Un pasito para el frente, un pasito para atrás. La coreografía a lo Xuxa que viene presentando el Gobierno en el culebrón de las dietas y los sueldos impone una pregunta inquietante: ¿Javier Milei y su casta libertaria son o se hacen?
El culebrón de las dietas y los sueldos que protagoniza el Gobierno es una coreografía de Xuxa. ¿Torpeza? ¿Amateurismo? ¿Cinismo?
Un pasito para el frente, un pasito para atrás. La coreografía a lo Xuxa que viene presentando el Gobierno en el culebrón de las dietas y los sueldos impone una pregunta inquietante: ¿Javier Milei y su casta libertaria son o se hacen?
Con la venia de la vicepresidenta Victoria Villarruel y el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem(primera y tercero en la línea de sucesión del Presidente) y los votos favorables de los bloques libertarios, las dos cámaras del Congreso se aumentaron un 30% los sueldos.
Como el resto de sus 256 colegas, Menem cobró este mes $2.174.887 en concepto de dieta de diptado nacional, el equivalente a 10,72 sueldos mínimos de 202.800 unidades de la misma moneda.
Con un decreto que lleva su propia firma, la del jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y la de la titular de la cartera de Capital Humano, Sandra Pettovello, el Presidente se aumentó el sueldo y se lo aumentó a su gabinete un 48%.
Como la suba rige desde el 1 de febrero, el jefe del Estado puede jactarse de casi empatarle a la inflación de los dos primeros meses de su gestión (25,5% en diciembre + 20,6% en enero da un acumulado de 51%) en un contexto de paritarias que vienen cerrando a la baja, incluso en los gremios más poderosos.
Con el autoayudín, Milei, que vino a terminar con los privilegios de la política, a meterle motosierra a las prebendas de la casta y bla bla bla, pasó a cobrar $6.025.801, el equivalente a 29,14 sueldos mínimos.
En el caso de las dietas del Congreso, Menem dijo que la culpa es de una resolución de 2001 que las engancha con los sueldos del resto del personal del Congreso.
Además, destacó que "es la primera vez que el Poder Legislativo actualiza como docentes", se lamentó de que "los diputados no cobran antigüedad ni título ni aguinaldo" y pataleó: "Todos los jueces cobran más". Con todo, prometió sortear su sueldo, como hacía Milei en su etapa de legislador, entre 2021 y 2023.
No alcanzó la argumentación. Milei lo retó en público y lo mandó a voltear el aumento. Papelón. Primer tiro en los pies del relato.
El aumento del sueldo presidencial y del gabinete también es culpa de otro. De otra. "Me acaban de informar que producto de un decreto firmado por la expresidenta Cristina Kirchner en el año 2010, que establecía que los cargos políticos siempre debían cobrar más que los empleados de la administración pública, se otorgó un aumento automático a la planta política de este gobierno", pataleó también Milei, en el atardecer del sábado, con una carta que publicó en Twitter.
"Me acaban de informar" versus su firma en el decreto. ¿Firma sin mirar, el Presidente? Que alguien lo cuide.
Aceptando que eso pudiese ocurrir, ¿no se dio cuenta de que cobró dos millones más que el mes anterior? ¿Nadie en el gabinete chequeó el saldo de su cuenta sueldo? El ministro del Interior, Guillermo Francos, dijo que no, que él no. "No me he fijado", le respondió la pregunta a radio Mitre. No sea malo, Guillermo.
Otra vez para atrás, como Xuxa. Milei anunció que el decreto se cae. Segundo tiro en los pies del relato. Segundo papelón en 48 horas.
"En un momento de crisis como el actual, en el que la sociedad argentina está realizando un esfuerzo heroico, los políticos tienen que ser los primeros en poner el hombro", se golpeó el pecho el Presidente y decretó: "Se acabó la joda de la política".
¿De qué crisis habla Milei? ¿A qué esfuerzo heroico se refiere, si paga la casta? Para muestra, cuatro botones de Letra P.
- La motosierra de Milei tira los sueldos por el tobogán: todas las paritarias, a la baja, escribió Eugenia Muzio el 21 de febrero pasado. "Un informe de la consultora de Martín Redrado expone cuánto cayeron en cada gremio. Licuación, inflación y una recesión que moderará las negociaciones", cuenta la nota.
- La motosierra de Milei taló 40% del gasto en Salud y 38% en la ANSES, escribió Guillermo Villarreal el jueves pasado. "El recorte global es del 29% y alcanza a otras áreas sensibles de la administración pública. Paralización de partidas y programas sociales a cero", precisó.
- Déficit fiscal: a Caputo no lo salvó ni la licuación de la plata de los jubilados, escribió el mismo periodista este sábado y detalló que "los gastos corrientes disminuyeron 29,5%. Las mayores caídas se concentraron en jubilaciones y pensiones (33,9%), Asignación Universal por Hijo (4,4%), asignaciones familiares (27%), PAMI (41,1%), provincias (89,8%), energía (61%) y transporte (68,6%)". Todo casta.
- La motosierra de Javier Milei hizo caer casi un 24% el poder de compra de alimentos, informó Francisco Basualdo en otra nota publicada este sábado, en la que explica que "el fogonazo inflacionario y la devaluación" empujaron a los salarios a "un deterioro del 25%".
Confirmado: la ráfaga de disparos que han descargado el Presidente y su casta en los pies del relato libertario habilita la pregunta: ¿Son o se hacen?
¿Son tan... (completar a gusto la línea de puntos) como parecen?
¿Son tan poco profesionales como parecen?
¿O el país asiste a la emergencia de una nueva casta capaz de practicar el arte del cinismo como no había visto hasta ahora?