El entorno del gobernador, acusado por el cristinismo de rupturista, devuelve el golpe. CFK llamará este martes a Kicillof. Señales en medio de la balacera.
Axel Kicillof lanza el MDF en La Plata.
En La Plata aún retumban los ecos de los dichos de Cristina Fernández de Kirchner, quien confirmó que será candidata a diputada provincial por la Tercera sección electoral. En el entorno de Axel Kicillof lo tomaron con cautela: “Nada nuevo”, respondieron. Pero también devolvieron el golpe al advertir que, para el cristinismo, la unidad sólo es posible si es con “Axel chiquitito y dominado”.
La línea que responde a CFK sostiene que el gobernador impulsa una ruptura funcional: le permitiría “maquillar” una eventual derrota y, al mismo tiempo, disputarle la conducción del espacio a la expresidenta. En ese marco, no hay interlocución entre ambos sectores, pese a que todos se pronuncian públicamente a favor de la unidad. Este martes, la expresidente llamaría al gobernador, según dejó trascender la intendente de Quilmes y coronela camporista, Mayra Mendoza.
El kicillofismo dice que el anuncio de Cristina no fue una sorpresa. “No hubo nada nuevo, venimos trabajando con esa hipótesis desde el día de la reunión de ocho horas”, dijo a Letra P una fuente del entorno más cercano al mandatario bonaerense. La frase alude al último encuentro entre Kicillof, Máximo Kirchner, Sergio Massa y un grupo reducido de intendentes, donde le anticiparon al gobernador que si desdoblaba la elección, CFK competiría por la Tercera sección.
En los días previos, dos ministros bonaerenses ya habían hecho referencia a esa eventual candidatura. El titular de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, advirtió que podía “generar dificultad” si no era consensuada, mientras que el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, consideró que CFK sería “una gran candidata”, aunque aclaró que “hay que discutir entre todos” quiénes son los mejores postulantes.
En el entorno del mandatario provincial prefieren no ampliar más allá del mensaje político que dejó el acto del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), donde Kicillof convocó a construir un frente opositor al presidente Javier Milei que, además, defiende la gestión en la provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, las acusaciones del cristinismo no pasaron desapercibidas. “Los que quieren romper son ellos y no se animan a decirlo”, retrucó una fuente con despacho en calle 6. Y agregó: “Nosotros trabajamos para la unidad”.
“La unidad que proponen es con Axel solo, chiquitito, unido y dominado”, dijo a este medio alguien de trato cotidiano con el gobernador. “Del lado de Máximo y compañía dicen que quieren unidad, pero dinamitan todos los puentes, generan acciones para romper y hacen declaraciones explosivas a los medios. Que sean sinceros con la gente y se la banquen”, completó.
Desde diciembre del año pasado no hay contacto entre CFK y Kicillof. Tampoco se retomaron los diálogos tras confirmarse la candidatura de la exmandataria. “Es lo que estamos reclamando y esperando desde hace semanas”, dijeron cerca del gobernador. Es martes, la intendenta Mendoza sugirió que la expresidenta llamará en la próximas horas a Kicillof.
La última reunión con Máximo Kirchner y Sergio Massa fue hace más de un mes. Luego de que el cristinismo impulsara en la Legislatura bonaerense un proyecto para implementar elecciones concurrentes, las conversaciones quedaron en suspenso.