Judiciales

Vidal tendrá su 22N judicial con dos jueces peronistas en la puerta del jury

El Senado bonaerense definirá si avanzan o no los juicios políticos contra Silvio Carzoglio y Martín Ordoqui, dos jueces no alineados con el oficialismo e investigados por presuntos delitos.

El próximo 22 de noviembre será un día determinante para el futuro de dos jueces con raíces peronistas que, por distintos motivos, están en la mira del gobierno de María Eugenia Vidal. Silvio Carzoglio, juez penal de Avellaneda, y Martín Ordoqui, integrante del Tribunal de Casación bonaerense, tienen pedidos de juicio político que se definirán en esa intensa jornada política y judicial en el Senado provincial. Ambos expedientes son seguidos de cerca por el procurador vidalista, Julio Marcelo Conte Grand.

 

Carzoglio es el juez que no hizo lugar al pedido de detención del dirigente de Camioneros, Pablo Moyano, procesado como jefe de una asociación ilícita con la barra brava del club Independiente, institución en la que estuvo como dirigente el ministro de Seguridad provincial, Cristian Ritondo.

 

El magistrado tiene denuncias por haber resuelto medidas de amparo sin sorteos previos, órdenes de allanamientos sin fechas e intervención como intermediario entre imputados con salidas laborales y empresas privadas, entre otros presuntas irregularidades.

 

Ordoqui fue apartado de su cargo luego de ser imputado en una causa por “tráfico de influencias” y “asociación ilícita”. En esos procesos ya fueron detenidos el ex juez de Garantías César Melazo y el fiscal jubilado, Tomas Moran, ambos del departamento judicial de La Plata.

 

 

 

El juez quedó involucrado luego de ser acusado de cobrar $500 mil para conceder la prisión domiciliaria a Javier Ronco, quien afrontaba un proceso penal por los asesinatos de María Martini y Carlos Rodríguez, ejecutados en enero de 2008.

 

Ambos jueces están vinculados al peronismo bonaerense. Carzoglio fue funcionario municipal en Avellaneda durante la intendencia de Baldomero “Cacho” Álvarez, uno de los ex barones del conurbano, hoy en Cambiemos. Ordoqui fue funcionario en la municipalidad de Quilmes durante la gestión de Aníbal Fernández en el distrito. Se conocieron cuando ambos trabajaban en la Cámara de Senadores.

 

 

 

Otro dato llamativo: Carzoglio es el juez de Garantías en la investigación por los presuntos abusos sexuales en las divisiones inferiores de Independiente. Durante los días que duró el escándalo, se virilizaron nombres de personajes de la farándula y periodistas deportivos involucrados en el caso, pero esa trama nunca fue aclarada y, menos, confirmada por el activo procurador vidalista Conte Grand, quien ofició de vocero del expediente.

 

Quienes transitan los pasillos del fuero penal de Avellaneda no vacilan en afirmar que, en rigor, la presencia del jefe de los fiscales en esa causa fue para ejercer el mando en la “mesa virtual de control de daños” por si en el expediente “aparecían nombres que debían recibir alguna protección o trato especial”, recordó a Letra P una fuente con acceso directo al expediente.

 

La gestión de Vidal y Conte Grand tiene como uno de sus ejes la “lucha contra la corrupción” y, en ese camino, tiene en la mira a varios magistrados que no responden a las directivas del oficialismo. Ya lo mostró con el ex juez Contencioso Administrativo Luis Arias, a quien desplazaron tras haberlo acusado de no respetar órdenes de otros jueces penales que también están en la picota política, como el detenido Melazo y el juez de Garantías de La Plata Guillermo Federico Atencio, quien denunció un “pacto de impunidad” que cruza al ministerio de Justicia y llega hasta la Suprema Corte bonaerense.

 

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