El senador por Río Negro Martín Doñate emitió un duro comunicado en el que agita el fantasma de las cuasimonedas, la forma que encontraron las provincias en diversas crisis nacionales para hacer frente a sus obligaciones. La publicación provocó cierto impacto en el peronismo local, que se sumó al rechazo contra las medidas anunciadas por el ministro de Economía, Luis Caputo.
El recuerdo de los Patacones y Lecops reapareció así en una voz de la política. Como en los tenebrosos días de 2001 y 2002, cuando circulaban estos bonos, el camporista Doñate vaticinó que el abismo de la extinción del peso es muy cercano.
En una declaración titulada “El camino hacia las cuasimonedas y su discutible constitucionalidad”, Doñate se preguntó: “¿Cómo harán las provincias para afrontar el pago de salarios, sostenimiento de las funciones del Estado, y el cumplimiento de sus obligaciones en un contexto que demandará mayor contención social, si en sus cuentas se verá gravemente damnificados por las medidas de este nuevo gobierno?”.
Como en un vaticino, uno de los párrafos publicados como parte de un estudio del Instituto Argentina 2050 deslizó que “el actual escenario de crisis que podríamos denominar depreflación (fuerte caída de la actividad con altos índices de inflación)” generará las condiciones de un crisis de alto impacto en las cuentas públicas y “no sería improbable que las administraciones provinciales tengan que buscar alternativas ya ensayadas en las peores crisis de nuestro país”.
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“La emisión de bonos de discutible plafón constitucional, según los propios antecedentes y decisiones jurisdiccionales que se muestran a continuación, podría ser una de ellas. En este breve informe, contextualizamos el actual estado de situación con la nueva gestión del presidente Javier Milei y repasamos antecedentes inmediatos y opiniones de doctrina y jurisprudencia de las cuasimonedas en la República Argentina”, planteó.
Estas afirmaciones tuvieron su respaldo en el peronismo, tanto el alineado con el oficiliasmo local como el que se muestra crítico a su decisión de aliarse con el gobernador Alberto Weretilneck.
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PJ-Nuevo Encuentro. El bloque legislativo demostró preocupación.
El bloque en la Legislatura que coordina tareas con el camporista, denominado PJ-Nuevo Encuentro, salió en conjunto a despotricar contra las medidas. “El paquete de ajuste impulsado por la Nación, a pesar de la falta de precisiones con la que fueron comunicadas, traerá aparejado un incremento del índice de pobreza, desocupación, devaluación de los salarios y recesión económica”, expresaron los legisladores Daniel Belloso, Pedro Dantas, Leandro García y Luis Ivancich y la legisladora Ana Marks.
“La quita de los subsidios a la energía, que representaban dos puntos del PBI per cápita, le generarán una alta carga a los usuarios de Río Negro, mientras que al Gobierno nacional le daría una ganancia de unos 12 mil millones de pesos o más”, opinaron.
Consultado por Letra P, el legislador José Luis Berros, representante en el parlamento rionegrino de la intendenta María Emilia Soria, adhirió a la teoría de una profunda crisis, aunque le bajó el tono al retorno de los bonos. "La situación es muy compleja, nos llevan a un callejón sin salida", se lamentó.