Horas después de conocerse el fallo que suspendió el recorte de la coparticipación federal que recibe Chubut, acompañado de sus colegas patagónicos, el gobernador de esa provincia Ignacio Torres, del PRO, dio por “saldado el conflicto”, desestimó la amenaza de cortar el suministro de gas y petróleo e invitó al presidente Javier Milei a un congreso de la región.
Sin embargo, el chubutense advirtió sobre un futuro litigio judicial de las provincias patagónicas con la Nación por el control de las represas hidroeléctricas.
“El árbitro de esta discusión fue la Justicia. El Gobierno podrá apelar, tendrá otras instancias. Pero para nosotros está saldado”, se refirió Torres al conflicto por la coparticipación, durante una conferencia de prensa en el salón azul del Senado de la Nación. Reconoció que la Corte intervendrá si acepta el per saltum que pedirá Milei. "No está mal", respondió.
Participaron los gobernadores Alberto Weretilneck (Río Negro), Rolando Figueroa (Neuquén), Sergio Ziliotto (La Pampa) y, por zoom, Claudio Vidal (Santa Cruz). Gustavo Melella (Tierra del Fuego) adhirió pero no pudo viajar por “cuestiones de agenda”.
Cita para Javier Milei
Con el conflicto terminado, Torres convocó a Milei a participar de una agenda patagónica que incluirá un congreso el jueves 7 de marzo, en Puerto Madryn, con la presencia de gobernadores y legisladores.
“Es ridículo dar una pelea entre unitarios y federales, cuando lo que necesita Argentina es unidad. No es tiempo de dar discusiones muy sofisticadas: tenemos que garantizar la salud y la seguridad; y el Gobierno debe arreglar la macroeconomía y lo apoyamos”, apuntó el mandatario.
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Pese a que el Presidente nunca lo llamó, Torres le propuso al sumar a “a una agenda de desarrollo patagónico que nos permita participar con más divisas y agregarle valor”. Destacó que la mitad de los dólares que ingresan al país proviene de las provincias australes.
Weretilneck fue el encargado de decirle a Milei que “está invitado” al evento de Puerto Madryn. Ziliotto, en único representante de Unión por la Patria en la conferencia, cuestionó “el ajuste a la clase media", el DNU 70/30, conocido como decretazo, y pidió que la agenda patagónica se traslade al Parlamento. “En Argentina hay que discutir todo: el Congreso debe funcionar plenamente”.
Por Zoom, Vidal convocó a un acuerdo entre todos los gobernadores y cuestionó “la violencia mediática” del Gobierno. Figueroa anunció que discutirán los subsidios energéticos para las provincias productoras. “Tenemos una pampa húmeda en el subsuelo”.
La pelea por las represas
Torres advirtió sobre un conflicto por el control de las represas hidroeléctricas de la región, cuyas concesiones nacionales vencieron y son reclamadas por los gobernadores.
“El primer respeto tiene que ser la Constitución Nacional. Ahora viene la discusión por las represas hidroeléctricas. Todos coincidimos en que el poder concedente es de la provincia. Seguramente, el Gobierno va a pelear para que sea de la Nación. Tenemos que ir a la Justicia y probablemente se resuelva. No tiene que ser un Boca-River”, propuso el chubutense.
Como explicó Letra P, los mayores conflictos son por el control de las represas hidroeléctricas sobre los ríos Limay y Neuquén, cuyas concesiones vencieron el año pasado. Los gobernadores Weretilneck y Figueroa exigen ser consultados para tomar decisiones.
Ocurre que las licitaciones fueron realizadas antes de la reforma constitucional de 1994, que le dio el poder de los recursos hidrocarburíferos a las provincias. Por ahora, el Gobierno no definió si la tendrá en cuenta.
La grieta por el DNU
Torres arribó al Senado poco antes de las 17 y se reunió con los representantes patagónicos de esa casa en el despacho de la rionegrina Mónica Silva.
Como explicó Letra P, a varios gobernadores patagónicos no les agradó que la presentación fuera en el Senado y le pidieron a Torres que la hiciera en la Casa de Chubut. El mandatario se negó, decidido a mostrar músculo político en la casa de las provincias.
De todos modos, el exsenador tuvo un momento incómodo cuando le recordaron que sus dos representantes en la Cámara alta (Andrea Cristina y Edith Terenzi) no firmaron la nota que el resto de los patagónicos suscribió este lunes para pedirle a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, que convoque a una sesión para tratar el decretazo. Aún sin la dupla chubutense, los votos para rechazarlo ya están.
“No hablamos de temas legislativos”, respondió el gobernador. Cuando le volvieron a consultar, trató de evadir la respuesta. “Está casa tiene que laburar. No hay que tenerle miedo a que se legisle”, desafió y recordó que antes de este conflicto con Milei, era el patagónico que más lo ayudaba. “En Chubut, vamos a favor de la ley ómnibus”, apuntó, en alusión al voto del diputado Jorge Ávila. Luego su relación con la Casa Rosada se complicó.