Manifestantes de la CGT marcharon hacie el Congreso contra el decretazo de Milei
Manifestantes de la CGT marcharon hacia Tribunales contra el decretazo de Milei.
La CGT, los gremios de estatales y docentes alineados en las dos CTA, el peronismo bonaerense, los movimientos sociales y la izquierda sacarán a la calle este miércoles la primera gran protesta callejera contra la política del gobierno de Javier Milei, con una movilización al Congreso que se realizará en el marco de un paro general de la central obrera que afectará el transporte, los bancos y la administración pública.
En medio de un frente de tensión y cruces con el Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich, que anunció que se aplicará el Protocolo Antipiquetes en la marcha, los organizadores esperan una concurrencia masiva no sólo desde los gremios y los movimientos sociales, sino de sectores de la sociedad afectados por las políticas del gobierno de Milei, como la cultura, las pymes y la comunidad científica. Las estimaciones hablan de un piso de 100 mil personas, pero en la CGT los más optimistas esperan al menos el doble de concurrencia.
Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña, los tres secretarios generales cegetistas, serán los oradores centrales del acto desde el escenario que se montará sobre la Avenida Entre Ríos, de espalda al Congreso, donde también se leerá un documento con los cuestionamientos centrales al proyecto de ley ómnibus -que el jueves se tratará en el recinto de Diputados- y el DNU del presidente Milei.
La concentración, convocada para las 13, será el acto central del paro general de 12 horas -desde el mediodía hasta la medianoche- que la CGT convocó a fines de diciembre pasado, a poco de conocerse el decreto de necesidad y urgencia y en un marco de confrontación abierta con el gobierno de Milei, que no dio ninguna señal de intentar acercar posiciones con los dirigentes sindicales, a los que nunca convocó.
Para la CGT, la de este miércoles será la primera foto del plan de lucha contra el gobierno libertario y mostrará una imagen de unidad opositora frente al intento de Milei de avanzar con políticas de reforma del estado, privatización de empresas, reforma laboral. "Va a ser masiva", adelantó Daer, en respuesta a la decisión del gobierno nacional de descontar el día a quienes adhieran a la medida de fuerza y abrir una línea para que trabajadores denuncien supuestos aprietes sindicales para plegarse.
La medida de fuerza se cumplirá a 45 días de iniciada la presidencia del libertario y será la más rápida que la CGT le haga a un gobierno desde la vuelta a la democracia. A Fernando de la Rúa le hicieron el primer paro a los 80 días de gestión y con Mauricio Macri hubo un período de 16 meses hasta que se llamó a la huelga. El último paro general fue en 2019, en el último tramo del gobierno de Cambiemos. La central no hizo medidas de fuerza al ex presidente Alberto Fernández, una decisión que alimentó un caudal de críticas por parte de la dirigencia del ahora oficialismo.
El paro tendrá, se anticipa, un alto impacto, por la adhesión que fue sumando incluso de los gremios más dialoguistas. Camioneros, transporte, sanidad, bancarios, construcción, entre otros, son las actividades en donde más se hará sentir el paro, pero también entre Empleados de Comercio, luego de que el titular de ese gremio, el dialoguista Armando Cavalieri, confirmada la adhesión del sindicato con mayor cantidad de afiliados en todo el país.
A la protesta de la CGT, además de la CATT, que reúne a los sindicatos de Unión Ferroviaria, la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Taxis, Camioneros, Dragado y Balizamiento, Vialidad, peajes y aeronáuticos, y el gremio de los Metrodelegados, se suman la organización de los trabajadores estatales, ATE (Asociación de Trabajadores del Estado) y UPCN (Unión de Personal Civil de la Nación). También adhirieron más de 40 federaciones y sindicatos nucleados en la CTA Autónoma.
Pero la convocatoria superó los límites de las organizaciones sindicales. A la marcha se sumarán sectores del peronismo, con el gobernador Axel Kicillof con presencia confirmada, además de la movilización de intendentes del conurbano y La Cámpora, aunque la participación de Máximo Kirchner todavía está duda. El gobernador bonaerense fue uno de los que impulsó el apoyo del peronismo a la medida de fuerza, con una reunión la semana pasada junto a su colega de La Rioja, Ricardo Quintela, intendentes, legisladores y ministros de su gobierno con la cúpula cegetista.
Se espera que la marcha afecte el tránsito en las calles y avenidas aledañas al Congreso, por lo que la previa está marcada por las tensiones y cruces entre la dirigencia sindical y Bullrich, que adelantó que este miércoles aplicará el protocolo para evitar mediante el uso de la fuerza que se interrumpa el tránsito.
Después de una reunión con autoridades del área de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, conducida por Diego Kravetz, desde la CGT se infirmó que había habido un acuerdo para que las columnas de manifestantes ingresarán exclusivamente por Avenida de Mayo, desde la Avenida 9 de Julio hacia la Plaza de los dos Congresos, y que la organización garantizaría la circulación de bomberos, ambulancias, autos con emergencias y el ingreso y egreso de frentistas en toda la traza.
En el Ministerio de Seguridad porteño respondieron con una versión opuesta, aclarando que no permitirán de ninguna manera la interrupción del tránsito.