El gobernador de Santa Fe definió la fecha para arrancar la reforma y cerró una disputa con la oposición. Unidos y el PJ, ¿socios por conveniencia?
El gobernador Maximiliano Pullaro recibió a Juan Monteverde el lunes en la sede de Casa de Gobierno.
Hay un choque de relatos detrás de la discusión por la fecha de la Convención reformista en Santa Fe. El gobernador Maximiliano Pullaro, fiel a lo que demostró desde el día uno, marca la agenda y los tiempos de la política, pero el peronismo recuperó oxígeno y pelea por ser el principal polo opositor.
Pullaro ganó las elecciones en 2023 con una cifra récord, lideró un proceso de reformas y transformaciones de fondo, avanzó con el proceso de enmienda constitucional como hace más de 60 años no se lograba y ganó las elecciones constituyentes por 20 puntos de diferencia ¿Por qué no debería definir la fecha según su criterio?, señalan en la Casa Gris.
Convocó a la oposición, escuchó las posturas y luego definió. Todas las partes sabían de antemano que la cosa estaba juzgada. El oficialismo quería celebrar la Convención en julio y la oposición prefería llevarla a 2026. Es absolutamente legítimo el movimiento del gobernador de fijar la convocatoria para el 14 de julio. Después juegan las narrativas y el horizonte de cada uno de los frentes que discutirán la futura reforma.
En el pullarismo entienden que, detrás de la intención de debatir el año próximo, el peronismo buscaba en realidad demorar agendas como la ley de Ficha limpia y el tope de 75 años a los jueces de la Corte Suprema, ya consagrado por ley, pero no en la Constitución. “El peronismo está conducido por (Armando) Traferri y la vieja estructura, que es el viejo statu quo de la provincia”, vocifera uno de los alfiles del gobernador.
Hay algo de relato, de ligar a Juan Monteverde a la figura de Traferri y Alejandra Rodenas. “Los K y a los que vinimos a combatir no nos van a marcar la cancha, sobre todo si les sacamos 20 puntos de diferencia”, insiste el oficialismo. Entonces, ¿será que al pullarismo no le disgusta que la oposición la empiece a capitanear el PJ y no La Libertad Avanza (LLA) o Amalia Granata? ¿Y si en Santa Fe la política tradicional acuerda tácitamente para relegar a las expresiones disruptivas y rabiosas?
En el plano de lo concreto, a Unidos para Cambiar Santa Fe lo espera una Convención hostil. Porque es verdad que se alzó con 33 bancas y que el bloque de Alejandra Oliveras, como mínimo, le garantizará una mayoría absoluta. Sin embargo, en las sesiones y comisiones la oposición querrá exponer al gobernador en su supuesto único objetivo de lograr la reelección y tendrá la oportunidad de decírselo en la cara.
La oposición puede llegar al 14 de julio de modo más envalentonado si vence en los comicios locales del 29 de junio. Unidos, como se contó en esta columna, tiene riesgo de derrota en Rosario, Santa Fe, Rafaela, Villa Gobernador Gálvez y Reconquista, los cinco principales centros urbanos de la provincia. Para 2027 falta una bocha, pero pinta que, al menos en el territorio, Pullaro convivirá con una oposición más sólida que en sus primeros dos años de gobierno.
El peronismo está en su juego. En rigor, sacó menos votos que en las PASO y las generales de 2023, al igual que Pullaro. No obstante, parecería haber encontrado un horizonte. Al menos se movilizó. Sumadas las tres listas que compitieron el 13A, el PJ cosechó 367 mil votos. En las PASO de 2023 había conseguido 434 mil y Marcelo Lewandowski acumuló 544 mil sufragios en la instancia final. ¿Perdió votos, pero ganó un rumbo?
Tras la elección del 13 de abril, Monteverde, como ganador de la mini interna panperonista, convocó a todos los convencionales, se fue a recorrer el norte de la provincia y se puso al frente del tiempo por venir. Tiene un objetivo máximo, ganar Rosario y ser intendente en 2027, pero no se desinteresará del proceso de reconstrucción del peronismo y sus aliados.
“Esto es colectivo, todos ordenados”, remarca ante la consulta de Letra P un intendente del PJ. En los últimos días también se celebró una reunión de alcaldes peronistas, los que acompañaron a Monteverde y los que secundaron a Lewandowski. Todos unidos.
En el medio de su reorganización, el peronismo apuesta a recuperar terreno y a no dejarle el rol de principal opositor a otras fuerzas. Al menos, es un primer paso. Si Pullaro elige subirlo al ring, el PJ tendrá otra buena noticia que deberá saber usufructuar.
La Libertad Avanza y Granata parecen estar en otra sintonía. Nicolás Mayoraz faltó a la convocatoria de Pullaro y, junto a la troupe libertaria, envió un comunicado errático que arranca con un "santafecinos", con c. Olor a tipeo desde Buenos Aires. Granata también se desdibujó al no ir a un cara a cara con el gobernador y mantuvo su estilo de golpes por debajo del cinturón. Le sirve para tener un piso de 12 a 15 puntos, pero la acerca a su techo y le oprime cualquier chance de crecimiento.