Salta Somos Todos se convirtió en La Libertad Avanza y permitió el desembarco oficial del partido de Javier Milei. La proyección que alerta a Gustavo Sáenz.
Martín Memen, Carlos Zapata, Karina Milei y Alfredo Olmedo.
El armado de La Libertad Avanza en Salta amenaza con complicar los últimos años de Sáenz en el Gobierno de Salta.
En un minucioso trabajo de articulación con Alfredo Olmedo, Karina Milei y Martín Menem cerraron la creación de La Libertad Avanza como partido en Salta. La estrategia fue más sencilla que en otros distritos: le cambiaron el nombre a uno de los dos partidos que el titular del Parlasur y así avanzaron en el armado nacional del partido del Presidente.
El acuerdo salteño representa una novedad en la táctica que la hermana del presidente Javier Milei encabeza a lo largo de todo el país y esquivó esta vez el engorroso proceso que requiere reunir adhesiones para concretar un sello propio, algo que en algunos distritos genera más complicaciones que las imaginadas por el tridente oficialista que completa Eduardo “Lule” Menem.
El flamante titular de la pata salteña del oficialismo es Eduardo José Virgili, un productor audiovisual de 42 años que desde 2011 forma parte de Salta Somos Todos, la fuerza olmedista que mutó en LLA.
Hombre de confianza del histriónico dirigente de campera amarilla, Virgili llegó al Concejo Deliberante de la capital provincial en 2021, desde la boleta de Juntos por el Cambio, integrando una lista encabezada por referentes del PRO y el radicalismo.
Para el momento en que debutó en el legislativo salteño, Virgili, Olmedo y el diputado nacional Carlos Zapata ya habían fundado Ahora Patria, el sello que llegó a sumarse una alianza con una parte del kirchnerismo para enfrentar al gobernador Gustavo Sáenz en las elecciones del año pasado. Avancemos se llamó la coalición en la también había referentes libertarios.
Partido por el Trabajo, la República, la Industria y el Agro es la denominación original de la fuerza que se conoce popularmente como Ahora Patria y que actualmente preside Zapata, que ya integra el bloque oficialista que conduce Gabriel Bornoroni en la Cámara de Diputados.
En el desafío propuesto como horizonte más cercano, Karina y Olmedo entienden que ambas fuerzas volverán a confluir en las elecciones del año próximo, donde el oficialismo buscará engordar sus filas en el Congreso sin necesitar de alianzas con otros partidos para resolver las necesidades legislativas del Presidente.
El desembarco oficial enciende las luces de alerta en el saencismo, que el año que viene se expondrá en una disputa nacionalizada sin demasiadas chances de terciar en la pelea por las tres bancas que se ponen en juego en Senado y las tres que deben renovarse en Diputados, donde finaliza su mandato Pamela Calletti, la diputada que es la voz del gobernador en el bloque Innovación Federal. El escenario electoral obligará a Sáenz a encontrar un punto de apoyo para sostener su poder local, ya sin reelección, y su peso parlamentario en el juego nacional.
Más allá de las urgencias del armado que comanda la secretaria general de la Presidencia, el olmedismo entiende que “la ideología del espacio está totalmente alineada con el proyecto del Presidente”. Dan por hecho un acuerdo en el que LLA confluya con Ahora Patria para enfrentar la batalla de medio término que volverá a poner al presidente del Parlasur en el centro de la escena.
El fracaso del frente Avancemos en las elecciones provinciales de 2023 representó su último tropezón distrital, que luego pudo subsanar con su participación en la contienda nacional en la que se puso al servicio de Milei.
El libertario no sólo terminó ganando el ballotage con casi el 66% de los votos en la tierra gobernada por uno de los laderos provinciales más importantes de Sergio Massa, sino que también se impuso en las PASO y en las elecciones generales. LLA obtuvo dos bancas en la Cámara de Diputados y Olmedo terminó convirtiéndose en presidente del Parlasur. Para sellar el acuerdo, Zapata pegó el salto ni bien la era libertaria dio inicio en el Congreso.
En ese escenario y no sin escándalos, Olmedo se sostiene en el parlamento regional y vuelve a mirar al terruño con cierta expectativa. La semana pasada se reunió con el Presidente y se envalentona al advertir que el de Salta es el primer paso para que el oficialismo nacionalice su armado más puro, que considera el vehículo hacia una "segura victoria en las próximas elecciones".
Para eso, ya empieza a ensayar una especie de plataforma. En la línea histórica que lo une al oficialismo asegura que la frontera “está ordenada por el narcotráfico” y que en Salta “muere proporcionalmente más gente que en Rosario”. Por eso, propone la construcción de una “cárcel autosustentable” en la Puna que, promete, va a ser única en el mundo.
“Todo dependerá de la energía solar, el agua provendrá del deshielo, los presos tendrán que trabajar y cocinarse, cultivar su comida y criar los animales. Es decir, todo menos la seguridad lo tendrá que hacer el preso”, detalló en una de sus últimas apariciones públicas.