El Gobierno sigue sin tener los votos garantizados para aprobar la ley ómnibus en el Senado: el bloque Santa Cruz, que integran José María Carambia y Natalia Gadano, exigió que sólo se trate la reforma fiscal y, recién cuando sea sancionada por Diputados, se debata el proyecto emblema del Gobierno. Javier Milei necesita de un gesto de Martín Lousteau para que no se caiga la sesión.
El radical senador radical presentó dictámenes propios en la ley ómnibus y la reforma fiscal. Sus voceros aseguran que los defenderá en el recinto, para lo cual, se entiende, sería necesario que aporte al cuórum y vote en contra de los despachos de mayoría. Con el poroteo que había al cierre de esta nota, si toma esa posición podría haber un empate y la definición la tendrá la presidencia del Senado.
Puede ser Victoria Villarruel o Bartolomé Abdala, en caso de que para esa hora ya haya viajado Javier Milei al G7.
Con quedarse en su silla, Lousteau sería garante de los proyectos. Si decide abstenerse y lo imita Unión por la Patria y el bloque de Santa Cruz, se cae la sesión. Los pocos oficialistas que hablaron con el economista no lograron saber qué hará. Será un día de negociaciones frenéticas.
Si logra la aprobación en general, el oficialismo necesitará construir una mayoría para cada uno de los artículos. Aliado a UP, a Lousteau le alcanza con un sólo voto para hacer cambios.
En las cuentas de La Libertad Avanza está incluida la neuquina Lucila Crexell, quien este martes quedó envuelta en un escándalo de dádivas, porque a través de la filtración de un documento de Cancillería se supo que negoció su candidatura como embajadora en la Unesco durante el tratamiento de estos proyectos.
Lousteau participó de la reunión de bloque que tuvo la UCR este martes, en la que también estuvo Maximiliano Abad, quien hasta ahora tampoco se pronunció. Fuentes de la bancada aseguraron que la votación en general de los proyectos está garantizada, una certeza que sólo pueden tener si colaboran los 13. Sin excepciones.
Ley ómnibus, con fórceps
En el Gobierno creían que los votos de Santa Cruz están garantizados a partir de la última concesión realizada en las comisiones, cuando Guillermo Francos aceptó incorporar a la reforma fiscal un artículo para subir de 3 a 5% las regalías mineras. Sólo para Santa Cruz ese aumento significaría $20 mil millones anuales.
Sin embargo, la dupla santacruceña quiere más garantías: a través de una serie de videos, el dúo anunció que no dará cuórum este miércoles para tratar la ley ómnibus. Pidieron que primero se debata la reforma fiscal, que tiene el artículo de las regalías mineras, junto al proyecto que aumenta las jubilaciones aprobado la semana pasada en Diputados, que ni siquiera pasó por comisiones.
Además, denunciaron presiones mineras para no subir las regalías y por eso exigen garantías. Además, quieren asegurarse que la reforma de Ganancias, con el premio a la Patagonia, sea ley en la Cámara baja.
En el video que filmó junto a Gadano, Carambia sostuvo que "La prioridad no es la ley Bases, sino los jubilados. Entendemos que primero debemos trabajar en el paquete fiscal, para que en el eventual caso que sea aprobado, el gobierno no tenga ninguna excusa de ayudar a los jubilados. Por eso le pedimos a los senadores que no demos cuórum. Es la única forma de poder saber si la Cámara de origen ratifica lo que hicieron los senadores. Y después, podemos tratar el resto", reclamó el senador.
Dividir las sesiones no es una idea nueva: era un pedido del santacruceño que había adelantado Letra P y ahora reflotó.
Ilusión peronista
Según supo Letra P, este lunes se gestó la rebelión santacruceña. Gadano se reunió con el jefe del bloque de Unión por la Patria, José Mayans, quien se mantuvo en su despacho hasta las 23 buscando acuerdos. En el peronismo hay mucha expectativa en frustrar los proyectos: consideran un éxito haber logrado dividir los debates de la ley ómnibus y la reforma fiscal. Cristina Fernández de Kirchner intervino en las gestiones.
Fue clave para esa decisión el apoyo de las chubutenses Edith Terenzi y Andrea Cristina, cercanas al gobernador de Chubut, Ignacio Torres (PRO). La dupla será decisiva para la Casa Rosada en cada votación. En UP negocian con ambos aprobar la ley ómnibus y, recién cuando la versión con modificaciones, tratar la reforma fiscal. Alcanzaría con una moción de orden. Ahora, los santacruceños reclaman lo contrario.
En caso de prosperar la ley ómnibus, sin esos dos votos las chances de modificaciones crecen. Una podría ser la eliminación de las facultades delegadas, que como indicó Letra P, constituyen el eje de la ley ómnibus y corren riesgo de aprobarse. Es que tampoco quieren votarlas el radical Pablo Blanco, otro de los que circuló en las últimas horas por el tercer piso de Unión por la Patria.
Lousteau pedirá cambios en todos artículos, con conseguir un voto más, los obtendrá.