La audiencia por la reimpresión de las boletas complica a La Libertad Avanza: sin tiempo y todos en contra
No alcanzan los plazos para diseñar, imprimir y distribuir otra papeleta. Catalán dice que hay plata. Las pistas sobre la decisión que tomará la Justicia.
Junto a representantes del Correo y de la Dirección Nacional Electoral, el ministro del Interior, Lisandro Catalán, llevó informes sobre costos y plazos para la reimpresión de la boleta, todos datos que intentan mostrar que es factible la reimpresión de boletas.
También estuvieron representantes de al menos siete de las quince alianzas que compiten en la elección -todas plantearon el rechazo al pedido libertario-, y el apoderado de La Libertad Avanza, Luciano Gómez Albariño, quien abrió y cerró el encuentro argumentando, pese a los datos que se expusieron, que es posible realizar la elección en tiempo y forma reemplazando las boletas.
Unas horas antes el Juez con competencia electoral, Alejo Ramos Padilla, había resuelto que corresponde que la lista la encabece Karen Reichardt y no Diego Santilli, como pretendía el gobierno. Esa resolución y un eventual fallo en contra de la reimpresión de las boletas, serían apelados por La Libertad Avanza, según dejaron transcender fuentes del Gobierno.
Malas noticias para La Libertad Avanza: no hay tiempo
Respecto de los tiempos de reimpresión de la boleta, el informe presentado por Catalán dice que “el proceso de reimpresión desde el inicio de puesta en marcha de las maquinarias hasta su entrega en el Distrito arroja un total de CINCO (5) días por cada lote, los cuales equivalen a TRES MILLONES TRESCIENTOS MIL (3.300.000) boletas, correspondientes a la sumatoria de productividad de todas las imprentas”. Según explicó después el funcionario, el proceso total llevaría nueve días ya que se irían entregado por lote.
A su vez, desde el Correo informan que para garantizar la distribución de las boletas en la provincia necesita hacerlo entre el 16 de octubre al 23 de ese mismo mes, por lo que con todos los plazos ajustados la impresión debería comenzar este sábado 11. Imposible. Hay una pila de mecanismos en el medio que se estarían obviando.
Apoderados en la audiencia por la BUP
Fue la secretaría electoral la que los explicó en la audiencia. En primer término, si se habilitara la reimpresión primero habría que tener el diseño de la nueva boleta y esta debería ser aprobada en audiencia, enviarlo a las imprentas y que se envíen las pruebas -que suelen tener fallas- para su aprobación final.
Pero, además, una vez que se imprimen las boletas, sigue todo un proceso de chequeos de las papeletas mismas que implican varios pasos para ver que estén en condiciones, escaneadas y finalmente con los bolsines armados para su distribución.
Desde la secretaría electoral marcaron en la audiencia que “hay un control estricto cuando llegan las boletas, se revisan cerca de 40 mil talonarios, ocurren diferentes cosas que van demorando como por ejemplo fallas de impresión”. También dijo que para la primera entrega de boletas tardarían en armar los bolsines tres días poniendo a trabajar a cien personas.
LLA no puede pagar, Catalán sí porque ahorró
Sobre el costo de la reimpresión de las boletas de la audiencia se desprendieron dos datos claves: La Libertad Avanza no puede pagarlas y el ministerio del Interior tiene los fondos necesarios para afrontar ese gasto.
Según el informe de Catalán el costo de la reimpresión de las boletas sería de $12.169.655.000. Aunque quisiera, La Libertad Avanza no podría afrontar ese gasto porque no se lo permite la legislación vigente. La ley de financiamiento de los partidos políticos dice que cada partido tiene un límite de gastos de algo más de 5 mil millones de pesos, y el Código Nacional Electoral establece que la impresión de la Boleta Única Papel está a cargo del Poder Ejecutivo Nacional.
Pero el ministerio del Interior, según dijo su titular, está en condiciones de afrontar ese gasto. En primer lugar dice que hay una partida presupuestaria ya asignada, por lo que no necesitaría una nueva licitación. Pero, más importante aún, afirmó que los fondos están disponibles porque del presupuesto total para la elección se “ahorraron” 15.5000 millones de pesos que se pueden utilizar y que de no hacerlo volverán al Tesoro.
Todos en contra
Durante la audiencia hablaron representantes de siete agrupaciones políticas y algunos de los candidatos. Todos se manifestaron en contra de la reimpresión de las boletas. Luego de expresar su buena voluntad y la intención de “colaborar”, el apoderado de Fuerza Patria dijo que “si se modifican las boletas corre serio riesgo de no poder hacerse la elección”.
Desde Propuesta Federal para el Cambio marcaron que “sería una locura gastar 12 mil millones de pesos para reimprimir las boletas”, además de que hacerlo es “materialmente imposible” y que no se pueden “alterar los plazos judiciales”. Desde el Frente Patriota Federal puntualizaron en los tiempos y mostraron que no alcanzan. También manifestaron argumentos en la misma línea las alianzas Proyecto Sur, Provincias Unidas, el FIT y el Movimiento Avanzada Socialista, entre otros. Además, hablaron candidatos como Juan Cruz Ramat, Alberto Samid, o Santiago Cúneo.
El apoderado de La Libertad Avanza esgrimió un argumento insólito: dijo que, como sea, la elección está garantizada porque, ante una eventualidad que haga que no se llegue en tiempo y forma a reimprimir y distribuir las boletas nuevas, están las viejas para garantizar la elección. Pese a esto, durante toda la audiencia sostuvo que es necesario y materialmente posible reemplazar las boletas.
Las pistas que dejó Ramos Padilla
El juez con competencia electoral, Alejo Ramos Padilla, que llevó adelante la audiencia, habló con la prensa y dejó algunos indicios sobre lo que podría ser la resolución que, según afirmó, se dará a conocer entre este miércoles y el jueves.
En primer lugar, durante la audiencia marcó que si se van a reimprimir las boletas todas las agrupaciones tendrían que aceptar y no hacer presentaciones judiciales que demoraran los procedimientos. Algo difícil de garantizar porque todos los espacios presentes se manifestaron en contra.
Por otro lado, en diálogo con la prensa sostuvo que “quedó claro que la situación es muy compleja en cuanto a los tiempos” y que “hay cuestiones jurídicas, hay que ver cómo influye el precedente para otros casos, los costos y otros trabajos que lleva adelante la justicia electoral para que las elecciones se puedan llevar adelante el 26 de octubre”.
A su vez, aclaró que “el ministro del Interior dijo cuáles son los plazos que tiene el Correo Argentino para la impresión y distribución”, pero “lo que también hay que considerar son los plazos de impugnación, apelación, si hubiera habido un consenso unánime de todas las fuerzas políticas los plazos procesales no deberían ser tenidos en cuenta, esa es otra circunstancia que también se tiene que analizar”.