El intendente radical exige a las empresas contribuir con la infraestructura local a cambio de permisos de construcción. El trato con Creixa. El impacto.
Gustavo Benedetti, intendente de Arroyito.
El intendente de Arroyito, Gustavo Benedetti, logró mantener activa la obra pública en la ciudad ubicada al este de Córdoba mediante acuerdos público-privados. Esta estrategia permite que, a pesar de las dificultades financieras que afectan a otros municipios, la ciudad continúe desarrollando infraestructura para la comunidad.
Mientras en gran parte de la provincia los 427 municipios enfrentan la paralización de obras por falta de financiamiento, Arroyito destaca por su capacidad de gestión. Desde hace más de cuatro años, se aplica una ordenanza de revalorización inmobiliaria que exige a las inversiones privadas contribuir con obras a cambio de permisos de construcción.
Un ejemplo reciente es la empresa inmobiliaria Creixa, que ha realizado una obra significativa: 427 metros de pavimento sobre la calle Mariano Moreno, completados con iluminación, veredas perimetrales y forestación.
Esta obra no solo mejora la accesibilidad al Club Deportivo y Cultural Arroyito, sino que también impulsa el desarrollo urbano en la zona oeste.
Además del pavimento, la colaboración con Creixa incluye la construcción de tres plazas y más de mil metros de red de cloacas, lo que mejora la conectividad con nuevos barrios y amplía los servicios esenciales. Esto refuerza la apuesta del Ejecutivo Municipal por obras que benefician a la comunidad a través de una sólida asociación con el sector privado.
Con estas iniciativas, Arroyito se posiciona como un ejemplo de cómo la cooperación entre el Estado y empresas privadas puede continuar generando infraestructura en tiempos de crisis.