Adriana "Chuchi" Molina preside el Concejo de la ciudad de Santa Fe desde diciembre, donde tiene amplia mayoría Unidos, que es un alianza en la que conviven sectores y partidos muy diversos. En diálogo con Letra P, la concejala de la UCR habla de su tarea para que primen los consensos y evitar chispazos al interior del interbloque oficialista.
Molina, muy cercana al exintendente José Corral y vicepresidenta de la UCR de la provincia, se refirió al funcionamiento de Unidos para Cambiar Santa Fe y se entusiasma con replicar el modelo de la coalición a nivel nacional y en otras provincias. Respondió sobre la posibilidad de sumar a La Libertad Avanza en el futuro y asegura que ya no hay chispazos con el sector de Mario Barletta.
-¿Qué balance hace de estos primeros seis meses como presidenta del Concejo?
-Estoy muy satisfecha. Estamos cumpliendo las premisas con las que llegamos. Construimos los consensos para darle las herramientas que el intendente pidió y acompañamos al gobernador Maximiliano Pullaro. Hay buena conexión hacia dentro y fuera del bloque. Somos 11 concejales sobre 17, pero hemos encontrado consensos en los temas centrales para la ciudad.
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La presidenta del Concejo de Santa Fe.
-¿Cómo es la relación con el intendente Juan Pablo Poletti?
-Muy buena. Hay mucho diálogo y consenso. Unidos es un acuerdo amplio, razón por la cual todas las iniciativas que se puedan brindar para la gestión se hacen. No hacemos los mensajes en conjunto con el Ejecutivo, no es nuestro rol. Pero ellos tienen claro que si envían un proyecto de ordenanza, acá se trabaja y seguramente se modifica, siempre en diálogo.
-¿Cómo lidia con las tensiones propias de un interbloque tan amplio?
-La fórmula es darle a cada uno su lugar y espacio de acuerdo a los perfiles y temas que les interesan. Hay que respetar esa mirada que puede no ser exactamente igual dentro del grupo, escuchar y debatir. Nos reunimos todas las semanas dos o tres horas para repasar temas, qué le interesa a cada uno y qué opinan de los proyectos de los otros concejales. Es muy importante el rol de Leandro González, que es el presidente del bloque. Además, fue presidente del Concejo y tiene experiencia en cómo mantener un interbloque unido, ordenado y coordinado.
-Tienen 11 concejales sobre 17. ¿Cómo es trabajar teniendo mayoría automática?
-Hay que respetar las iniciativas que traen los concejales. Soy una convencida de que hay que buscar el diálogo y el consenso, no la unanimidad, que es otra cosa. Lo que nunca va a suceder es que no tratemos de llegar a un acuerdo con los demás bloques antes de sancionar una norma. A veces lo podremos hacer y otras no.
Unidos para Cambiar Santa Fe
-Unidos mostró ser una herramienta adecuada en Santa Fe para ganar primero y gobernar después. ¿Debería replicarse a nivel nacional?
-No tengo dudas. Ahora que estoy en el partido (como vicepresidenta) tengo esa mirada y visión. Lo conversamos mucho con Felipe (Michlig), José (Corral), Fabían Bastía, Julián Galdeano y quienes están allí. Tenemos un partido muy fortalecido y debemos seguir construyendo lo que es Unidos. Estamos convencidos que el modelo de Unidos para Cambiar Santa Fe tiene que ir a la Nación y nada sería mejor que llevarlo a otras provincias.
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Molina junto a José Corral y el gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro.
-¿Qué opina de sumar sectores de La Libertad Avanza o el peronismo?
-Pienso en lo sucedido hasta ahora y recuerdo que hace un año parecía imposible una alianza con el PRO y el socialismo adentro. La historia dirá qué sucede. Sí debemos tener claro en lo que creemos. el modelo productivo, el diálogo, la educación pública. A partir de eso, se suman las bases y se construyen los consensos. No es fácil de hacer ni sostener, hay que trabajarlo todos los días.
El radicalismo y los vínculos internos en Santa Fe
-¿Cómo describiría el momento del radicalismo?
-Está en un muy buen momento. Maxi (Pullaro) construye desde el diálogo y la gestión. Hay que recordar que veníamos de un radicalismo dividido. Nosotros estábamos en Juntos por el Cambio y el espacio de Maxi y Felipe (Michlig) en el Frente Progresista, y esa división era muy fuerte. Cuando asume Felipe los llama a Corral y a Galdeano y les dice a ambos que sean vicepresidentes. Fue un mensaje directo a todo el partido, para empezar a transitar otro camino y armar un frente competitivo que gane elecciones y gobierne. Así apareció Unidos y un líder como Maxi Pullaro.
-¿Cómo quedó la relación con el espacio de (diputado nacional) Mario Barletta después de años de fractura interna en la UCR de la capital?
-Quedó todo bien. Somos espacios diferentes, pero con muy buen diálogo. Desde el Concejo hay contacto continuo con el gobierno municipal, donde funcionarios del espacio de Mario Barletta, como Alejandro Boscarol, o en el Concejo cmismo con Titi Barletta.