Trump se metió en el conflicto con un bombardeo "espectacular" sobre instalaciones nucleares iraníes. Mercados alterados y la inflación, bajo fuego.
Donald Trump escala la guerra en Oriente Próximo con un ataque "espectacular", según sus palabras, sobre Irán.
NALa decisión de Estados Unidos de intervenir en favor de Israel en la guerra que el Estado judío venía sosteniendo en soledad contra la República Islámica de Irán elevó al máximo nivel la tensión global y sembró dramáticos interrogantes sobre el alcance del conflicto y su impacto en la economía del planeta.
El sábado por la noche, aviones estadounidenses bombardearon las tres grandes bases nucleares iraníes: Fordow, Natanz e Isfahán, que resultaron “completa y totalmente volatilizadas”, según confirmó el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien, con esta decisión, echó por tierra sus promesas de campaña de no llevar a la potencia occidental a "aventuras" bélicas y elevó a un nivel histórico la tensión con uno de sus máximos enemigos.
Trump confirmó el ataque lanzado sobre Irán en un discurso que pronunció desde la Casa Blanca, en el que calificó la operación, denominada Martillo de Medianoche, como "la mejor" y más “espectacular” que se recuerda jamás. “No hay ejército en el mundo que pueda hacer lo que hemos hecho esta noche”, dijo el mandatario.
“Irán, el matón de Oriente Medio, debe aceptar la paz", agregó el estadounidense y advirtió "Si no llega rápidamente, iremos contra más objetivos, con precisión, rapidez y destreza”.
“Todos los aviones se encuentran ahora fuera del espacio aéreo iraní (y) regresan sanos y salvos a casa. Felicidades a nuestros grandes guerreros estadounidenses. No hay otro ejército en el mundo que hubiera podido hacer esto ¡AHORA ES EL MOMENTO DE LA PAZ! Gracias por su atención a este asunto“, expresó Trump en un mensaje a través de las redes sociales.
La respuesta de Irán encendió más alarmas. El ministro de Exteriores, Abbas Araghchi, avisó que su país, lejos de rendirse, sólo retomará negociaciones después de responder al ataque estadounidense. “Tenemos variedad de opciones” para hacerlo, dijo a la prensa.
Una de las primeras repercusiones da cuenta del potencial de la escalada del conflicto: Rusia, la potencia europea con la que Trump ha venido coqueteando en el marco de la guerra de Ucrania, condenó la intervención norteamericana en Irán, a la que consideró “irresponsable”.
A través de un comunicado, el gobierno de Vladimir Putin condenó "enérgicamente los ataques perpetrados esta madrugada por Estados Unidos contra varias instalaciones nucleares en Irán tras los ataques israelíes acometidos contra la República Islámica”, al tiempo que denunció que el ataque “viola gravemente el derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU independientemente de los argumentos presentados" y evaluó "especialmente alarmante" que "los ataques hayan sido llevados a cabo por un país miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU”.
Se espera que la escalada del conflicto en Oriente Medio impacte en la dinámica de los mercados internacionales y que sume presión al precio del petróleo, que ya había subido en los primeros días posteriores al ataque inicial de Israel sobre la infraestructura nuclear de Irán.
"El ataque ordenado en la noche de este sábado por un imprevisible Donald Trump pone en riesgo no solo a la seguridad de toda la región, sino que tensa aún más la economía mundial en medio de la guerra arancelaria que el presidente estadounidense mantiene con el mundo", reportó el diario El País.
“Creo que la incertidumbre cubrirá los mercados, ya que ahora los estadounidenses de todo el mundo estarán expuestos. Esto aumentará la incertidumbre y la volatilidad, especialmente en el petróleo”, le dijo Mark Spindel, director de inversiones de Potomac River Capital, a la agencia Reuters.
Letra P advirtió sobre las consecuencias locales del conflicto en una nota publicada el 13 de junio. "El aumento del casi 9% del barril de Brent en la Bolsa de Wall Street provocado por el ataque de Israel a Irán genera un aumento en el valor de las exportaciones del petróleo de Vaca Muerta y el precio de las naftas en el mercado interno, ambos atados a las variaciones internacionales del crudo".
La escalada bélica aumenta la amenaza de un shock externo que condicione el proceso de desinflación que el gobierno de Javier Milei viene cuidando como oro y sosteniendo a como dé lugar como su principal activo en el camino hacia las elecciones legislativas del 26 de octubre.
"Los analistas temen que ese alza del petróleo incida, como es lógico, en la inflación y en la política de tipos de los bancos centrales", señaló El País, y agregó que, además del petróleo, "otro gran afectado es el gas natural, que ya se había disparado antes del ataque estadounidense, cuando el conflicto se circunscribía a un enfrentamiento entre Israel e Irán.