Después de una semana dedicada a defenderse de las denuncias que recibió por la supuesta venta de candidaturas, Javier Milei inició este sábado su campaña presidencial con breves caminatas por La Plata, Quilmes y Berazategui. Lo hizo rodeado de su círculo íntimo, que lideran su hermana Karina y Carlos Kikuchi.
El libertario llegó a la esquina de 12 y 57 de la capital bonaerense a las 12.20 en un Volkswagen Vento negro, con vidrios polarizados y conducido por uno de sus custodios. El restante personal de seguridad (no son menos de una decena de personas), lo esperaba desde una hora antes para liberar la zona, un centro comercial que justo en esa intersección tiene una parada de taxis. Hubo intercambio de insultos entre un conductor y la militancia liberal, pero no pasó a mayores.
Kikuchi merodeó el lugar desde temprano, saludó a los dirigentes locales y se paseó entre la militancia, que nunca superó el centenar de personas de edades variadas, la mayoría identificados con agrupaciones libertarias locales.
Un grupo de no más de diez jóvenes con banderas negras y amarillas buscó encender la previa cantando Panic show, el tema de La Renga que Milei eligió para sus actos de la campaña 2021 y provocó un repudio de los músicos. Pero no lograron contagiar a casi nadie.
La convocatoria estuvo a cargo de la candidata a gobernadora, la diputada nacional Carolina Piparo, que es de La Plata. Como explicó Letra P, Milei había apartado a Kikuchi de la campaña, molesto por el cierre de listas que tuvo a candidatos como Pablo Ansaloni, quien volverá a la Cámara de Diputados después haber sido aliado del Gobierno hasta 2021.
Las denuncias sobre venta de lugares en las listas obligaron a Milei a exponer a Kikuchi y presentarlo como “armador nacional”, al menos hasta que pase la elección.
El diputado cumplió el ritual de cada recorrida: con el auto estacionado en el medio de la calle y los custodios vigilándolo, esperó que lanzaran humo amarillo para abrir la puerta del asiento de acompañante, elevar su cuerpo hasta apoyar un brazo en el techo y levantar el otro al grito de “¡Viva la libertad carajo!”.
Piparo se filtró entre el mini cordón de seguridad para recibirlo y acompañarlo en una recorrida de una cuadra y no más de media hora. Karina Milei se mantuvo al lado del candidato y el comunicado oficial la definió como “jefa de campaña”, para que no quedaran dudas.
Los otros dirigentes que participaron de la actividad en la capital provincial fueron el candidato a senador nacional Juan Nápoli; el diputado provincial, Nahuel Sotelo; el postulante a Intendente de La Plata, Luciano Guma; y la aspirante a diputada, Lorena Macyszyn.
Celulares en alto para filmar y tomar fotos, la militancia cantó el clásico libertario "La casta tiene miedo", que es el que más encendió a Milei, golpeado por las denuncias de venta de candidaturas que lo obligarán a pasearse por Tribunales junto a sus colaboradores más cercanos.
Hubo algunos hits contra Carlos Maslatón, el liberal que declaró este viernes en la causa y acusó a Milei de cometer "un franquiciado político”. El otro apuntado fue el intendente local Julio Garro, del PRO, que busca reelegir aliado a Horacio Rodríguez Larreta.
Pero las canciones se apagaban a menos de un minuto de empezar porque la gente prefería dejar de saltar para acercarse a Milei y pelear por una selfie. Karina Milei miraba esas escenas y repartía sonrisas.
Entre la gente se mezcló a tomar fotos Lilia Lemoine, la influencer y cosplay que asesora a los libertarios en estrategia digital y se ganó un lugar en la lista de diputados nacionales por Buenos Aires.
El círculo que hace la militancia alrededor de Milei para abordarlo no permitía verlo desde las veredas, por lo que los comerciantes preguntaban quién había cortado la calle y sólo algunos se enteraban que era el diputado libertario.
Cuando terminó de caminar la cuadra, lo esperaba el mismo auto que lo había traído y la camioneta con sus custodios que tienen la tarea de cortar el tránsito, sin que las discusiones con los automovilistas terminen mal.
Por si acaso, un móvil de control urbano local se acercó a evitar que hubiera algún enfrentamiento, pero los libertarios ya no eran muchos y tardaron pocos minutos en disiparse. Sólo hubo algún problema con los que buscaban una foto en el medio de la calle con la bandera en alto.
Milei no habló con los medios en la caminata, pero luego difundió algunas declaraciones para defenderse de las denuncias que demoraron el inicio de campaña y preocupan a sus colaboradores, por las dificultades de instalar debates públicos. La dolarización y los piquetes ya son discusiones gastadas y el único plan por ahora es recorrer cada rincón del país.
"La casta política está aterrorizada por los números de encuestas que nos dan ingresando a la segunda vuelta, y ganando en cualquier escenario en el mes de noviembre", aseguró Milei. Como explicó Letra P, los sondeos que llegan al bunker libertario no muestran un descenso de su imagen.
"Estamos siendo blanco de operaciones que sólo intentan desprestigiarnos y parar nuestro crecimiento. Pero que sepan algo los políticos chorros del kirchnerismo y Juntos por el Cargo: les vamos a ganar en las urnas y sacaremos al país de la decadencia", agregó el diputado.
"En 35 días hay elecciones presidenciales. El país está al borde de una hiperinflación. ¿Por qué no discutimos cómo solucionar los problemas de los argentinos? ¿Cuál es la propuesta de Massa? ¿Cuál es la propuesta de Larreta? ¿Cuál es la propuesta de Bullrich? La nuestra es terminar con este modelo que solo beneficia a los político".
Piparo apuntó a su rival, el gobernador Axel Kicillof. "Sabe que termina su gobierno con siete de cada diez niños pobres y nunca tuvo la capacidad de defendernos ante la inseguridad reinante y muchísimo menos de salir a reclamar a su gobierno un plan económico que tanto necesitamos".