Juan Schiaretti sumará el primer apoyo radical explícito a su campaña presidencial que tendrá su primera parada el próximo 13 de agosto. Aunque no se trate de una novedad, Myrian Prunotto se convertirá en la primera referente boinablanca en salir a pedir abiertamente el voto por el gobernador de Córdoba. El acuerdo -que terminará de afinarse en las próximas horas- tiene un primer plazo de vencimiento en las PASO. “Después, nos volveremos a juntar y analizaremos cómo seguir”, dicen desde el espacio que reconoce como referente a Facundo Manes.
El schiarettismo, cordobesismo, o nuevo partido cordobés, como quiera nombrarse, no tiene demasiado tiempo para festejar. El calendario electoral que establecieron Schiaretti y Martín Llaryora pegó las tres elecciones que los tienen que como protagonistas, y a la celebración de una siempre le sigue el trabajo para la otra. Ahora, es tiempo de la primaria nacional y, con la tropa propia eufórica y alineada, es tiempo de concentrarse en los nuevos aliados. Empezando por el más importante, el sector al que el peronismo le cedió la vicegobernación.
Prunotto se sumará al trabajo de campaña que empujará la candidatura del gobernador cordobés encabezando la pata del partido centenario que acompañará las listas de Hacemos por Nuestro País. La definición se tomó este miércoles en una reunión en la que, a través de una moción de la propia vicegobernadora electa, los integrantes del radicalismo auténtico definieron apoyar a la fórmula que lleva Florencio Randazzo como vice, por lo menos hasta las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias del próximo 13 de agosto.
Con la intención de no despojarse de su identidad albirroja, la intención original de los Radicales Auténticos era encolumnarse detrás de la candidatura presidencial del diputado nacional Manes. De hecho, en los planes más acordes a sus preferencias, la idea de máxima era acompañar una fórmula nacional integrada por el neurocirujano y el gobernador de Córdoba. Cuando esa idea naufragó, el espacio que también ocupará un rol clave en el próximo gobierno provincial, empezó a analizar los pasos a seguir, que terminaron por definirse en el mediodía del miércoles.
Sucede que, dependiendo del resultado de la interna de Juntos por el Cambio, y la del propio Schiaretti en las primarias, habrá que analizar la estrategia del espacio de cara al futuro. Aunque el gobernador sostiene que irá hasta el final con su candidatura presidencial, y todo el equipo del peronismo cordobés afirma que lo acompañará más allá de la polarización que se vislumbra entre Sergio Massa y quien termine siendo el candidato de JxC, los radicales auténticos no se atreven a predecir el futuro. Entre otras razones, porque siguen mirando a Manes. “No sabemos qué va a pasar, nadie lo sabe, vamos con Schiaretti hasta el 13 y después nos volvemos a juntar”, dicen. Y la dejan picando.
El rol de la vice
Ahora, Prunotto espera por una reunión con los equipos técnicos del schiarettismo para acordar cuál será el rol que ocupará la vice de Llaryora en la campaña a la que le quedan menos de veinte días. Según analizan en su entorno, la intendenta en uso de licencia de Estación Juárez Celman podría sumarse a los actos de campaña que encabezarán los referentes schiarettistas en la provincia o podría convertirse en la cara del radicalismo que apoya al gobernador cordobés encabezando actos en el interior o en otros puntos del país. Pero eso, dicen, dependerá de la estrategia que se trace desde los responsables del armado nacional de Hacemos por Nuestro País.
Mientras tanto, Prunotto tiene una agenda que contempla su participación en el cierre de campaña del candidato de Hacemos Unidos en Villa Allende, Nicolás García. El secretario de Gobierno del fallecido Eduardo “Gato” Romero y principal operador del PRO en Villa Allende, fue removido a Desarrollo Social, tras la asunción de María Teresa de Vélez, lo que llevó a pegar el salto al schiarettismo. De esa forma se sumó al pelotón de referentes de Juntos por el Cambio que adhirió al armado de Schiaretti y Llaryora de cara a la nueva etapa del gobierno encabezado por el peronismo mediterráneo.
La vicegobernadora electa es la más importante referente fundacional del radicalismo auténtico, una línea que nació en Córdoba como un acto rebeldía contra las conducción de la UCR del centro del país que comandan Mario Negri y Ramón Mestre, pero también contra la línea identificada por Rodrigo de Loredo, a quien emparentan de modo directo con la figura de su suegro, Oscar Aguad.
Denunciando que “al partido lo conducen los mismos apellidos desde hace más 25 años” y amparados en la idea de transversalidad antigrieta que unificaba los discursos de Manes y Schiaretti durante la previa al cierre de listas nacionales, los Radicales Auténticos dieron origen a una nueva fuerza política que arranca, nada más y nada menos, con la vicegobernación de Córdoba y un puñado de intendencias entre las que se destaca la de Gustavo Benedetti, reelecto en Arroyito el pasado 25 de junio.