó y agregó que “la idea del bloque es no dar quorum, porque las propuestas son inviables. Se puede optimar el gasto, pero no de esta manera”.
La semana próxima el oficialismo intentará avanzar con las ordenanzas, apelando al consenso con algunos representantes opositores. Antes se reunirá con los gremios para retomar el diálogo y evitar que se repitan los hechos de este viernes por la mañana.
